𝙑𝙚𝙞𝙣𝙩𝙞𝙘𝙪𝙖𝙩𝙧𝙤

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Habían pasado dos semanas desde el accidente de Roberto, él aún no salía de su habitación y no le gustaba que nadie entrara a verlo, nadie excepto yo. Todas las noches entraba a verlo sin que nadie se diera cuenta, leía un capítulo del libro y corría de regreso a mi habitación

—Ya me voy a dormir.— avisé a los chicos después de cenar

—Necesito hablar contigo.— habló Cry y todos lo miramos —¿Podemos ir a tu habitación un momento? Es que es importante.—

Yo sabía que Cry hablaba mucho y de cosas triviales, seguramente nos tardaríamos horas, no quería aceptar porque tenía que ir con Roberto como todas las noches

—No puedo, hablaremos mañana.— dije corriendo escaleras arriba y dejandolo sin palabras

Corrí por el largo pasillo hasta que llegué a mi habitación, entré, cerré la puerta, me puse mi pijama, arreglé mi cabello, lavé mi cara y por fin estuve lista para salir de nuevo con dirección a la habitación de Roberto.

Abrí la puerta para asegurarme que nadie estuviera en el pasillo y corrí hasta llegar frente a su puerta, abrí y cerré rápidamente. Cuando me dí la vuelta para verlo pude ver a todos junto a él

—¿Qué haces aquí?.— preguntó Barca y yo jugué nerviosamente con mis manos

—¿No era que tenías mucho sueño?.— preguntó ahora Ded

—Dejenla, solo vino a decir buenas noches.— mintió Roberto —Diario viene solo para despedirse, no es como que se quedara a dormir aquí.—

—¿Ustedes que hacen aquí?.— pregunté

—Veniamos a platicar con Roberto, no nos había dejado entrar aquí desde hace días así que vinimos todos para que no tuviera otra opción.— respondió Juan

—Bueno, ya me voy a dormir ahora sí.— hablé dispuesta a irme —Hasta mañana.—

Me giré para abrir la puerta de nuevo

—Espera.— escuché la voz de Roberto y lo miré —No te puedes ir, te falta algo.—

Pude ver qué con su dedo tocó su mejilla ¿Quería un beso de buenas noches? Nunca me había pedido eso, sabía que lo hacía ahora solo para molestar a Barca

—¡Casi lo olvido!.— dije con una sonrisa y me acerqué a donde estaban todos

Agarré a Cry y besé su frente, después agarré a Ded, Juan, Barca y Roberto para hacer lo mismo con cada uno. Todos me vieron sorprendidos pero Roberto rió

—Buenas noches.— se despidió Roberto y yo asentí con una sonrisa

Salí de aquella habitación para dirigirme a la mía, al parecer hoy no tendría la lectura nocturna que siempre tenía. Caminé por el pasillo hasta que sentí una mano en mi hombro que hizo que me detuviera

—Necesito hablar contigo.— la voz de Barca retumbó en mis oídos

Tomó mi mano y me jaló a su habitación, después cerró la puerta, yo solo me quedé parada sin saber que pasaba

—Bien, te quería preguntar algo.— empezó a hablar y yo solo lo miré atenta —Sé que estos últimos días hemos estado un poco separados y que tú en este momento te llevas mejor con otros aquí como Cry o Roberto.—

—¿Y la pregunta?.— reí y él me miró antes de soltar un suspiro

—¿Sientes algo por Roberto?.— preguntó

No podía sentir nada por él, habían pasado casi dos meses desde que terminé mi espontánea relación con Barca y sabía que en el fondo aún sentía algo o al menos eso creía

—No, ¿cómo podría sentir algo por él? Es tan molesto y lindo pero más molesto.— respondí nerviosa

—Yo solo quiero que tú seas feliz ¿está bien?.— habló y lo miré confundida —Si en algún momento sientes que serías feliz con él no voy a interferir.—

—Siento un dejavu.— exclamé pensando un poco —Y volviendo al tema, soy feliz así, no siento cosas por él ni por nadie.—

—¿Ni por mí?.— preguntó acercándose y quedando a centímetros de mí

Sentía su respiración en mi cara y yo simplemente quise alejarme unos pasos pero él puso su mano en mi cintura para evitar que me alejara

—¿Qué haces?.— pregunté en susurro mientras veía sus ojos

—Me gustas.— recordó sin alejarse —Y para mí no hay mejor sentimiento que tenerte cerca.—

Me besó y tardé unos segundos en corresponder aquel beso, todo empezó a subir de intensidad y yo decidí terminar con aquel momento

—Esto está mal Barca.— dije controlando mi respiración, él seguía sujetando mi cintura evitando que me alejara

—Solo quédate conmigo esta noche.— pidió y lo miré confundida —Mañana si quieres olvídame, sé feliz y haz felices a todos, solo te pido que te quedes conmigo hoy.—

Seguía confundida y él por fin me soltó, tomó mi mano y caminamos juntos hasta sentarnos en su cama

—¿Te pasa algo?.— pregunté y él me miró con una mueca, aún no soltaba mi mano

—Siento que te estoy perdiendo, sé que hice cosas mal y que aún no me perdonas completamente pero tampoco me has dado la oportunidad de demostrarte que estoy arrepentido por todo.— exclamó soltando un suspiro

—¿No te he dado la oportunidad?.— pregunté —Te escuché y acepté todas tus disculpas, prácticamente solo te pedí un poco de espacio.—

Él pareció meditarlo un poco y se levantó para buscar algo en su armario, yo solo lo miraba intrigada hasta que por fin sacó algo que reconocí de inmediato

—Este es el cómic que me diste el día que nos conocimos.— dijo sentandose de nuevo junto a mí

Me lo dió y pude verlo a detalle, nunca lo había leído completo porque me quedé con el cómic estropeado y habían algunas páginas rotas o mojadas que no se veían bien

—Quedate está noche y lo leemos juntos.— ofreció

—Está bien.— sonreí emocionada, realmente quería leer eso

—¿En serio?.— preguntó y lo miré confundida —¿No dirás algo como "No me puedo quedar porque los chicos lo van a malinterpretar"?.—

Reí mientras me acostaba en su cama, realmente suena a algo que yo diría

—¡Es que no importa eso, importa el cómic!.— exclamé y él también rió mientras se acostaba junto a mí

Él puso su brazo detrás de mi cabeza, así como si fuera mi almohada pero yo decidí mejor recostar mi cabeza en su pecho.
Empecé a leer el cómic en voz alta mientras hacía los efectos de sonido, Barca solamente reía y de repente acariciaba mi cabeza

El tiempo pasó, 30 minutos me tardé para acabar de leerlo y darme cuenta que era el mejor cómic de la historia. Miré a Barca y al parecer ya estaba dormido, sonreí mientras tomaba una cobija para cubrirnos, me acomodé mejor sobre su pecho y cerré mis ojos para dormir

𝐅𝐑𝐀𝐓𝐄𝐑𝐍𝐈𝐃𝐀𝐃 (Esos 4 + Tú) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora