𝐅𝐑𝐀𝐓𝐄𝐑𝐍𝐈𝐃𝐀𝐃 (Esos 4 + Tú) ✓

𝙏𝙧𝙚𝙞𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙣𝙪𝙚𝙫𝙚

—Buenos días.— la voz de Barca hizo que me despertara, traía una bandeja con algunos platos así que lo miré confundida —Te traje el desayuno a la cama.—

—Que lindo pero quiero desayunar con mis amigos, como normalmente lo hago.— exclamé dispuesta a levantarme pero él tomó mi mano para impedirlo

—Solo faltas tú en desayunar.— avisó ¿Los demás habían desayunado sin mí? —Ded tuvo que ir a su trabajo así que se despertó más temprano, Juan y Roberto salieron a comprar alguna cosas, Cry desayunó con Rocío y yo quise traerte el desayuno para desayunar juntos.— explicó

—Hubieras desayunado con Rocío tú también, por algo están saliendo ¿no?.— pregunté recordando todo lo que había pasado la noche anterior

—Ya te dije que solo fué una mala broma de ella, no estamos saliendo.— respondió —La única persona que me interesa eres tú y seguiré esforzándome para demostrártelo.—

Lo miré y él sonrió un poco, no tenía razón para estar enojada con él, realmente no había hecho nada malo ¿o sí? Ayer cuando lo ví salir de mi habitación pensé que era porque él había roto a Bodoque pero resulta que fué porque él había atrapado a Rocío y quería hacer que ella se disculpara.

—Desayunemos entonces.— sonreí también

Empezamos a comer entre risas y bromas por parte de Barca, me estiré y tomé mi cámara para tomarle una foto mientras reía, no tenía fotos de él y realmente eso era un desperdicio

—¿Y eso?.— preguntó refiriéndose a la cámara

—Es un regalo de Cry, pensó que mi vida ya era lo suficiente aburrida así que me dió esto para distraerme un poco.— respondí tomándole otra foto

—Que bueno.— dijo con una sonrisa y me quito mi cámara para después tomarme una foto —Sería un desperdicio tener puras fotos de weyes que no se bañan.—

Reímos y él giró la cámara para tomar una foto de los dos juntos, yo sonreí nerviosa, era la primer foto que tenía con Barca.

—Ya basta de fotos.— reí quitandole mi cámara —Hay que seguir desayunando.—

Pasaron los minutos y terminamos de desayunar, él se ofreció a lavar todos los trastes que habíamos ocupado mientras yo me arreglaba así que acepté.

Salió de mi habitación y yo empecé a cambiarme, peinarme y maquillarme un poco, después de algunos minutos ya estaba lista.

Miré a un lado y recordé que detrás de una pequeña mesa tenía mi rosal, una rosa amarilla que barca me había regalado hace unos meses para que la cuidara y durante tanto tiempo había dejado olvidada, era sorprendente como no se había marchitado e incluso lucía como si la estuviera cuidando muy bien. Moví todo lo que estaba a su alrededor para poder verla y recordar que tenía que hecharle agua constantemente.

—¿Ahora eres jardinera?.— escuché la voz de Rocío a mis espaldas así que me giré para verla

—¿Quién te dijo que podías entrar a mi habitación?.— pregunté molesta

—La puerta estaba abierta.— respondió mientras se acercaba a mí —Tienes un rosal muy hermoso.—

—Fué un regalo de Barca.— avisé para molestarla, sabía que él le gustaba y tomaría eso como ventaja

Ella me miró enojada ahora pero después sonrió falsamente

—Sería una lastima si alguien llegara a cortarla ¿no lo crees?.— amenazó —Así como alguien accidentalmente cortó la rata roja que tenías como peluche.—

—Vete de mi habitación, no quiero que destroces más de mis cosas.— dije molesta

—Cuidate bien y cuida las cosas que son valiosas para tí.— dijo mientras miraba todo lo que tenía en mi habitación

Se detuvo en un pequeño mueble donde tenía un dibujo que me había hecho Juan, era el primer regalo que me había dado y lo tenía enmarcado porque realmente me gustaba.

—Mira que lindo.— exclamó mientras lo tomaba y lo veía a detalle —¿Lo hizo Juan?.—

—Deja eso dónde estaba por favor.— pedí y me acerqué para intentar quitárselo pero era imposible

—Seria una desgracia si alguien lo tirara.— dijo y acto seguido lo aventó contra una pared, el ruido del vidrio del marco rompiéndose estallo en mis oídos

Me sentía enojada pero sabía que esto si tenía solución, solamente tendría que comprar un marco nuevo para el dibujo

—No puedo creer lo que acaban de ver mis ojos.— la voz de Cry hizo que ambas lo miraramos —¿Qué te ocurre loca?.—

Se acercó a mí y tomó mi brazo, almenos uno de los cinco había presenciado como ella venía a arruinar mis cosas

—Todo fué un accidente.— respondió ella nerviosa

—Ví como aventaste eso a propósito, no fué ningún accidente.— exclamó él —Pidele una disculpa a _____.—

Ella me abrazó y me quedé paralizada ¿Qué estaba haciendo ahora?

—Perdoname hermanita, yo no quise hacer eso y tú lo sabes.— mintió y realmente era buena actriz, salió corriendo de mi habitación mientras tapaba su cara

—¿Le creíste sus disculpas?.— preguntó y yo negué

—Ella tiene algo en mi contra, nada de lo que hace es por accidente.— dije —Nadie me cree cuando digo que esa chica es una bruja, finje ser buena frente a ustedes.—

—No te preocupes, yo te creo ahora.— dijo y tomé su mano con una sonrisa —Si te está molestando hay que sacarla de aquí.—

¿Realmente quería aliarme con Cry para sacar a Rocío? Es lo mismo que quisieron hacer los chicos cuando él llegó y yo me opuse, debía pensarlo bien pero por lo mientras había logrado convencer a uno, faltaban cuatro.