𝙉𝙤𝙫𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙤𝙘𝙝𝙤

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—Tranquila, tu brazo estará bien.— trató de tranquilizarme Axozer mientras esperábamos los resultados de mi radiografía

Estábamos en el hospital central, los chicos de la fraternidad habían ido a comprar bocadillos y Axo se quedó conmigo

—¿Llamaste a Ibai?.— pregunté y él negó

Le había pedido que llamara a Ibai para preguntarle si podría trabajar aún con mi lesión pero al parecer me ignoró

—Primero necesitamos saber que tienes exactamente.— recordó y suspiré

—Quizas está es una señal para que no vaya.— exclamé bajando la mirada

Axo acarició mi cabello para darme un poco de tranquilidad pero era casi imposible, me sentía fatal, lo mejor sería que él fuera solo

Minutos después salió el doctor y nos pidió que lo acompañaramos, seguro tenía ya los resultados. Entramos al consultorio y nos sentamos

—Bueno chicos, tengo una noticia buena y una mala.— dijo y mi corazón se aceleró

—La buena.— pedí nerviosa y ambos rieron por mi actitud

—No es una fractura.— afirmó y suspiré aliviada aunque eso no explicaba porque no podía hacer esfuerzo con mi brazo, no podía ni sostener un lápiz —Tienes una microfractura.—

—¿Eso existe?.— preguntó Axo confundido

—En términos médicos no pero es la manera más adecuada de explicar lo que ella tiene.— respondió el doctor —No es tan grave como una fractura pero es más serio que un simple esguince.—

—¿Esa sería la mala noticia?.— pregunté y negó

—Tienes que tener tu brazo en absoluto reposo durante almenos 4 días.— informó —¿Eres zurda?.—

—No, soy diestra.— respondí

—Eso será un problema, tu brazo lastimado es el derecho y como informé necesitarás mucho reposo, no podrás ni siquiera levantar la cuchara para comer un plato de sopa.— dijo —Necesitarás demasiado apoyo durante estos días.—

—Tengo un viaje de trabajo en dos días, ¿Cree que pueda mejorarme para entonces?.— pregunté ahora

¿Porque exactamente 4 días? Quizás podía estar mejor antes

—No es recomendable que fuerzes la recuperación.— murmuró Axozer —Sanará cuando tenga que sanar, no te presiones.—

—Hagale caso a su novio, si no sigues las recomendaciones de un doctor puedes empeorar tu herida.— habló el doctor mientras escribía algo, supongo que mi tratamiento —Si haces esfuerzos en ese brazo puedes ocasionarte una verdadera fractura.—

Suspiré escuchando cómo el doctor había pasado a informar los medicamentos que debería tomar en caso de que me doliera el brazo. Agradecimos y salimos del consultorio encontrándonos con mis amigos en la sala de espera

—¿Cómo les fué?.— preguntó Barca

—Todo está bien, no hay fractura.— respondí antes de que Axo pudiera decir algo —Puedo ir al proyecto de Ibai, no hay riesgo.—

Miré a Axozer y claramente ví como murmuró la palabra "mentirosa", yo simplemente le lancé un beso sabiendo que no les diría a los demás, si ellos supieran no me dejarían ir a la dinámica de Ibai

—Aprovechando que estás bien ¿Puedes cargar está bolsa?.— pidió Ded mientras me daba una bolsa llena de frituras y bebidas —Iré al baño.—

Mientras veía como se iba sostuve la bolsa con la mano izquierda, ocultar mi malestar sería fácil

—Cuando regrese Ded podemos ir a cenar juntos.— propuso Barca y todos asentimos —Encontré un lugar buenísimo, les encantará.— 

—Yo no creo que pueda acompañarlos, tengo que ir a buscar unas cosas antes de viajar a lo de Ibai.— exclamó Axo y lo miré —Fuí a tu casa para mostrarte un pequeño anillo que encontré y pensé inmediatamente en ti.—

—¿Anillo?.— preguntó Juan al fondo —¿Ya se van a casar?.— preguntó burlón

—No digas tonterías.— dijo Roberto molesto y no pude evitar hacer una mueca

Me giré para darle la bolsa a Juan y tomé la mano de Axozer para alejarnos un poco de los demás y seguir con la plática sin interrupciones

—Ten, es para tí.— dijo sacando un pequeño anillo del bolso de su chaqueta, era hermoso, tenía un pequeño corazón

Tomó mi mano para ponerlo en mi dedo, me quedaba perfectamente

—Gracias.— sonreí

—Te veré mañana en tu casa, si tu brazo no mejora llamaré a Ibai para cancelar tu participación.— dijo y lo miré mal

—¿Ahora eres mi representante?.— pregunté y él rió

—No pero soy tu novio y me preocupa tu seguridad.— respondió despeinado mi cabello —Cuidate.—

Besó mi frente y se alejó para salir del hospital, yo solo miraba como se iba, cuando ya no pude verlo regresé a dónde había dejado a mis amigos

—No está bien que dejes a tus amigos que vinieron al hospital exclusivamente por tí.— se quejó Ded, al parecer ya había vuelto

—Perdón pero necesitaba privacidad para despedirme de Axo.— sonreí mostrándoles cuidadosamente mi mano que traía aquel anillo, era el brazo que casi no podía mover —Miren esto.—

—Es muy lindo pero no lo enseñes.— pidió Roberto con una sonrisa fingida, sabía que aún le dolía un poco

—Si, no seas presumida.— dijo Juan riendo mientras jalaba fuertemente mi mano para ver el anillo más de cerca

No pude evitar quejarme por el dolor que había sentido, los chicos me miraron extrañados

—¿Te dolió?.— preguntó Juan soltando mi mano —Perdón, pensé que no te había agarrado tan fuerte.—

—No me dolió, tranquilo, mi mano está bien.— mentí y caminamos directo a la salida

—Yo pensé que mínimo te enyesarian la mano.— se burló Barca mientras salíamos del hospital

—Volvamos al tema de la comida, ¿dónde iremos?.— cuestionó Ded y los demás reímos

Subimos al auto para ir al restaurante que Barca recomendó, yo miré preocupada mi brazo que no había dejado de doler desde que Juan me jaló, solo tenía que resistir dos días sin preocupar a mis amigos, así podría viajar con Axo y Juan a trabajar en el proyecto de Ibai

𝐅𝐑𝐀𝐓𝐄𝐑𝐍𝐈𝐃𝐀𝐃 (Esos 4 + Tú) ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora