𝐅𝐑𝐀𝐓𝐄𝐑𝐍𝐈𝐃𝐀𝐃 (Esos 4 + Tú) ✓

𝙎𝙚𝙨𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙘𝙪𝙖𝙩𝙧𝙤 (3/4)

Pequeño maratón pq lxs ami mucho 💗
————————————————————

Estaba en mi habitación revisando las notas que los chicos me habían regalado, llevaba toda la tarde convenciendome de que había tomado una buena decisión al irme, después de todo era feliz con ellos y en primer lugar yo no quería venir a España.

Miré a un lado y tenía una de las fotos que me había tomado con los chicos antes de venir a España, ahí su éramos una familia unida, ellos no me sobreprotegian y yo no quería hacer nada más que estar con ellos

—¿Puedo pasar?.— preguntó Juan entrando a la habitación y asentí dejando la foto a un lado

—¿Ya te vas a dormir?.— pregunté viendo que ya tenía su pijama puesta —Dejame organizó esto.—

Junté rápidamente las notas que se encontraban esparcidas en mi cama pero Juan tomó una

—Esta la escribí yo.— dijo mientras me la daba

“Siempre se me quedará tu sonrisa grabada en mi alma”

Lo miré intrigado y simplemente sonrió

—¿Qué significa esto?.— pregunté riendo

—En el momento que la escribí no significaba nada, solo la saqué de una canción.— explicó y ambos reímos —Ahora pienso que significa que no importa la distancia, si eres feliz, estaré feliz.—

—Aun no entiendo.— exclamé y ahora él sonrió

—Noté lo dudosa que estás por irte con nosotros o quedarte.— suspiró —Mientras seas feliz no te preocupes por nosotros, sabremos afrontar tú decisión.—

—Yo quiero ir con ustedes.— aclaré

—Sabemos que no es así, solo te sientes presionada y no sabes que decisión tomar.— dijo y era totalmente cierto

—Estoy confundida Juan, simplemente es eso.— dije tratando de quitarle importancia

Él suspiró y me ayudó a guardar las pocas notas que aún estaban en mi cama, después se recostó a mi lado

—¿Qué es lo que quieres hacer?.— preguntó

—Solo necesito una semana para aclararme.— dije

—¿Y después de esa semana crees que estarás lista para irnos?.— preguntó y asentí dudosa

—Quiero más tiempo aquí, ya tengo amigos que no quiero dejar.— confesé —Pero tampoco me quiero alejar de ustedes.—

Juan solo sonrió y tomó mi mano

—Te ayudaré.— dijo y lo miré intrigada —Nos quedaremos una semana más, de eso me encargaré yo.—

—¿Qué hay de Ari?.— pregunté —¿No la extrañarás?.—

—Obvio que la voy a extrañar.— respondió —Pero puedo llamarla, además quizás no estaría con ella si no fuera por tí, te debo esto.—

Sonreí y lo abracé aún estando acostados, no lo había notado hasta ahora pero él era mi mejor amigo y realmente lo amaba

—¿Puedo pedirte un favor ahora?.— preguntó mientras lo soltaba y asentí —No más mentiras, no más huidas ni acciones que te pongan en peligro.—

Reí mientras tomaba de nuevo su mano

—Te prometo no hacer nada que me ponga en peligro de nuevo.— dije

—Ahora pensemos en una idea para hacer que nos quedemos una semana más.— pidió y ambos miramos al techo de la habitación

—No soy muy buena para inventar mentiras.— exclamé

—No será una mentira, solo será una buena excusa que quizás no sea verdad.— dijo

—Eso suena a lo que significa una "mentira".— dije y ambos reímos

Nos quedamos en silencio y tomé a bodoque para abrazarlo fuertemente

—¡Tengo una idea!.— exclamó y ví como tomó su celular para escribir algo rápidamente

—¿Qué haces?.— pregunté sin entender que es lo que hacía

—No nos iremos.— dijo y me mostró su celular —Cancelé los vuelos de regreso.—

¡Estaba loco! Ellos se darán cuenta y sabrán que Juan me está ayudando, entonces se enojaran y harán un gran show

—Se lo que piensas y no lo notarán.— rió —El único que revisa este tipo de cosas es Ded y no lo hace hasta un día antes del vuelo, para ese entonces será muy tarde.—

—Sabes que estarás en muchos problemas por esto ¿no?.— pregunté riendo y él asintío

—Los problemas valen la pena si son por alguien que amas.— dijo y sonreí

—Gracias Juanito.— dije y me levanté de la cama para buscar algo en mi armario

—¿Qué haces?.— preguntó y saqué la gorra que me había regalado el día que viaje

—Quería devolvertela, sé que es tu favorita.— dije y ví como negó con la cabeza

—No puedes devolver algo que te regalan, eso está mal.— exclamó

Tenía razón pero quería hacer algo por él

—Entonces déjame invitarte mañana a desayunar.— pedí

—¿Comida gratis? No me puedo negar.— dijo y reímos

—Está decidido.— exclamé y me volví a acostar junto a él

Nos la pasamos platicando un poco, le conté de Axozer y Karchez, como los había conocido y lo divertidos que eran, realmente me caían muy bien

—Ese chico, Axozer ¿te gusta?.— preguntó

—No me gusta.— respondí con duda —Solo llama mi atención, fué mi primer amigo aquí, le tomé mucho cariño.—

—Si no te gusta ¿Por qué estás dudando en irte con nosotros?.— cuestionó

—Con él me siento libre.— respondí —Es diferente a todos ustedes.—

—¿Y Barca? ¿Y Roberto?.— preguntó ahora —¿Convertiste tu triángulo amoroso en un cuadrado?.—

—¿Qué piensas que debo hacer?.— pregunté suspirando

—No quiero que esto suene mal.— exclamó —Tu primera opción es Barca, lo intentaste y no terminó bien porque descubriste que era un acosador.—

—Pero ya lo perdone.— recordé

—No me interrumpas.— pidió —Tu segunda opción es Roberto, le gustas pero nunca llegan a nada serio, además desde que te conoce te trata mal, él te confunde más.—

—No lo había pensado así.— murmuré

—Date el tiempo para conocer a Axozer, quizás él sea el bueno.— aconsejó —Posiblemente él sea la solución a tu confusión.—

—¿Desde cuándo eres tan bueno con los consejos?.— pregunté riendo

—Nunca fuí bueno dando consejos pero espero que te sirvan de algo.— respondió —Si no sirven iremos a terapia juntos.—

Reímos juntos y por fin nos acomodamos para dormir, aún no sabía que hacer pero estaba segura que era tiempo de pensar en mí y en mis emociones.