Pestañas largas y tristes (poemas)

El mundo son emociones

Oh,

Mi forma de ser es borrosa. Mis palabras son distraídas, quiero oírme a mí. A veces actúo por ese fantasma y no por mis verdaderas ganas de seguir. Pero, este fantasma ya me acostumbró, ahora no puedo salir de él, solo me queda ver las cosas desde su pecho y sentir las ráfagas de viento que me dicen que estoy y estaré bien.

Es mi vida, hombre, pero no sé si estoy bien. Al rato volveré a mis ganas de querer ser solitario por siempre, no hablar con nadie, y a sentirme insuficiente porque uso la soledad como escudo para que no me lastimen otra vez.

Porque soy mágico, y no lo sé. La gente me ama, y no entiendo. No es que me odien siempre, no es que me vean como idiota, es solo mi sentir. Y estoy atrapado aquí. Mis obras más hermosas salen del dolor, pero ¿y yo? Siento que mi vida es un proyecto de prisas, de "producir", de estar callado para no equivocarme. «Mejor cállate y aíslate, así no se van contra ti». No lo sé, instantes como estos me dicen que no estoy sintiendo al 100% por mí. Pero ¿qué hago? El fantasma viene y no me puedo negar.

Estoy vivo. Te quiero tronar los oídos. Me mostraré frente a ti. Viviré, aunque sienta que mis antiguas palabras son de alguien más y fueron escritas por mis monstruos más oscuros fingiendo que son buenos y optimistas. Mi vida aún no despega. Mis emociones están cegadas y manipuladas. Perdón por ser tan malvado, vida. Perdón por no seguir tu ritmo ni admirar tus rosas rojas sin intentar sacar provecho inspiracional, tantas cachetadas me han hecho hacerlo.

Soy un guerrero. El mundo son emociones. Y estaré aquí en la mierda, pero algún día saldré. Este es mi capítulo. Algún día cambiará y sabré que hice arte en la oscuridad sin importar que sentí que me pudría. Seguí feliz. Seguiré. Cada etapa es una emoción. Soy poderoso.