Amaba la inocencia de Hangeng, el chino era sumamente dulce y amable sin mencionar que demasiado ingenuo. Había viajado a China por motivos de trabajo, y su ex compañero había sido lo suficientemente amable para recibirlo en su casa y así evitar lo desgastante que era quedarse en un hotel.
–Voy a salir tengo una grabación Heechul-ah, puedes quedarte y desempacar tus maletas- Hangeng le deposito un beso en la frente sonriéndole con amor y saliendo del departamento.
–Perfecto- el castaño se estiro sonriendo con tranquilidad debía salir a grabar en unas horas más, aprovecharía el tiempo libre para acomodar sus cosas, darse una ducha y comer lo que le había dejado preparado sus mejor amigo, un rico plato de arroz frito chino.
Con calma acabo lo que debía hacer, vestía una de sus pijamas rosas aún faltaban muchas horas para irse al trabajo, se paseaba por el departamento husmeando las cosas de Hangeng, le daba mucha curiosidad todo lo relacionado con su mejor amigo era interesante ver cómo era la vida del chino.
Aburrido de tanto revisar tomo asiento en el sillón desparramándose sobre este, mientras tomaba su computadora para pasar el rato, sin contar que no podía hacer mucho estando en china, en eso de la comunicación se veía demasiado limitado, recordó que había guardado una página que bien se veía en ese país y con rapidez busco el URL, exploro con calma hasta que dio con su cometido, se había quedado en una buena parte de su lectura; había encontrado una historia muy interesante donde los personajes sufrían por su amor pero aun así no podían vivir el uno sin el otro –Esperemos si le diga a Hannie lo que siento- sonrió ante lo estúpido que sonaba eso, estaba leyendo un fic Hanchul bastante dramático pero aun así lo tenía atrapado.
Horas después había avanzado en su lectura, al ver lo rápido que había pasado el tiempo corrió a cambiarse, debía estar en el foro en 45 minutos y con lo mucho que tardaba en cambiarse se vería en problemas. Cerro la computadora suspendiéndola y salió del departamento corriendo como desquiciado se le había hecho muy tarde.
Hangeng llego al departamento ya entrada la noche, la calma y las luces apagadas indicaban que el mayor no estaba en el departamento sin contar el tiradero en la cocina, se llevó la mano a la nuca resoplando con tranquilidad, ese cochinero le indicaba que no era un sueño, Heechul estaba ahí con él, se dispuso a limpiar en lo que llegaba el mayor, no iría a recogerlo al trabajo, Zhoumi se había ofrecido a ir por él. Quien sabe de cosas tenían que hablar esas divas.
Un sonido lo hizo dejar lo que estaba haciendo, la computadora de Heechul se encontraba suspendida sobre el mueble, el pobre aparato pedía energía, busco el cargador por todas las maletas que el chico tenia y al encontrarlo la conecto. Tentado por la curiosidad abrió la laptop, tecleo la obvia contraseña de Heechul e ingreso a sus archivos, una foto de Heebum aparecía de papel tapiz cosa que lo hizo sonreír. Continúo explorando las carpetas del chico, fotos con los otros miembros, canciones, videos hasta que una página en internet algo rara lo hizo dar clic.
Estaba en shock, era un fic entre él y Heechul, sabia cuanta imaginación tenían las fans y que decir del gusto de su amigo por esas lecturas, pero esa historia era algo dramática bastante triste y ya lo tenía enfrascado, no podía dejar de leer se acomodó en el sillón para continuar leyendo.
Abrió la puerta con cuidado, todo estaba a obscuras ¿acaso Hangeng aún no había llegado? La luz proveniente del sillón le dijo lo contrario, de puntitas se acercó al mueble quedándose quieto por completo, el chino estaba ahí con las gafas puestas leyendo algo en su computadora ¿No sería qué? ¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda!
– ¡No lo leas! ¡No lo leas!- grito lo suficientemente fuerte para hacer gritar y saltar al mayor –Dios- boqueo con fuerza quitándose la portátil de las piernas – ¿Qué? ¿Qué sucede?- se levantó aun asustado. Heechul se cruzó de brazos – ¿Que estabas haciendo chino?- el menor paso su mano por la nuca riendo nerviosamente –Estaba leyendo la historia de tu computadora- demonios era lo que se imaginaba.
Le iba a gritar hasta de lo que se iba a morir ¿Cómo osaba invadir su privacidad? Cuando los brazos del contrario lo apretaron con fuerza –yo no te haría eso…- susurro bajito el menor – ¿De que estas hablando?- confundido pregunto correspondiendo al abrazo –yo no te dejaría ir, no como en el fic, no permitiría que la distancia nos separara- Heechul sonrió apretándose contra el –Eres un tonto Hannie, yo no dejaría que me dejaras de nuevo- el chino se separó suavemente de él sonriendo con dulzura –Tienes razón no nos dejaremos ir nunca-.
*Bizarro asi como me gustan xD ¡No me culpen! se me fue la inspiracion porque me mandaron a misa xD ¡Yo digo que fue un exorcismo! jajja okya ;3
