Bajo del auto bastante apenado, el traje no era necesariamente cómodo para conducir, algunas partes eran duras y otras demasiado ajustadas, pero por el capricho de su princesa tenía que ceder.
Mucha gente lo miro extraño antes de subir al departamento casi corriendo siendo impedido por el maldito disfraz ¡Mataría a Kim Heechul! Irritado tomo el elevador apretando el último piso. Heechul le había dicho que Ryeowook y Donghae no estarían, esperaba eso en el fondo de su corazón ¡Si lo vieran con el traje de Ikki el ave fénix seria la comidilla de todo el grupo hasta el final de sus días!
Di dos golpes lo suficientemente fuertes, de pronto se sentía nervioso y algo apenado es decir... Heechul tenía las fantasías más extrañas, era obvio que no iría a un evento de cosplay vestido así, se ruborizo ante tales pensamientos; el sonido del pestillo lo hizo reaccionar, la puerta fue abierta con cuidado, al menos Heechul había tenido la decencia de no hacerlo quedar en ridículo.
-Oppa llegaste- el mohín de la preciosa "Asuka" lo hizo endurecer, el coreano vestía como la chica de Neon Genesis Evangelion -Pasa Oppa- la melodiosa voz lo hizo reaccionar, entro al departamento sin antes no dejar de mirar las blancas y torneadas piernas del chico enfundadas en una falda azul algo corta y pegada.
Llegaron al sillón, Heechul tomo asiento cruzando sus piernas y acomodando su rojizo cabello a un lado -Toma asiento Oppa- esa maldita forma de hablar, tenía ganas de abrirle las piernas y hundir su enormidad en él. -Entonces... Ikki- Heechul lamio sus labios con encanto comenzando a acorralar a su "caballero del zodiaco"
-Muéstrame tu ave fénix- lo admitía abiertamente, la situación era demasiado erótica, tomo las caderas de la pelirroja montándolo sobre él, simulando envestidas por encima del traje.
Heechul se encontraba con la cabeza y hombros colgando hacia abajo mientras el chino lamia sus piernas, cerró los ojos lanzando gemiditos dignos de un anime hentai.
Hangeng tenía al chico con la cabeza colgando y las piernas en sus hombros torturando a su princesa. Tomo los bordes de la faldita alzándola para sonreír lujuriosamente, las bragas rosas le habían encantado a veces se preguntaba que se le metía en la cabeza a su pareja pero después recordó lo único que era Heechul, sin quitarlas las bajo exponiendo el duro y necesitado miembro del mayor, se inclinó lo suficiente para darle un lamenton haciendo al contrario suspirar, continuo sus lamidas un rato más haciendo retorcer al contrario de placer puro.
Alzo con cuidado al piel lechosa recostándolo en el sillón completamente retiro por completo las bragas, volvió a tomar las piernas de su chico pasándolas por sus hombros la falda se alzó dejando al coreano semidesnudo; Hangeng estaba por quitarse el traje -No, ah... déjatelo... es parte de mi fantasía...- gruñendo por bajo se bajó los slips dejando salir su duro y babeante miembro, sin preparación previa se hundió de forma animal en Asuka haciendo gritar al chico, un gemido de placer puro, no espero que el contrario se acostumbrara para comenzar a moverse de forma bestial.
Los rechinidos del sofá más los grito de Heechul y el sonido de pieles sonar al tocarse hacían un ruido erótico por todo el lugar -AHHHHHHHHHHH- el gemido más agudo del mayor al sentir como se venía sobre su abdomen manchando parte de su falda y el traje del otro.
Al sentir las paredes internas de Heechul ceñirse contra su duro miembro y una última embestida descargo parte de su semen en el interior del chico, a mitad del orgasmo se salió de su interior, para tomar con una mano su miembro sacando el resto de esencia y llenar el rostro, boca y peluca del contrario haciendo cerrar los ojos del mayor.
-Sucio...- suspiro el coreano cansado tomando un poco de semilla del chino para lamerla -ah... aunque es delicioso... sabe a ti... me encanta- Hangeng se dejó caer sobre el sin antes quitarse parte de la armadura y el casco quedándose en esa peluca azulada respirando erráticamente.
-Enfermo... eso fue demasiado... eres un pervertido ¿te lo han dicho?- lo miro ceñudo mientras el mayor se quitaba el semen de su rostro con un pañuelo
-Pero te encanto admítelo- susurro besando su frente -es que te veías tan sexy que no pude evitarlo... llevaba una erección conmigo cada vez que te recordaba vestido así... recuérdame felicitar a los productores por la estupenda idea- los brazos de Hangeng se ciñeron contra su cintura... no cabe duda que para deseos y fantasías de Heechul siempre estará el chino para complacerlos.