Capítulo 7

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–¿Qué clase tienes después de esta? –Mi novio me preguntó y lo miré.

Estábamos caminando hacia mi cuarta clase que era biología. Me encantaba esa asignatura, pero él la odiaba, más bien odia todo lo relacionado con la escuela.

–Geografía. –respondí– Después formación cívica y ética.

–Te tocan las clases más aburridas. –Comentó con diversión y suspiré.

No respondí ante ese comentario, no quería terminar discutiendo con él (aunque fuera en juego) tenía muchas cosas en la cabeza.

–¡Odio tu horario! –Reclamó y yo reí con un poco de ternura.

–Amor, es el último año. –solté una risa– Ahora imagínate a los de primer año.

–Pobres criaturas.

El día de ayer la escuela nos informó que habría un pequeño cambio en los horarios: todos los grupos ya no tendrán las mismas clases, ahora iban a mezclar alumnos y me gustaba por el hecho de poder "socializar" con más personas. Lo que más me gustaba es que tendríamos diferentes materias a las que ahora tenemos. Sentía que era un caos.

–Joaco, ve todo esto por el lado positivo. –comenté y me miró– Habrá días en los que no traeremos uniforme. –Sonreí.

–Nada de faldas y vestidos. –Hice un puchero y me crucé de brazos.

Tenía que intentarlo.

Las únicas clases que compartía con mi novio eran inglés y matemáticas. Había momentos en los que me hacía muchas preguntas sobre la escuela: ¿Por qué cuatros años? ¿Por qué el cambio de horario? ¿Qué ganas tenían de mezclar a los alumnos?

Después de unos segundos vi a Jason correr hacia la clase, cuando paso a mi lado me dio una mirada, sonrió y continuó corriendo. Parecía un caballo desbocado. Me quedé observandolo hasta que lo vi llegar al salón, en ese momento sentí la mirada de mi novio.

–¿Qué ha sido eso? –Me preguntó.

–¿Qué cosa?

–Las miradas, no te hagas.  –Reí.

–Solo lo he mirado, no exageres. –Le respondí con tranquilidad.

–¿Qué no exagere? –preguntó con ironía– Lo seguiste con la mirada. ¿Te gusta, no es así?

Suspiré. –No Joaquín. Él no me gusta, yo estoy contigo y eso es suficiente.

–Eres mi novia y solo mía. –Habló en un tono dominante.

–Solo tuya, mi amor. –Me detuve para besarlo dulcemente. Él sonrió.

Después de unos segundos nos separamos y continuamos caminando hacia mi clase. Mi novio se quedó pensando por unos segundos y cuando reaccionó, me tomó del brazo con un poco de fuerza.

–¿Qué pasa? –Le pregunté.

–¿Acaso ese no es el idiota que golpeé la semana pasada?

Sabía que en cualquier momento me iba a preguntar eso.

–Sí.

–Si te hace algo solo dime y yo me encargaré de romperle la cara. –Habló, fingiendo tranquilidad y suspiré.

–Está bien.

Jason no se atrevería a hacerme algo, no porque mi novio lo hubiera golpeado, sino por nuestra amistad.

–Vamos, llegarás tarde. –Murmuró.

Continuamos caminando hasta que llegamos a mi clase, la maestra aún no llegaba. Mi novio se despidió, entré al salón y después vi como él comenzaba a correr hasta su salón.

CELOSO • SKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora