ALL X TAKEMICHI

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Los tres chicos se dirigieron a la residencia Hanagaki para poder encontrarse con los chicos, como habían tomado el tren para ir a todos los lugares tardarían una hora en llegar a la casa, subieron al tren y muchísima gente entró porque era la hora pico, así que quedaron apretujados adentro, Izana se separo de ellos, pero Kakucho logró tomar a Takemichi y ponerlo en las puertas del tren para que no sea aplastado pues era muy pequeño.

-Gracias Kaku-Chan, espero que Izana este bien.

-No te preocupes él, estará bien, es muy fuerte, así que si quiere puede empujar a todos a un lado para que lo dejen respirar-dijo soltando una risita, estuvieron viajando y platicando un buen rato cuando alguien empujó a Kakucho haciendo que acorrale a Takemichi-lo siento no quiero apegarme a ti para no hacerte sentir incómodo, pero la gente sigue enpujandome.

-No te preocupes por eso, y oye estaba pensando tu y yo tenemos la misma edad, tu cumpleaños acaba de ser también, naciste el primero de junio, feliz cumpleaños, aunque creo que ya es un poco tarde para felicitarte-dijo un poco triste, no había podido felicitar a su amigo de la infancia, se sentía culpable porque el había echo mucho por él.

-No te preocupes por eso, no estoy enojado ni nada, aparte como puedes ser tan pequeño para que seamos de la misma edad, yo ya mido 1.70-dijo burlándose de Takemichi quien se enojo por eso y trato de golpearlo pero en eso el tren hizo un movimiento brusco haciendo que ambos quedarán cara a cara, y se quedaron mirándose por varios segundos. Cuando Takemichi fue más temprano al orfanato y Kakucho vio su cambio había quedado embobado otra vez por el chico y ahora en esta situación que veía su cara más de cerca podía ver sus bonitos ojos azules que parecían dos lagunitas brillantes y si prestabas atención tenía pequeñas pecas por su nariz, eran casi invisibles pero lo hacían ver bonito, empezó a acercarse poco a poco haciendo que Takemichi se empezará a poner nervioso pero tampoco se podía apartar así que solo cerró los ojos esperando a que llegara el beso lo cual nunca ocurrió porque Izana había llegado justo cuando estuvo apunto de suceder.

-¿Qué se supone que estás haciendo?-dijo enojado y mirando a Kakucho como si lo fuera a lanzar fuera del tren-te dije que no podías ponerle un dedo encima.

-Izana, déjalo en paz él no hizo nada malo, la gente nos tiene aquí acorralada, no puedes enojarte con él-Takemichi empezó a regañar a Izana quien también fue obligado a disculparse, si a Izana le hubieran dicho hace algunos meses que un enano raro, que vestía mal, era amable y decía incoherencias muchas veces durante el día, iba a traerlo en la palma de su mano y no iba poder negarle nada, hubiera reído por lo que escucho y después golpearia a la persona por decir eso.

-Tsk-rechisto mientras tomaba la mano de Takemichi y lo sacaba del tren-vamos a casa, Kakucho apúrate no te quedes atrás.

Siguieron caminando y Izana no había soltado aún la mano del menor quien en su otra mano traía a Juan Cho de una de sus patitas delanteras.

-Kaku-Chan agarra su otra patita para que no vaya colgando de lado Juancho, aparte es de los dos.

-Takemichi ya estamos grandes, no quiero hacer eso.

-No digas tonterías y tomale su patita o me voy a enojar-él chico no pudo pelear contra Takemichi y hizo lo que le dijo, sentía sus mejillas arder pero estaba agradecido de que fuera de noche, cuando estaban a unos metros de la casa pudieron observar un grupo de adolescentes esperando enfrente de casa, Takemichi estuvo apunto de salir corriendo a verlos pero sintió un pequeño aprenton en su mano que le decía que no lo hiciera así que solo se espero, cuando estuvieron más cerca les hablo-Chicos, hola, perdón por la tardanza pero venimos desde el parque en tren y luego tuvimos que caminar.

-No te preocupes enano, acabamos de llegar casi-dijo Draken observando al trío.

-Takemichi que es eso feo que tienes agarrado-pregunto Baji.