Capítulo 23

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Nos encontrábamos Sofía, Jessica, Ethan, Alexander y yo en la camioneta de Alexander.

—¿Bien a donde vamos? —Dice Ethan—

—¿A donde quieres ir hermanito? —Digo con una Sonrisa—

—No lo sé ¿se supone que me tienen que sorprender no?

Alexander me mira esperando a que responda y le doy una mirada de que no lo sé. Y el mira A Ethan por el retrovisor.

—Tú hermana -ya que habla de más-, dice que te gusta patinar en hielo.

—Oh por Dios Valeria, andas revelando mis cosas —Dice Ethan boquiabierto-

—Pero...OIGAN! TÚ ALEXANDER COLE DEVILS SMITH! NO VUELVAS A DECIR QUE HABLO DE MÁS O ME BAJO DE ESTE AUTO Y NO ME VEZ MÁS, ¿ENTENDIDO? —Digo mirándolo con los ojos entrecerrados—

—Si señora. —dice asiendo saludo militar y por abajo murmura— vaya dramática esta hecha.

—TE ESCUCHE! —Digo pegándole un pequeño empujón en el brazo, y él se ríe con esa sonrisa tan hermosa que tiene—

Su sonrisa es hermosa...
Tía vaya sonrisa más hermosa tiene, y ni hablar de sus hermosos ojos azules brillantes..

Pero... ¿se supone que tengo que estar enojada no?
¡SI! Eso eso, enojada.

—Y Ethan, no le creas no e dicho eso, es que es muy entrometido y vio la foto que tienes tuya en una pista de hielo haciendo un truco que ni idea de cómo lo haces pero la vio por estar de entrometido, no fui yo que le dije lo juro —digo tan rápido que me falta el aire y pongo una mano en mi pecho y levanto la otra dramáticamente—

—Mhm, ya entonces...¿Iremos a una pista de patinaje cuñado?

—Claro, después podemos ir a otro lugar si quieres.

—Valeria, ¿porque no estuviste con este tipo desde el principio? Ya lo amo —Dice abrazando el brazo de Alexander por los asientos—

—Hey, ¿pero ya, no? Ya pareces más su novio que yo...aunque no...

—Tranquila Pumba, no te lo quitaré.

No puedo evitar rodar los ojos y cruzar los brazos y mirar a la ventana.

—¿Que pasa? —Oigo decir a Alexander-

Yo me quedo callada.

—Te estoy hablando —Vuelve a decir—

—Nada. -Digo- no tengo nada.

—Ajá, ahora dime la verdad.

—¿Porque sois tan pesados? —Pregunto alzando la voz— no tengo nada.

Él se queda callado.

La jodi.

—Oigan, no era para que se peleasen. —Dice Ethan—

—No es...—me cortan—

—Siempre es así. No es nada. —Dice Con voz ronca y dura Alexander—

¿Maldición, porque siempre la cagas con tus jodidos cambios de humor? ¿No te hartas de cagarla? Y el pobre estuvo para mi cuando me dieron el tiro aquel, me ayudo en todo lo que tenía que hacer, me cuenta todos sus problemas, me ayuda con mis trabajos de la universidad, me regala cosas súper lindas, siempre saca tiempo para pasarla juntos, me escucha cuando tengo un problema. Me ayuda a resolverlos, esta ahí para mi siempre. Y tú siempre tienes que cagarla. ¡joder!

Después de Tanto [COMPLETA] [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora