Desde ese día las cosas han estado tensas entre Lucien y yo, no digo que no nos hablemos pero hemos estado más alertas que antes, más paranoicos, más a la defensiva con cualquiera que no sea nosotros dos. Aunque Lucien no ha dicho nada, lian y Nick se han dado cuenta en cierta forma de nuestras actitudes.
Nos han visto con nuestros cambios repentinos de cerradura, número telefónico y correo electrónico.
Por otro lado he hablado con Karla y las chicas está mañana, Karla me ha comentado que Miranda (la hermana biológica de Lucien) ha estado actuando de manera sospechosa, ya no hablan casi, se le nota todo el tiempo nerviosa y aunque Karla ha tratado de hablar con ella; Miranda simplemente la evita a ella y a las demás chicas. No le tomo mucha importancia pero sabía que algo no andaba bien. Le he preguntado cómo están mis padres y me ha dicho que están realmente bien, su actitud indiferente ante mi huida ha hecho que mi ánimo se decaiga un poco.
Por un momento me extrañé de mi propio sentimiento, pero ¿que podía esperar de ellos? ¿Dolor? ¿Tristeza? ¿Que demostraban que me querían? ¿avisando a la policía de mi huida o posible secuestro? Y con esto entiendo que tengo que dejar este capítulo de mi vida atrás no puedo vivir siempre de mis padres, que aunque no esté con ellos mis emociones se ven afectadas por su acciones, cuando claramente esto no puede seguir así.
—Dulcenia vámonos — Lucien ha estado conmigo desde esta mañana, ahora íbamos a salir, que aunque me opuse totalmente en ir — tenemos que hacer varias compras.
—¿Que compras?
—feliz cumpleaños dulcenia, ya son dieciocho años.
Mi cara debió demostrar total desconcierto a sus palabras, mi cumpleaños... ¿Como pude olvidarlo?cuando estuve con lucien en el instituto toda mi infancia, al cumplir años nos íbamos a un pequeño bosque a festejar nuestros días, con el pasar de los años eso se volvió nuestro pequeño secreto, solo nuestro.
— Ya no estamos en el instituto, y tú estás aquí, podemos festejar como quieras — sus ojos reflejan la gran emoción que tiene, para mí ya no es tan importante, pero no le quitaría esa ilusión a Lucien.
—no se mucho de fiestas, ¿Por qué no lo haces tú?
Sus expresión cambio totalmente a una emoción, hace que todo valga la pena, rápidamente se va de la habitación y comienza a llamar a Nick para organizar todo. Me levanto perezosamente de la cama y me dirijo al baño, al verme en el espejo puedo observar un pequeño brillo en mis ojos. Esperanza, es lo que puedo deducir, antes no podía si quiera permitir hablar sobre algún sueño mío que no tenga que ver con la iglesia y el buen comportamiento; ahora tengo tantos planes, tantas metas, que no pienso desaprovechar está oportunidad que me están dando. Me doy una ducha rápida y me visto de manera casual, unos zapatos, falda corta blanca y un suéter morado pastel, salgo de la habitación y veo a Nick en el mueble de la sala.
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Balas y Rosas ©
AcciónLas personas mágicas existen. Aparecen de la nada. Son aquellas que saben ganarse la confianza rápido y de forma inesperada. De pronto un día llegan a tu vida, empiezan a hablar de todo, de alegrías, daños, experiencias, penas y heridas. Cuando te d...