Superman - Jenlisa Gip

Capitulo 4

Empezando el día en la granja de los Manoban, Lisa bajaba las escaleras de la casa, llevaba una camisa roja a cuadros, unos jeans claros de mezclilla y botas, salió de la casa para saludar a su madre, sorprendiéndose un poco al ver una camioneta roja, con un moño azul pegado enfrente, parecía nueva.

-Buenos días mamá.-saludó.-¿Y esto?.-preguntó.

-Es un regalo de Ryder Daniels.-pronunció Siuni dándole un sobre a su hija. Lisa sonrió al instante, lo abrió y leyó "Querida Lisa, conduce con cuidado, siempre estaré en deuda, el maníaco del carro azul".

-No puedo creerlo.-dijo con asombro mirando la camioneta.-¿Y las llaves?.

-Tu padre las tiene.-respondió.-Esta en el granero

Con eso la rubia corrió a el, encontró a su padre triturando maíz en una maquina, traía puestas unas orejeras para el ruido, al instante se las quitó al ver a su hija, caminando hacia el.

-Se cuanto la deseabas hija.-inquirió su padre.-Pero no la aceptes.

-¿Porque no?.-pregunto la rubia.-Es decir, salve su vida.

-Y crees que mereces un premio.-habló de nuevo Marco.

-No me refiero a eso.

-¿Sabes quien es el padre de Ryder Daniels?.-pregunto el señor Manoban.-Es el señor Lionel Daniels, recuerdas a Frank o Paul los que nos vendían calabazas, los que trabajaban con nosotros, pues Daniels los atrajo con sus regalos costosos, compro sus propiedades... y se olvidó de ellos.

-Y ¿planeas culpar a su hijo por ello?.-habló irónica la rubia.

-Sólo quiero que te des una idea, de donde vino el dinero de esa camioneta.-contestó Marco, la rubia dio media vuelta para salir del granero. -Lisi se que estas enojada.-habló el señor Manoban antes de que saliera.-Hija es normal. Lisa tira la mochila al suelo.

-¿Normal?.-preguntó su tono de voz era de áspero, caminó hacia el demoledor de paja y lo encendió. -Que te parece esto ¡¿es normal?!.- metió la mitad del brazo en el.

-¡No!.-rápido su padre jaló de ella hacia atrás, sacando su brazo de la maquina, viendo la manga de la camisa roja destrozada, pero su brazo estaba bien, ni un solo rasguño.

-No me lance a sacar el auto de Ryder, me arrollo a 100 kilómetros por hora.-dijo Lisa exasperada.-Eso te parece normal.-suspiró.-Yo daría todo por ser normal... Marco ante esto pronunció.

-Es momento...

-¿Momento de que?.-pregunto la rubia

-De la verdad.-inquirió el señor Manoban.-Quiero que veas una cosa.-con esto ambos se encaminaron arriba del granero donde estaba el telescopio de la rubia, Marco sacó un trapo gris, lo abrió lentamente hasta mostrar un cuadro metálico con inscritos bastante peculiares.-Creo que esto es de tus padres... de tus padres verdaderos.

-¿Que dice?.-pregunto la rubia.

-He intentado descifrarlo, pero no es ningún lenguaje conocido para el hombre.-respondió el mayor.

-¿A que te refieres?.

-Tus verdaderos padres, no eran de algún lugar cercano aquí.

-¿En donde viven?.-inquirió. Marco miró a la ventana, observando lo azul del cielo detenidamente, Lisa lo observó y de nuevo a su telescopio. -¿Que tratas de decirme?.-pregunto en un suspiro la rubia.-¿Que soy de otro planeta?. En ese instante Marco la miró, la rubia sonrió y dijo irónicamente. -¿Y supongo que mi nave espacial esta en el ático?.