CAPITULO 52

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ADELAIDA

Sus manos recorren mi cuerpo, paran un segundo en mi pequeño abultado vientre, deja un beso y sigue bajando hasta llegar a mi intimida, pasa su lengua por mis pliegues y yo suelto un gemido que se escucha por toda mi habitación.

—Henry...— gimo cuando introduce lentamente un dedo dentro de mí y a la vez usa su lengua.

Comienza a comerme toda mientras mete y saca su dedo, arqueo la espalda en el momento que introduce otro dedo llenándome de placer y humedeciéndome mas.

—Mere otro...— pido —Mete todos...

—¡Adelaida!— abro los ojos de golpes.

Tengo las mejillas calientes, tengo calor y me sonrojo al ver a mi papá de pie en el marco de la puerta de mi habitación.

—Papá...

—¿Que es eso de méreme todos?, si vas a tener sueños eroticos cierra la puerta que hasta abajo se escucha— siento mi cara arder.

—No era un sueño erotico— no se ni que inventar.

—Si como no, te llego algo, baja— desaparece de mi vista y yo suelto un resoplido.

Espero unos segundos y me bajo de la cama, salgo de la habitación para ir al baño en donde me mojo la cara, acomodo mi cabello y cepillo mis dientes.

Tengo días que tengo ganas de sexo, he estado muy caliente por así decirlo y lo único que puedo hacer es masturbarme pensando en Henry, quiero tenerlo aquí, que me toque, que me haga suya, pero no se puede y me frustra más.

Bajo para ver lo que me llego y es un ladrido lo que escucho, en la sala esta mi hermana jugando con un perro y...es Kal.

Es el perro de Henry.

—Mira lo que te llego— le hace cariños al perro.

—Kal— me tiro en el suelo para acariciarlo —¿Que haces aquí?

—En la nota dice que es para que tengas un pedazo de él, que te ama y que ahora es tuyo, un hermano para elefante que está en el cielo— dice mi hermana.

—¿Leíste la nota?

—Se cayó en mis manos justo frente a mis ojos.

Ruedo los ojos.

Tomo la nota y efectivamente, dice todo eso.

"Se que no quieres verme ni recibir mis llamadas, te mando a Kal para que tengas un pedacito de mi, ahora dos de los corazones que más amo están juntos, es un hermano para elefante que está en el cielo y espero que lo cuides un poco mejor que a él.

Te amo, Henry."

Siento ganas de llorar, sonrio y comienzo a hacerle cariños a Kal, el se frota en mi vientre y yo rio, mi hermana está muy emocionada.

—Y te mando la casa, que casi está más grande que está, ya la acomode en el patio, también mando comida y todas sus cosas, este perro vive mejor que nosotros— miro a mi papá.

—Lo adora.

—Y por lo visto a ti también, si te lo mando quiere decir que te tiene mucha confianza— asiento.

—Ya perdónalo Ada, el pobre se escuchaba triste cuando le dije que dijiste que no estabas— miro mal a Lizzy.

—¿Le dijiste que yo dije que no estaba?

—No me pagaste los diez dólares que cobro por recado— niego sin dejar de acariciar a Kal.

Las siguientes horas me la paso jugando con el, cuando el sol se está metiendo lo llevo a su casita y le pongo comida, regreso adentro y voy arriba para ducharme y bajar a cenar.

My Boss | Henry Cavill Donde viven las historias. Descúbrelo ahora