My Boss | Henry Cavill

CAPITULO 63

HENRY

Termino de abotonar mi camisa blanca, me miro al espejo y estoy Perfecto, voy todo de blanco ya que hoy será la revelación de sexo de nuestros bebés así que mi esposa y yo decidimos ir de blanco.

Además de la revelación, hoy es mi cumpleaños así que después de que sepamos el sexo de los bebés iremos a comer para festejar doble.

Salgo del armario y observo a mi mujer sentada en la cama, me mira y sonríe.

—¿Lista mi amor?— niega.

—Me faltan los zapatos, ¿me los pones por favor?— asiento y me hinco frente a ella.

—¿Así?— trató de amarrarlos en sus tobillos lo mejor posible.

—Si mi amor— termino de ponérselos y dejo un beso en sus labios.

Se pone de pie dejándome admirarla, tiene puesto un vestido blanco de tirantes el cual le queda holgado, el escote es en V pero no deja ver nada, el cabello esta trenzado desde la mitad de su cabeza y tiene algunos mechones pequeños sueltos.

Se ve hermosa.

—¿Tengo algo?— inquiere con preocupacion.

—Solo que te ves hermosa— se acerca a mi y me abraza.

—Estos bebés están muy grandes— se queja y yo rio.

—La mamá los alimentan como si fueran diez— rueda los ojos.

—Es que me da hambre— me abraza por el cuello y sonríe —¿Que se siente tener cuarenta y siete?

—Contigo a mi lado siento que apenas cumplí veintisiete— beso sus labios —Tenemos que irnos que nos están esperando.

—Vamos— ahora me besa ella, cuando nos separamos salimos de la habitación.

En el auto no quito mi mano de su vientre como siempre, ella pone la suya cobre la mía y así conduzco.

Los encargados de esta revelación fueron Ben y Lizzy, la menor es la única que sabe el género de los bebés y Ben se ofreció a pagar todo, dijo que era un regalo de Baby shower aunque ha también nos regaló una carretilla muy bien equipada, esta más emocionado que Ada y yo juntos.

Llegamos al lugar donde nos citaron a todos, es un campo con pasto y árboles los cuales están un poco alejados.

Mientras más caminamos vemos la decoración, son unas grandes letras blancas que forman la pregunta de niños o niñas o mellizos, también alrededor de estas hay globos de colores como de un arcoíris.

Todo está hermoso.

—Feliz cumpleaños Henry— me Felícita Ben en cuento me ve.

Todos los que están aquí me felicitan, tardamos al menos diez minutos con todo esto, miro a todos y los colores de su ropa.

Elias tiene puesta una playera polo rosa, Miranda una azul, Gabriel una rosa junto con su esposa, mi suegro una azul, mi papá una rosa y Lizzy rosa junto con Ben.

—¿Están listos?— inquiere la menor ilusionada.

—Claro— respondo con emoción.

Nos ponemos frente a las letras, nos dan unas de esas velas que sacan humo y comienzan con el conteo regresivo de diez segundos.

—Diez, nueve, ocho...siete, seis, cinco, cuatro...— comienzo a sentir cosquillas en el estómago —Tres, dos, uno...

Se escucha un ruido, de mi vela sale humo rosa al igual que el de Ada y cucando volteo atras veo que había protectores que sacaron humo rosa combinando con morado directo al cielo.