32.-Extrañar duele.

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A la hora del recreo añoré nuestras charlas, nuestros besos, abrazos e incluso los silencios, el hecho de tenerte cerca y que me vieras, pero que en serio lo hicieras como solías hacerlo. Entonces te vi a la distancia, riendo con tus amigos y supe que no me echabas de menos o al menos, eras muy buen actor... no lo dudaba, me habías hecho creer tantas mentiras.

Volteaste hacia donde estaba, en más de una ocasión, ¿me veías a mí?, ¿solo me atravesaba en el camino de tus ojos?, yo sí te miraba cuando no te dabas cuenta, solo unos segundos, recordando, pensando, imaginando... pero regresaba de esa nube y volvía mi atención a la conversación de mis amigos, no quería que preguntaran, que se dieran cuenta, mucho menos que lo hicieras tú.

Me dolió, tanto que no pude probar bocado, el pecho se me oprimió y se me cristalizaron los ojos, más no lloré.

Me sentía patética.

No te culpaba, no eras responsable de lo que sentía a estas alturas, de que me hubiera gustado al menos conservar tu amistad visto lo visto, ¿Por qué?, Porque mi estúpido corazón enamorado y roto solo quería estar cerca de ti de la forma que fuera, aun cuando sabe que tal vez tú nunca lo quieras con la misma intensidad, de la misma forma...

Las palabras que nunca leíste.✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora