Nuevo trabajo

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Capítulo 3

Rebecca

Al llegar a la cafetería decido entrar por la puerta de atrás ya que el estado de mi ropa no es de los mejores que digamos. Entro y lo primero que me recibe es la cara de Kia mirándome enojada.

-Ni me diga nada- paso de largo, dejo la bolsa en la barra y sin decir nada me dirijo al los baños para cambiar mi ropa por una seca.

-¿Qué pasó?- pregunta Madison poniéndose detrás de mí. La veo por el espejo.

-Una larga historia- suspiro.

-Tengo tiempo- sonríe.

-Fue un desastre. ¡Casi muero atropellada!- exploto. Es que tan solo recordar lo que pasó me dan ganas de ir a estrangular a ese hombre.

Claro, como si supiera donde está.

-¿Qué?- pregunta confundida.

-Si- cierro los ojos para relajarme, todo lo que he pasado estos últimos meses no me tiene muy bien que digamos.-El muy idiota ni tan siquiera me pidió disculpas- continúo gruñendo acomodando mi cabello castaño en un moño alto dejando algunos cabellos rebeldes fuera de él.

-¿Por eso te tardaste tanto en entregar el pedido?

-Si y....espera ¿Qué? ¿Tú como sabes eso?- arrugo el ceño.

-La señora llamó para decir el mal servicio que le dimos- se encoge de hombros.

-¡Aparte de loca, chismosa!- me giro con los brazos cruzados en el pecho, recargo mi espalda en el lavabo.

-¿Loca?

-Si, se quejó, me mojó - señalo la ropa aún lado de mi -y me cerró la puerta en la cara- bufo, ella ríe y se burla.

-¿Pero estás bien?- pregunta a lo que yo asiento. Nos quedamos unos minutos en el baño mientras le cuento lo que me pasó.

-¡Rebecca!- entra Kia molesta -¡Luisa te llama!- azota la puerta al salir.

-Ya oíste- dice Madison.-¡Luisa te llama!- dice imitando la voz irritante de Kia a lo que las dos reímos.

Kia es una mujer muy gruñona y mandona que nadie la soporta, por lo menos aquí no.

Salimos del baño, Madison se fue a seguir con su trabajo y yo me fuí a la oficina de mi tía. Cuando entré a su oficina mi tío ya no estaba, ella se encontraba sola y un poco molesta por lo sucedido. Le expliqué todo lo que pasó, se preocupó cuando le comenté lo de la calle pero después se le pasó y me siguió regañando.

Bajé de nuevo y seguí con mi trabajo, ya en la noche salimos y cerramos la cafetería. Había turno por la mañana y otro por la tarde, Miranda era en la mañana hasta medio día, ya que por la tarde va a la universidad. Yo por mi parte estoy en el local en los dos turnos ya que no tengo nada que hacer.

Salgo del baño con una toalla en las manos frotando mi cabello para que se seque, me acerco a mi tocador, me siento y abro mi computadora para revisar mi correo con la esperanza de que me hayan aceptado en algún lugar.

Nada, no hay nada.

Suspiro y cierro la computadora recargando todo mi peso en el respaldo de la silla.

-Ya habrá algo- hecho la cabeza hacia atrás suspirando, positiva, como siempre lo soy. Apesar de los constantes rechazos no he perdido la esperanza de que muy pronto me contraten. Esto de buscar trabajo y no encontrar es estresante.

Bajo las escaleras y camino a la cocina, abro el refrigerador y saco leche para comer un poco de cereal. Mis tíos no están, salieron a cenar en plan "romantico" así que la casa es toda mía por ahora.

Mi Corazón Es Tuyo (#1. Bilogía Amor Eterno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora