Inesperada Melodía ✔

Capítulo 48

Bright side of the moon - Christian French

Un año y dos meses después

—¡Corten! Esa fue una excelente toma. Vengan miren que les parece.

Asher junto con Karen caminan con cansancio a las pantallas para ver la toma y les gustó tanto como a mí.

Estamos en etapa de regrabaciones porque nos dimos cuenta de que en ciertas escenas importantes no quedaban tan bien como esperábamos en el producto final.

—Hoy fue una buena jornada, ahora es hora de irnos a descansar y estar frescos para mañana.

Todas las personas del equipo se empiezan a despedir para por fin poder dormir después de grabar toda la noche.

Me estiro al levantarme de mi silla para ir al remolque de Asher para poder irnos.

—Si hubieras hecho repetir esa escena una vez más te juro que te hubiera matado.

—No es mi culpa que antes no haya quedado muy convincente.

—No te gustaba, son cosas distintas.

Dejamos de discutir para tomar un largo sorbo de bebida energética.

Nos subimos a su auto y le mando un mensaje a Cristal para avisarle que acabamos de salir, también de que parecemos zombis y que posiblemente caigamos a nuestras camas a dormir todo el día.

Agarro mi mochila junto con la botella para bajar cuando llegamos a mi casa.

—Descansa.

Asher me pone la capucha de la sudadera.

—Igual, nos vemos otro día.

Agito mi mano en manera de despedida al ver el auto alejarse.

Bostezo al abrir la puerta, pero me doy cuenta de que una luz está encendida. Lo raro es que recuerdo dejar apagada esa luz y dejar solo la que está en la zona donde Maya y Luna suelen dormir.

En ese momento un cosquilleo recorre la punta de mis dedos.

Subo las escaleras con emoción y al entrar a mi habitación están Luna y Maya dormidas a un lado de Tyler.

El cansancio es reemplazado por una felicidad que no puedo explicar, ya que estos últimos meses casi no hemos hablado por nuestros trabajos y verlo me pone completamente feliz.

—¿Tyler?

Pongo mi mano en su mejilla, para luego pasarla por el pequeño rastro de barba que tiene.

Dejo un beso en su frente y otro en sus labios.

Al abrir los ojos me muestra una sonrisa.

—Sorpresa.

Hace unas manos de jazz y luego me besa con ternura.

—¿A qué hora llegaste?

—Como a las tres de la mañana. Me quedé dormido, mientras esperaba y eso me nombró el peor novio para dar sorpresas.

Suelto una risa.

—Me alegra que estés aquí.

—Y no me volveré a ir.

De seguro mis expresiones cambiaron bastante porque me mira con extrañeza.

—¿Te quedas?

Después de terminar de estudiar tuvo que quedarse un tiempo más para hacer varias exposiciones junto con Paula.