Elements flower *TAEKOOK*

25

El búnker.

Ese refugio que siempre estaba en movimiento, la mayoría despertaba muy temprano.

Taehyung no era el caso, hasta ese día. Después del susto de su mini coma, el peliazul temió dormir e insistió para ir a su habitación, finalmente cedió al cansancio a las tres A.M.

Sin embargo; a las seis despertó de golpe, lo primero que divisó fue a Jungkook dormido en una silla.

El pelinegro no se acostó a su lado, tampoco sabía cuándo había llegado (ni todo lo que ocurrió esa madrugada).
En completo silencio, Taehyung hizo su rutina mañanera y salió del baño.

Dispuesto a buscar el desayuno, apenas apoyó su mano en el picaporte, cuándo el ruido de alguien golpeando sonó muy fuerte, asustando al peliazul y despertando a Jungkook.

Jungkook abrió grandemente los ojos, olvidando cualquier rastro de sueño al tener enfrente a Taehyung.

Taehyung no sabía muy bien cómo reaccionar, su último recuerdo fue de ellos discutiendo. Pero su corazón se alivió al ver cómo Jungkook lo rodeaba para darle un cálido abrazo.

—¿Cómo te sientes? Me preocupé mucho, perdóname.

—¡Jungkook, soy Seokjin, tu hermano te busca! — anunció del otro lado.

Tal vez porque era muy temprano, o su mal dormir, pero Taehyung no entendía nada. Su cuerpo seguía en el búnker, pero al tiempo se creía desconectado.

—Espera un segundo — Dijo Jungkook.

Seguidamente abrió la puerta y le dijo algo a Seokjin, cosa que Taehyung no logró oír y prefirió ir a sentarse en su cama.

Taehyung fijó su atención en una pequeña pecera que le regaló Wheein, intentó mover el agua pero un leve dolor nació en su cabeza.  

—Tae, ¿Te duele algo?

La voz de Jungkook hizo que salga del trance, Taehyung miró cómo cerraba la puerta y se sentaba junto a él.

—Kookie, ¿Estamos bien? — preguntó Taehyung. Esquivando aquella duda.

Esa inquietud hizo que hubiera un ambiente distinto, Jungkook asintió débilmente y unió su mano con los largos dedos del peliazul.

—Me asusté, problamente cuándo todo se haya calmado, Seokjin me moleste por haber llorado cómo un bebé esos días — Habló Jungkook.

Provocando una carcajada a Taehyung, quién afianzó el agarré y lo miró.

—Te quiero, ¿lo sabes, no?

Cómo era costumbre, Jungkook besó la mano de su chico, y se apresuró a responder:

—Lo sé, no quiero ocultar nada —

Al notar el rostro de Taehyung neutral, (ambos sabían a lo que querían llegar). Sin más, Jungkook relató su agitada madrugada:

—Nuestros padres están en el búnker, también una secretaría de Dae...

Taehyung agachó la cabeza, no estaba triste, mucho menos enojado, simplemente le costaba creer que esa sería su nueva realidad.

Lo que detonó su preocupación fue escuchar el nombre de su mejor amigo.

—¿Qué estás diciendo, Jungkook? — insistió Taehyung. Mientras quitaba su mano.

—Namjoon fue por tu padre, y Hoseok los vió, al parecer iba a una fiesta clandestina.

—Ese idiota — Susurro Taehyung. Sabía que él hacía esas cosas, ahora sí estaba ansioso —. ¿Dónde está, le hicieron algo? Por favor no lo metan en esto, es bueno...