Juro que nunca me había sentido tan mal como ahora, me duele absolutamente todo.
En verdad que los libros no son tan explícitos, y por las dudas sí usamos condón.
Pitt hasta me preguntó si quería que pidiera el día para cuidarme, a lo que obviamente dije que no.Imagina mi hermano mataría a Mike si supiese que tiene mucho que ver con esto.He de admitir que fue increíble, aunque Mike casi salió corriendo a vestirse cuando escuchamos la puerta principal, yo por mi parte me puse mi ropa lo más rápido posible.
Casi me da un infarto cuando escuche sus pisadas por las escaleras y yo aún no me había puesto el sujetador.
Mike apenas y se puso su camisa, yo me apure a medio acomodar las sábanas y tirar las almohadas en la cama.Cuando mi hermano entró Mike se sentó en la silla y yo me apure a botar el preservativo en el basurero del baño.Pitt notó algo extraño pero no dijo nada.
Dios que tremendo susto nos hemos pegado.Mike apenas se levantó me abrazo.Ya no iba a ser lo mismo, va a ser distinto desde ahora.Mucho mejor.
(...)
Camino hacia clase de biología, unas ex compañeras me dan una sonrisa amigable yo se las devolví aunque me pareciera la cosa más extraña.
Al entrar mi amado amigo Will se abalanza sobre mi, me abraza y eleva por los aires provocando que mi delicado saco de hueso suenen.Es aterrador y a la vez relajante.
-Mel mi vida, te extrañé tanto.Te mandé como diez mil mensajes pero no respondiste ninguno y sabes bien que tu hermano no me soporta.Hasta le llegué a preguntar a Mike, pero sospechosamente este desvío la mirada y negó saber la razón.Lo detuve con mis manos sacudiendolo por los hombros para que se callara.
-Amor mío, estoy bien.Sólo un poco de dolor muscular por el estrés y agotamiento por los ensayos y gracias a mi querido hermano que me obligó a correr estando aún con dolor de útero, ya sabes mis hormonas me acuchillaban por dentro- mentí, yo creo que la actuación es lo mío.
-Bueno te creo sólo por que yo también estoy agotado-dice con rostro dudoso.Bueno, tal vez no soy tan buena actriz.
La clase pasó demasiado rápido a decir verdad, lo que es casi imposible y lo tomé como buena señal, hoy será un excelente día, el sol brilla y Mike me espera a la salida.Lo amo demasiado, es tan bello
-¿Qué haces aquí?- le pregunté abrazando mis libros.
-¿Por qué no debería estarlo?- levanto sus cejas, lo detesto, siempre me pone a pensar más de lo usual y eso es injusto.
-No dije que no deberías venir, sino que se supone que apenas vas a salir de trigonometría- lo miré con rostro de mamá enfadada y al parecer lo incomodé.Genial, te atrape mi querido Mike.
-Bueno...puede ser que quizá yo llegué un poco tarde y no me dejaran entrar a la clase- aclaró su garganta- y decidí ver a Will más temprano de lo normal.Está claro que no es por ti, ni que me tuvieras loco, ni lo pienses- una sonrisa de idiota salió de mi sin darme cuenta.Es inevitable no hacerlo cuando él es tan él, me acerqué más y lo abrace, me encanta cuando sus brazos me rodean y me siento más cerca suyo, en este momento es solo mío, de nadie más, ni siquiera de quién él pudo haber sido.
Nos separamos y tomó mi mano, acaricio su piel, me encanta sentir el roce de nuestros dedos.
Caminamos un poco a nuestro lugar, no somos de esas parejas melosas (si es que somos pareja) solo somos nosotros mismos amandonos en el lugar equivocado quizás.
El día estuvo muy tranquilo en general, nada sorprendente y por eso estoy decaída, digo cuando me entregue a Mike idealice que un mínimo aunque sea microscopio cambio habría pero nada, se estaba tomando muy a pecho lo de mantenernos distanciados, tampoco quiero la miel, no me molestaría para nada, pero tenemos que estar distanciados un poco.Es decir adoro tenerlo cerca, quiero poder llegar abrazarlo, besarlo, que se recueste en mi pecho, que bese mis mejillas y a la vez quiero que seamos discretos y que casi nadie se entere, en especial por Ken, yo no quiero lastimar a mi amigo él es esencial en mi vida y no está pasando por el mejor momento de su vida para ser realista.
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La chica común
Teen FictionCuando amas a alguien, siempre habrá un tercero que es dañado. Serán dos amores separados.