No Mientas Sobre Lo Que Sientes.

Capítulo 27

La peor manera de saber la verdad sobre ti. 

Después de que hicimos el amor, al principio fue una gran experiencia, jamás había experimentado algo como lo que me hiciste esa noche.
Lamentablemente pensé que después de pasar una noche contigo, toda la agonía sexual se acabaría, que equivocado estaba. Una noche bastó para que todavía te pidiera más y más.
Luego me diste tu confesión, yo te gustaba, querías que fuéramos pareja, pero yo en ese momento no supe qué responder, así que te pedí tiempo para asimilar todo lo que había
pasado entre nosotros. Yo no creía en las relaciones amorosas, mucho menos en un futuro con alguien a mi lado, además mi matrimonio estaba arreglado con Kelly Oliner. No sabía
cómo decirte la verdad, no quería que me odiaras, ni tampoco que te alejaras de mi.
Durante varias semanas nos la pasamos revolcándonos en mi cama, cada semana era algo diferente, lo hacíamos en tu auto, en mi cama, en la pared, en el baño… en cada rincón de mi casa aprovechabas la mínima oportunidad para que tú y yo tuviéramos sexo.
Pasó el tiempo y me dijiste que no te gustaba mi videojuego a pesar de que me ayudabas, tuviste la grandiosa idea de hacer una encuesta, pero ¿Tenías que pedírsela a Dylan
Rothshield? ¿Él chico que ve dibujos de relaciones entre hombres? ¿Es en serio? Para colmo, la encuesta salió a tu favor, nunca debí apostar el videojuego contra ti, ¿Qué le iba a
decir a Francisco? No tenía idea. Lo cual me sorprendió porque aceptó cambiar todo. Fernando ni hablar de él, ya que debido a tu mejor amigo, Oscar, le provocó una fuerte
depresión. Sabía que un chico malo como él, le rompería el corazón a un chico bueno como Fer.
Acepté que otro de tus amigos cambiará el videojuego, pero no creí que ibas a traer a Alejandro, el chico que Oscar cambió por Fer, no te dije nada, pero me sentí muy molesto
contigo, sentía que todos tus amigos eran malos y que tú eras el único bueno entre todos ellos. Al final, Alejandro cambió todo el videojuego, pero guardó la idea original.
¿Son malos todos tus amigos? ¿Todo el equipo de basketball son malas personas? Para mí, en lo personal, todos los de tu equipo eran iguales.
Por ejemplo,
Oscar. El chico malo de la escuela al que todas las chicas aman, adoran y que quieren estar con él. Cretino, hipócrita, poco sincero, cantante de una banda de rock, voz de ópera,
parecida a LP, tatuajes en los brazos, musculoso, grosero, rompe corazones y mejor amigo tuyo.
Andrés. El chico que está saliendo con un chico de preparatoria, maestro de clases de bajo eléctrico, barman profesional del bar que tú y yo tuvimos una cita, musculoso y con una gran voz, parecida a Simon Curtis. Cretino, poco sincero, arrogante, grosero, malhumorado
y con personalidad de alguien presumido.
Héctor. El chico como el que todos los chicos desean ser, atractivo, musculoso, con dinero, modelo, bailarín profesional, voz parecida a Sam Smith, barman profesional del bar para ricos "El Sombrero Negro". Lugar que me dijiste que algún día me llevarías, pareja de la gran estrella de ese bar, personalidad como un chico bueno cualquiera, pero con un aura
muy amarga, te da la sensación de que ni tienes oportunidad de acercarte a él, ¿Por qué?
Porque él es de alguna manera, frío, grosero, amargado, y extremadamente celoso y territorial.
Jonhy. Capitán del equipo de basketball, pareja de Francisco, no tengo idea porque, si él es el típico cliché de una novela romántica heterosexual de un libro para chicas adolescentes que creen que algún día encontrarán a alguien perfecto como Jonhy paquete completo pero muy celoso y territorial a más no poder, poco sincero, arrogante, presumido, remilgado y molesto.
Y tú. Jean. Una persona muy irritante, arrogante, molesto, atractivo y musculoso, con un tatuaje en tu brazo, impaciente, poco sincero, grosero, rudo y dramático. Muy bueno en la cama, voz agradable, diseño de los dibujos muy bien hechos, sonrisa muy bonita y también
eres un error.
Todos tus amigos tenían muchas cosas en común. Todos conductores de motocicletas, bisexuales, personalidades irritantes, atractivos y musculosos, distintos talentos y
habilidades. Son el paquete completo.
Odiaba eso de ti. Si tuviera que hacer una lista de las cosas que odio de ti, tardaría todo un día. Y eso que solo llevo contigo cinco meses. Tal vez más o tal vez menos. Creo que perdí la cuenta de cuánto tiempo he llevado conociéndote. Aún así sabía que eras diferente a todos los demás de la escuela, eso me gusta de ti, entre otras cosas.
Jean, eres un error tan difícil de quitar de mi sistema, invades mi mente día y noche, en la
biblioteca estas conmigo todo el tiempo, recargando tu cabeza en mi hombro, mientras me tomas de la mano. Muchos se me han quedado viendo, era obvio, estoy con uno de los mejores jugadores de la escuela, lo beso, le tomo la mano, estamos trabajando en mi proyecto y tenemos sexo...casi todos los días en nuestras casas.
Parecemos una pareja, aunque no lo seamos, cada vez que me preguntan siempre evito contestar, yo se que te gusto y tu a mi, pero no me atrevo a decirlo, tampoco sé como decirte la verdad.
Para empeorar mi situación, Kelly me invitó a su casa a una cena familiar, no comprendo para qué, pero igual fui. Cuando llegué a su casa, me resultó familiar que un auto parecido
al tuyo estuviera ahí, pensé que era coincidencia. Entré a su casa, me presentó a su padre y a su otra familia que la acogió en su hogar, la niña tenía un leve parecido a ti, el señor
también tenía varias facciones idénticas a ti, no pudo ser una coincidencia, fue lo que pensé, hasta que la pequeña dijo tu nombre, volteé a ver si era cierto que estabas en esa
casa y si, era verdad. Te vi ahí parado a mitad de escalera, estaba en total shock, te acercaste a mí fingiendo no conocerme, pero tu mirada me decía mil palabras, me decía que yo te había traicionado, que todo lo que había pasado entre tu y yo era mentira y que te rompí el corazón, yo traté de decirte con mi mirada que me dejaras explicarte, pero en lugar de eso, decidiste empezar una discusión entre nosotros, mostrando ante tu familia que nosotros nos odiábamos, o al menos eso quería darles a entender. Te saliste de tu casa, tenia el impulso de salir corriendo tras de ti y detenerte para que me dejaras explicarte, pero sabía que necesitabas estar solo para asimilar lo que viste y que yo necesitaba quedarme en esa cena tan incómoda para guardar las apariencias. Lo sabía, pero me dolió que yo te haya dejado ir, aunque ambos sabíamos que era lo mejor para los dos.
Esa noche me di cuenta de algo. Uno, Kelly es tu hermanastra y Hanna es tu media hermana, te llevabas mal
con las dos, especialmente con Kelly, la relación con tu padre es muy mala, con tu padrastro es relativamente buena y con tu madrastra te llevas muy bien.
Esa noche cuando estaba en mi casa, te llamé y te mandé mensaje hasta que me quedé dormido. En la escuela, te busqué, te vi en la cafetería, cansado, con ojeras y con un ligero
aroma a alcohol, habías bebido mucho debido a mi.
Trate de explicarte lo que pasó, pero tú me evitabas todo el día, seguiste así por varias semanas, me cansé y te espere en tu casa, fue ahí cuando hablamos.