De Principio A Fin

Capítulo 32

Las personas necesitan atención, tanto como respirar
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— gracias por ayudarme — me quedé en el marco de la puerta

— no es molestia para mí — me sonrió desde la cama

Allister no aguantó mucho más, se durmió en brazos de Layla, y por más que lo intentamos, no quería soltarla, tocó llevarlo en brazos y dejarlo en su cuarto, y ahora ella lo arrulla para dormir.

— es un niño muy lindo — acarició los rulos del cabello de mi hijo con dulzura

Asentí — tengo muy buenos genes

Soltó una leve risa y me miró divertida — tienes mucho ego

Me encogí de hombros — no puedes negarlo ¿o si? — le sonreí

Negó divertida pero no respondió.

Nos quedamos unos minutos más hasta que Allister quedó profundamente dormido, me acerqué a encender la lámpara de noche, cerré la ventana y me acerque a darle un beso de buenas noches.

Mire a Layla que observaba a Allister con atención.

— ¿quieres darle un beso?

Me miró sorprendida y negó rápidamente.

— no... No me parece correcto

— yo no tengo problema, y dudo que Allister le moleste, pero es decisión tuya — me aleje y le di la espalda

Esperé en el pasillo y mire por la abertura de la puerta, como ella se inclinaba a darle un dulce beso en su frente, lo acarició por última vez y se levantó.

Me aleje sonriendo y la esperé en el inicio de la escalera para disimular.

— ¿y ahora que hacemos? — llegó a mi con una sonrisa

Suspiré — depende de ti, tengo algunas ideas, pero no quiero que regreses tan tarde a casa

— creo que estaré bien, no tengo problema con la hora — bajó acompañándome

— bueno, en ese caso, tenía planeada una noche de películas, palomitas... ¿Te apetece?

Asintió — me parece bien

Nos sentamos en la sala, frente a la gran pantalla lista para usarse, Ana preparo el lugar con palomitas, refresco y otros bocadillos, apagué las luces y acomode los cojines para estar más cómodos.

— ¿que generó te gusta?

— romance, algo de drama... Tal vez acción

— bien — busque alguna película que no haya visto — ¿que te parece esa?

Leyó la descripción y aceptó. Nos acomodamos y empezamos a comer.

Me entretuve con las palomitas, me acomode mejor en el sofá, Layla estaba a mi izquierda, tenía un cojín encima de sus piernas y la taza de palomitas la apoyaba en el.