De Principio A Fin

Capítulo 2

El respeto no se exige, se gana. Hay personas que no merecen ni saber el significado de esa palabra
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¡El niño!

Okey, si alguien me hubiera dicho esta mañana que por ser amable me dejarían al cargo de un niño de 3 años sin mi previo consentimiento...no me habría levantado de mi cama.

Estaba asustada, no por mi, si no por el pequeño que dormía sobre mi hombro.

Resulta que la señora responsable de este niño, salió por la puerta de atrás, la que se usa para la mercancía, mientas yo no estaba pendiente, por suerte teníamos cámaras en todas partes, y ellas captaron el momento en el que sale del baño para escabullirse por el pasillo hasta la puerta, la empuja y sale a la calle sin mirar atrás. No podía creerlo, se supone que ella es la adulta, ¿como alguien deja un niño a su suerte en manos de un extraño? Yo no era una asesina, ni traficaba niños ni muchos menos, pero sabía que el mundo podía estar lleno de esas personas que se aprovechan de estas situaciones, y el pensar que este niño podría estar en las manos de alguien que quisiera hacerle daño me ponía mal.

La cafetería estaba cerrada, mi tía no se encontraba y llegaba a la hora del almuerzo, así que solo estábamos frank y yo, y el pequeño que dormía en mi cama, decidí subirlo a mi cuarto mientas con frank pensábamos como solucionar este problema.

—¿y si llamamos a la policía? El abandonar a un niño que estaba a tu cuidado no seria ¿negligencia? Podrían encontrar a la señora.

—si, pero seguramente se llevarían al niño a una comisaría hasta encontrar a sus padres, y dudo que den con la señora hoy mismo.

—bueno, tampoco podemos quedarnos con el niño, podríamos ir a la cárcel, ¿lo sabes no?

Si, estaba consciente de eso,pero tenía el testimonio de frank, y aparte la evidencia de las cámaras que solo corroborarían mi versión de la historia

—no digas esas cosas que me asustas, además, las cámaras grabaron todo solo tendríamos que mostrarles el vídeo para que no saquen conclusiones apresuradas.

—¿y que me dices de que estamos tardando mucho para llamarlos? Han pasado unos... ¿Que? ¿Media hora?

—estamos pensado como solucionar esto frank, me preocupa más el niño, y tal vez los padres, ¿que pasaría si llaman a la niñera para preguntarle con esta su hijo?

—no creo que esa mujer sea tan estúpida como para contestarles viendo que dejó a propósito a su hijo en una cafetería con extraños.

—no digas groserías frank, aún no llegamos a eso, por lo pronto el niño aun duerme, podemos esperar a que llegue mi tía y ella nos ayudara.

—¿bromeas? A tu pobre tía le dará un paro cardíaco cuando se entere, sabes lo nerviosa que es, y si eso pasa entonces tendríamos 2 problemas que solucionar.

Y tenía razón, mi tía podía ser la persona más dulce y comprensiva que conocía, pero era muy nerviosa, y a los asuntos difíciles les corría, si se entera de que dejaron abandonado a un niño aquí, probablemente le daría algo.

—¿que propones entonces?

—yo digo que llames a la policía, ellos podrán dar un boletín del niño y sus padres con suerte lo verán, o incluso ya lo estén buscando, y nosotros solo seremos los héroes del momento.

Asentí lentamente no muy convencida, si llamaba a la policía nos interrogarían, se llevarían al niño asustandolo y de seguro pedirían hablar con mi tía ya que es la dueña del local.