Apostar Todo Por Ti

11. Desobediencia👑

Editéeste capi por algunos errores de los que no me Di cuenta antes. Lo siento guys...

Volví~ Espero les esté gustando está historia. Sé que tiene cosas poco entendible ya que se desarrolla en Grecia pero con el paso de los capítulos se hace más claro el objetivo.

Pongo mi Instagram acá por si quieren seguirme y hablar sobre alguno de mis fanfics y nuestra hermosa ship BounPrem :)

Ig: j_foxy99

-Ve a descansar, Prem. -Esas simples palabras podrían interpretarse como amables, consideradas. En cambio, Prem no supo por qué las tomó como una humillación. En el pasar de su estadía en el glamuroso palacio, había comenzado a anhelar más de lo que quería, la dominación si excesos de su nuevo amo, la atención exclusiva y diferente hacia él.

- ¿Amo? -Pero no recibió más respuesta que la mano de Enone tirando fuerte de su brazo. Se había vuelto codicioso. Por lo que al escuchar a su amo insinuar a sus visitantes sobre su supuesta retirada ociosa, pensó que iba a cumplir una reciente fantasía que se había colado en su mente.
Ser suyo.

Despertó indispuesto. No importaba que fuera el único sirviente que mantenía las cadenas en sus pies impidiendo que corriera lejos, ni el hambre. Tampoco el hecho de recordar cada sol naciente, que había perdido su libertad tan rápido como parpadeaba, todo causa de su estúpida venganza. El verdadero problema estaba en que la noche anterior había sido desechado a su nuevo aposento, un lugar donde estaban algunos sirvientes de alto rango compartiendo la habitación. Él estaba dolido. Ya no podría ver despertar a su amo.

En algún momento de su largo tiempo silencioso, comenzó a pensar en que estaba loco. comenzó a apreciar la buena figura semidesnuda de su amo, su cabello desaliñado al levantarse y, sobre todo, esperaba ansioso las órdenes dirigidas solo a él.
Si, de veras se estaba desquiciando en su mente. ¿Cómo podría ser que le gustasen estas cosas? Debería estar imaginando sus manos alrededor del cuello de saco y Boun. Debería pensar en incendiar aquella cárcel llamada palacio junto a todos sus residentes. Pero no. El muy tonto casi saltó de alegría al escuchar el crujido de las cerraduras de las cadenas que Enone abrió. Casi llora cuando fue conducido hacia el recipiente de agua fría para lavar su cara. Y casi se le sale el corazón al detenerse frente a la puerta de la alcoba de su rey. Habían pasado días desde la última vez que había sido requerida su presencia ante el rey.

Lo sabía, no era amor, solo pensaba ser el favorito. No quería perder ante otra cortesana. Incluso si estas le hicieron la estancia estresante desde el inicio. No lo había dicho a nadie, pero una de ellas, de bajo rango le advirtió, ''algunas personas no estaban conforme con la decisión del rey Boun de darle un título inventado y especial''. Liria no daba ese aire de desprecio y envidia que las otras poseían, pero bien, no podía bajar la guardia. Ya había caído en una trampa que había acabado con su dignidad humana y le había resquebrajado la conciencia.

Por otro lado, estaba la siguiente en la línea después de Nerea. Helena, la cortesana más bella que exista en todo el reino según muchas lenguas indiscretas. Ella siempre daba una mirada cautelosa a sus propias sirvientas, y estas se encargaban de pellizcar cada rincón de su autoestima. ''No pienses que solo porque el rey te dio un título recién llegaste, él te favorecerá. Nuestra señora es quien tendrá ese placer".

De nuevo, la maldición de aquel título estaba atrayendo miradas indeseadas hacia él.
La autoritaria voz del rey le sacó al presente. Eso, y un tirón en su rizado cabello.

-Cuando este rey hable, tú atiendes. Nada de quedarte lejos en tu mente, ¿entendido?

-Sí, amo.

-Bien. Ahora, ve a cambiarte. Debes ir conmigo a un lugar.

-Amo, no creo que sea conveni... -Prem comenzaba a pensar que la obsesión del rey con él estaba en su cabello. Para llamarle la atención, tiraba un poco de él, enredando sus largo dedos en los rizos oscuros superiores a su nuca. Era como un reemplazo a los golpes. Se sentía firme pero no abusivo a la vez.

-Parece que Enone no te he enseñado bien tu lugar, nuevo cortesano. -Esa forma de llamarle, le hizo abrir los ojos con sorpresa. Nunca se había dirigido así. Entonces, significaba que estaba disgustado por algo. Y, Prem tuvo el impulso de corregir eso.

Siguió a Enone, la pobre chica debía de estar cansada. Precia que nunca dormía, buscando atender a su rey y estar presente en cada momento que fuese demandada.

-Amo, ¿hice algo mal?
Realmente no sabes la respuesta, pero llegó a pensar que era algo por lo que debía lamentar sus últimos días. Con cada paso que su rey daba más cerca, su corazón comenzaba a palpitar más fuerte, se tornaba más trabajoso tomar aire y su piel se erizaba. No era amor, no. Era miedo y la mezcla de lo anterior en negación.

- ¿A...amo? -Dijo, notando la suprema cercanía entre sus cuerpos y caras. Estaba a un diminuto soplo de su boca y a un toque para que sus rodillas cediesen.

-Hablé claro cuando te dije que debías decirme si alguien te tocaba. Cualquier agravio, por pequeño e insignificante que sea, debías decirme. Tú no obedeces a este rey, así que debes obtener un castigo propio.

-Pero... pero, es que nadie me tocó.

-Oh, así que prefieres mentir. ¿Olvidaste que tengo ojos y odios en todo el reino? ¿También que soy a quien le debes obediencia y tu vida? Ya veo, debo cambiar la forma de enseñanza contigo. -La cara de decepción que mostraba su rey era digna de hacerse quitar su propia vida. Lo que menos deseaba en el mundo era eso, que perdiera la fe y los buenos sentimientos hacia él. Si tan solo hubiese hecho caso, debió decirle rápidamente, ese mismo día.

Ojos curiosos, llenos de furia o de diversión. Bocas burlonas y lenguas filosas dejaron deslizar de ellas palabras maliciosas e hirientes. ¿Quiénes eran? No tuvo idea hasta que fue tarde. Una sirvienta pateó fuerte el reverso de sus rodillas haciéndole caer al suelo involuntariamente. Su mentón alzado con firmeza le hizo recibir una bofetada sonora.

- ¿Te atreves a mirar directo a mis ojos? Conoce tu lugar, sirviente. -Hipatia, estaba claro, no era su igual dentro de aquel lugar. Vestía clámides sedosos y llamativos en comparación a las sirvientas y las joyas adornaban su cuerpo. A su alrededor estaban dos chicas con menos joyas, pero igual de bellas en su vestir. "Ah, así que son heteras. Celosas".

Siempre pensó en no causar problemas mientras existiese entre esas paredes. Se mantuvo callado y hasta pidió a Enone ser colocado cerca de otros sirvientes comunes. Error.

-Un hombre intentando colarse en la cama de nuestro Rey. Te atreves a semejante aspiración, escoria. -Otro fuerte golpe fue dejado en su abdomen y espalda. -Eres una abominación de los Dioses. No serás llevado a Elysium* sino dejado en el Averno por Caronte para tu castigo infinito.

Ahora sabía que, si sobrevivía a esto, tendría que andar con más cuidado. Hablaría con Enone sobre la visita de aquellas escandalosas mujeres y, sin decirle al rey, tomarían medidas para que no se acercaran otra vez.

De pronto, sus propias pupilas se abrieron enormes. Algunas de sus ropas más lujosas fueron lanzadas sobre las llamas o rasgadas. Se llevaron algunas cosas de poco valor, pero importantes para él. Ellas estaban impidiendo que él tuviese algo decente que usar si el rey pedía su presencia a media noche, como se esperaba de su futuro y nuevo título. Hasta recibir un regalo nuevamente, tendría que inventar excusas.

-No creo que necesites estos. -Dijo otra de las heteras tomando el protagonismo de la habitación. Roxana. La sombra de Hipatia. -Pronto no serás más que un sirviente olvidado por nuestro señor. Volverás al bosque de donde saliste, salvaje, y nosotras a donde pertenecemos. Al lado del Rey. Atendiendo sus placeres nocturnos.

No le gustaba esto. Esas heteras codiciosas quitaban el deseo de admirar la belleza estética. No sabía que vio el Rey en él para darle el honor de servirle en todo momento, pero sí comprendió su agonía al tener que compartir sus noches con semejantes falsedades. Al menos, pronto llegaría la noche y el rey enviaría un nuevo atuendo para la horrenda velada con sus invitados y Ésaco.

Elysium* 《 Campos Elíseos o Jardín del Edén en otras culturas》

Ig: j_foxy99

;)