AFTER ¡ SEX - CheongSan : estamos muertos.

12.

Todos los zombies estaban completamente amontonados, algunos lograban subir las escaleras y otros simplemente se resbalaban.

—Bien... ¿están listos? —preguntó SuhYeok a lo que ambos chicos asintieron.

CheongSan y SuhYeok comenzaron a golpear a esos monstruos que querían llegar hacía ellos y Leah con ese fierro que tenía entre sus manos le pegaba a algunos provocando que cayeran y a los que podía, les enterraba el fierro en la cabeza.

Leah vió que unos de esos muertos se abalanzaba hacía CheongSan y antes de que llegara al despistado chico tomó al zombie de la camisa y lo volvió a lanzar escaleras abajo.

Eso parecía como jugar a los bolos.

Los demás aún luchaban por abrir la puerta, gritaban con desesperación y a la vez golpeaban, estaban muy desesperados.

Ellos querían vivir.

SuhYeok lanzaba algunas patadas y CheongSan empujaba a los demás zombies.

De repente, uno de ellos se tiró sobre Leah intentando atacarla, esta puso el gran fierro en su boca para evitar ser mordida y lanzó una gran patada en el estómago de aquel muerto tirándolo lejos, lamentablemente el zombie se llevó el fierro que tenía para defenderse con más facilidad.

CheongSan la tomó del brazo con delicadeza.

—¿Estás bien?

—Sí, no pasó nada.

—¡Tiren esto!

Todos tomaron un plástico azul que se encontraba tirado por ahí y lo arrojaron a las escaleras, mientras que los demás agarraban aquel plástico para detener a los zombies.

Eso logró detener a algunos, pero de todas formas, aún podían atacarlos, a veces la castaña pensaba que habían unos más inteligentes y otros más tontos.

Los zombies, no sus compañeros.

Aunque ellos igual un poco.

De repente vio como alguien levantaba el plástico, el ceño de la castaña se frunció al ver eso y se acercó un poco más para ver qué pasaba ahí.

Luego... lo vió.

Era el maldito de Gwinam, sosteniendo un zombie mientras se acercaba a los chicos.

Leah, CheongSan y SuhYeok se paralizaron al verlo, él prácticamente los estaba amenazando con la mirada.

Bueno, la mitad de la mirada porque estaba medio tuerto, igual que Carl.

Ella recordaba que SuhYeok le dijo que había tenido una pelea con él pero no pensó que era verdad, aparte, se supone que había muerto otra vez.

Ella creyó que SuhYeok estaba un poquiiito mal de la cabeza, al igual que de los pies.

Una sonrisa escalofriante apareció en el rostro del matón cuando vio a Leah, le encantaba saber que todos le tenían miedo.

—¡Princesa!

Leah apretó los puños cuando escuchó nuevamente ese apodo y apenas Gwinam se acercó a ella para tomarla, Leah pateó con fuerza su rodilla y de inmediato pasó su brazo por alrededor del cuello de él, intentando dejarlo sin aire.

—Mierda, esa no era la bienvenida que quería, preciosa —dijo como pudo.

Sin embargo ella se distrajo al ver como un zombie estaba apunto de atacar a SuhYeok, CheongSan también estaba acorralado por zombies, todo estaba muy mal...

Gwinam aprovechó eso y empujó a la ojiazul con rudeza, luego la tomó de los hombros y la estampó contra la pared, levantando a la más baja del piso.