Las horas pasaron y la fría noche no tardó en llegar, aún no era invierno pero con el frío que había parecía que ya estaban en esa estación del año.La fogata lograba calentarlos un poco pero de todas maneras no era suficiente, ya que estaban en un lugar muy alto después de todo.
—Dae-su —lo llamó SuhYeok.
—¿Sí?
—¿Qué tal tu audición?
—Me dijeron que adelgazara.
—¿Qué tiene que ver tu cuerpo? idiotas, cantas muy bien —se metió CheongSan.
—Canta para nosotros. Quiero oírte, por favooor —suplicó Leah.
—Olvídalo, no quiero cantar.
—Me encanta esa canción —opinó Joonyeong.
—¿Sí? —preguntó y el de lentes asintió.
—Es muy bonita.
—Cuando te decía que me rompías los tímpanos era mentira, vamos, canta —dijo GyeongSu.
—Cantas muy bien, nos animará —lo animó la castaña.
Y eso fue suficiente para Dae-su ya que aclaró su garganta con una pequeña sonrisa entre sus labios y luego dejó que todos los presentes escucharan su angelical voz.
La castaña apoyó su cabeza sobre el hombro de CheongSan y cerró los ojos, comenzando a cantar junto con Dae-su.
Luego Jimin y Hyoryung hicieron lo mismo.
Luego de unos minutos, todos se encontraban cantando, todas las voces juntas hacían un perfecto sonido.
—Que canción tan bonita —sonrió Hyoryung.
—Dijiste que era fea.
—Ahora que la escuché, creo que es linda.
—Eso fue alentador, Dae-su.
Todos soltaron una pequeña risa pero se callaron de inmediato al escuchar la voz de OnJo.
—¿Cuándo... empezaste a fumar? —le preguntó a NamRa.
—En octavo año, no tenía amigos ni nada para aliviar el estrés.
—¿Alguna vez necesitaste un amigo?
—No estoy segura, no lo sé.
—Siempre pones un muro, siempre usabas auriculares y nunca decías nada. ¿No era porque no te caíamos bien?
Todos escuchaban atentamente la conversación y como no tenían palomitas, Leah comenzó a repartir unas galletas para comer mientras escuchaban.
Le dio un paquete a cada uno, ya que sobraban de más y en el paquete tan solo venían seis.
—Nunca me desagradaron. Yo solo... no tenía amigos.
—Para ser sincera, no me gustabas. Creía que no nos hablabas porque éramos inferiores a ti —dijo Hyoryung.
—La verdad... a veces deseaba que no estuvieras cerca —confesó Joonyeong.
Qué directo...
—¿No son amigos? son los más listos.
—Por eso la odiaba.
—Por mucho que me esforzara, siempre era segundo. Pero ahora me agrada, creo que salí segundo gracias a NamRa.
—Oye, el segundo lugar también es bueno, yo ni siquiera soy el 20 ¿no?
—¡Oye! no te compares con Joonyeong.
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AFTER ¡ SEX - CheongSan : estamos muertos.
ActionEn medio de una apocalipsis zombie, CheongSan y Leah logran confesar sus sentimientos. ¿Podrán sobrevivir? ¿su relación podrá funcionar?