Acababa de salir del trabajo rumbo a la escuela en busca de su pequeño, tenía que apresurarse para que el pequeño no lo regañara si es que por algún motivo llegaban tarde a la tan esperada fiesta de Alan; al pequeño le gustaba asistir a sus clases, pero más le gustaba pasar tiempo con las personas que quería, esos eran sus amigos y sus tíos, había esperado toda la semana para el cumpleaños de uno de sus mejores amigos, no había duda de lo impaciente que estaba por lo que en cuanto vio a su padre bajar del coche, corrió a sus brazos, dejó su pequeña mochila en el suelo y sintió como lo levantaron por los aires, pronto se subió al coche y abrochó su cinturón, esperando a que arrancarán el auto, mientras iban manejando a casa sonó el móvil de Rubén, lo puso en altavoz, era Samuel –Hey Rub, quería saber si te gustaría venir a pasar el rato conmigo, puede venir Alex y les cocino algo– Alex estaba ensimismado con el dibujo que estaba viendo, e imaginando nuevos juegos que crearía para jugar con Alan y Dani, así que no prestó atención –Lo siento Samu, hoy tengo que hacer algo en la tarde con Alex, quizás otro día con mejor planificación– ofreció de respuesta, al mayor no le gustó la negativa, pero tenía razón, debería haberle hablado con anticipación –Oh, no te preocupes, espero que la pasen bien Chiqui, un beso– y colgó, no había mucho más de que hablar, habían estado en la oficina toda la mañana y se escuchaba que estaba manejando a Rub no le dió tiempo a despedirse, pero estaba conduciendo así que prefirió no darle mucha importancia a eso, tan pronto como llegó a su casa Alex corrió a su habitación a buscar la ropa que había preparado con su padre el día anterior, habían ido de compras y encontró una camiseta muy guapa de dinosaurios, la fiesta iba a ser de esa temática y le encantó, un pantalón de chándal y ya estaba listo para irse, corrió escaleras abajo donde su papá estaba haciendo algo de comer, saltó para llamar su atención y abrió sus brazos –¿Que te parece?– le preguntó, el castaño revisó la intensidad del fuego rápidamente antes de apartar la mirada y ver cómo estaba vestido el menor –Te queda muy bien, ahora siéntate o busca algo de beber, que la comida casi está lista– mencionó antes de darle la vuelta a esa milanesa de pollo y servirla con puré de patatas, el pequeño se acercó al refrigerador y abrió la puerta contemplando la variedad de bebidas que tenía para elegir, opción uno: Limonada, una bebida cítrica que amaba, opción dos: Zumo de naranja, también amaba el Zumo de naranja, pero no sabía cuál pegaría mejor con un puré de patatas, y por último y no menos importante, opción tres: El agua helada del refri; tomó dos vasos y los llenó de ese último, sabor neutral y no le daría ganas de tomar más después del primer sorbo. Comió demasiado rápido y me empezó a doler un poco el estómago –Pero ¿Masticaste antes de pasar?– le preguntó Rubén al niño empachado sobre la mesa –Si... Creo– respondió desanimado, al verlo medio triste por sentirse empachado decidió algo rápido –¿Te parece si salimos a caminar con Wilson un rato e intentamos que aprenda a hacer sus necesidades afuera?– lo observó, no le dirigió la mirada pero asintió –Vale, tu toma agua y yo le pongo el arnés–.
Caminaron un rato mientras hacían algo de tiempo para la fiesta, ellos estaban listos y partieron para llegar antes que nadie; una vez allá llamaron a la puerta y les abrió una pequeña pelirroja –Mamá– gritó girándose hacía el interior de la casa –El tío Rub y Alex ya llegaron– pasaron y los niños corrieron por la casa y Rubén entro como de costumbre a la sala, saludó a la mamá de los niños y comenzó a ayudarla con algunas decoraciones, sus amigos de Alan estaban por llegar y solo necesitaban terminar pocas cosas para que todo esté perfecto, el cumpleañero no se veía por ningún lado, pero fuera de la casa no estaba, por otro lado estaban en el patio los tres pequeños, Dani, Alex y como no podía faltar Belén; las dos niñas estaban jugando y conversando sobre historias con las muñecas, pero al ser "juego de niñas" no permitían participar en el juego al pequeño castaño, quién no se hizo problemas, estaba buscando insectos, le gustaba observarlos en su habitad natural, no los tocaba o aplastaba como otros niños de su edad, estaba a su rollo.
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Todo empieza en ti [Rubegetta]
FanfictionRubén y Samuel, un amor de adolescencia que se reencuentra en la etapa adulta. La sorpresa que se lleva Samuel cuando regresa de Los Ángeles después de haberse marchado 10 años atrás dejando al que fue el amor de su vida por un largo tiempo. Planead...