INEFABLE; p.gavi

𝒄𝒉𝒂𝒑𝒕𝒆𝒓 𝒔𝒆𝒗𝒆𝒏

Huolaa!!! Aquí tenéis el capítulo 7!!!! Quiero daros las gracias por las 1k visualizaciones y el apoyo que está teniendo la historia, espero que disfrutéis de este cap :)
Muchas gracias de corazón <3

El estadio estaba lleno y todavía quedaba una hora para el comienzo del partido. Había nervios. No es que sea un partido determinante para la clasificación, es el primero de la liga por lo que de aquí al final de la misma pueden pasar muchas cosas. Los equipos suben y bajan a medida que sus partidos van finalizando, así que nunca se sabe nada de nada.

Las nubes estaban algo grises, el sol intentaba salir pero no lo conseguía. Eran las cinco y media de la tarde, hora perfecta para jugar y más si el tiempo acompañaba de esta forma. 

Claudia, Sira, mi hermano y yo nos metimos dentro del campo. Los jugadores todavía no habían salido a calentar, solo se encontraban aquellos que trabajaban aquí preparando el campo. No sé cómo lo consiguió mi tío, pero me puedo quedar en el banquillo tanto con la plantilla como con el equipo técnico, mientras que Clau, Sira y Rubén tienen asientos justo detrás de este.

—Acabarás trabajando en algún equipo, lo tengo claro. —la rubia se posicionó a mi lado mientras dábamos una vuelta por el campo y saludábamos a quienes nos llamaban, cosa que no nos esperábamos para nada y nos hizo gran ilusión.

—¿Tú crees? Sería brutal. —sentí como me palpitaba el corazón por la emoción de pensar en trabajar con algo relacionado.

—Tía, entiendes absolutamente todo. Cuando dejaste de ayudar a tu tío por poco que fuese se notó, Rubén me lo dijo. Yo no entiendo de estas cosas.

—Mi tío realmente no necesita ayuda, es de los mejores entrenadores que hay hoy en día.

—Te podrían contratar, tienes ya los 18.

Agarré a la rubia del brazo consiguiendo engancharnos cuando ya nos estábamos acercando al banquillo que pertenecía a nuestro equipo.— Claudia, Claudia, Claudia... si yo te contase lo que hay sobre la mesa...

Lo entendió a la perfección. Es verdad, al tener 18 años me pueden contratar en algo tan grande como este equipo y Jesús me lo ha dejado caer esta mañana, como si me hubiese puesto el contrato sobre la mesa prácticamente. Él dice que necesita tener a alguien más a su vera al igual que mi tío y que me tienen a mi de primera opción por cómo me desenvuelvo con el asunto. Sinceramente es el motivo por el que hoy estoy tan feliz. Ahora mismo solo lo sabe Claudia medianamente y cuando se lo diga a mi padre se va a ilusionar todavía más que yo. 

No os voy a mentir, me estoy planteando aceptar esa oferta pero dejarlo como un trabajo secundario mientras estudio psicología, si puede ser. Al final esto es comprometerse con más de una persona y se paga muy bien, así que no sé si podría complementar las dos de alguna forma. Este año entro a la universidad y también me gustaría vivir un poco el ambiente universitario pero... ¿Trabajar en lo que siempre he soñado? Pocas veces se ofrece una oportunidad así.

Los gritos comenzaron a hacerse presentes en todo el estadio y eso solo significaba una cosa: Los jugadores estaban saliendo de los vestuarios.

Cuando el andaluz salió, me buscó con la mirada al igual que hice yo inconscientemente. No es por ser egocéntrica pero es que Gavi nada más pisar el campo, dirigió su cuerpo hacia los banquillos, donde estábamos nosotros, corriendo marcha atrás, me guiñó el ojo y se dio la vuelta para dirigirse con el resto del equipo. ¿Eso es que me buscó? Estoy loca ¿verdad?

—¡Luna! —Luis llamó mi atención nada más salir de los vestuarios.

Me despedí de Claudia, Sira y mi hermano quienes ya tenían que subir.  Recibí unas miradas cómplices de los tres, como si supiesen algo que yo no. A veces, solo a veces, odio que nos llevemos tan sumamente bien y no haya secretos entre nosotros. En realidad me encanta pero es que cuando hacen este tipo de cosas es para coger un balón y lanzárselo a la cara.