asco

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Asco era lo que sentía Lumine.

Le tocaba clase con Diluc, e iba a tener a Diluc delante.

Y Childe no le miraba.

¡Estaba sola!

Entró a clase con una sonrisa radiante en busca de su perro faldero, pero se quedó quieta al ver como Venti, Jean y Fischl estaban hablando con una chica, y esa chica estaba sentada en su sitio.

Se relamió los labios en busca de tranquilizarse, y cuando fue al sitio, todos se le quedaron mirando fijamente.

—Ya no mereces sentarte aquí.

Soltó Jean apoyándose en la mesa y mirando a Lumine fijamente.

—A partir de hoy, te vas a sentar al lado de Diluc.

Lumine empezó a reírse a carcajadas, y se puso una mano en la cabeza negando con la cabeza.

—Estás de broma, ¿no? ¿Venti? ¿Fischl?

Los dos giraron su cara.

Y eso fue un balde de agua fría para ella.

—Siéntate, ya ha venido el profesor.

Lumine iba a partirle la cara a Jean al salir.

Ella chasqueó la lengua sentándose al lado de Diluc, y este la miró de reojo.

¿Sus amigas la habían abandonado?

Al parecer Jean también podía ser una arpía.

Le encantaban los finales felices.

—Si me miras de nuevo, romperé los cristales de tus sucias gafas y te las clavaré en los ojos.

—Te invito a hacerlo, pero te aviso de antemano que no lo lograrás hacer.

Venti y Fischl veían como salían chispas de los dos.

Fischl estaba aterrada, porque sabía que esos dos llegarían a las manos y Lumine perdería; y Venti se divertía.

La dinámica de esos dos era muy graciosa e interesante.

La chica superficial, presumida y egoísta; se lleva mal con el chico solitario a tal punto de matarse, pero el destino siempre quiere que estén juntos.

¿Acaso así no comenzaban las historias de amor?

—Oye, ¿tú no crees que acabarán siendo novios?

Susurró Venti a Fischl mirando como Diluc y Lumine empezaban a discutir por una simple tontería.

—N-no, Lumine no sería tan idiota. Aparte... sería una relación muy tóxica, ¡Lumine merece más que ese chico!

Todos sabían que Fischl vivía enamorada de Lumine, así que fue un fallo el hablarle de ese tema.

Venti sabía que esos dos iban a acabar juntos, y esperaba que ellos dos lograran calmar sus humos, porque sin duda alguna eran dos personas muy destructivas.

Venti podía ver el futuro, ¡sus instintos nunca fallaban! Y todos sabían que Diluc podía tocar fácilmente la debilidad de Lumine y esta caería.

A Lumine le gustaba jugar con los chicos y tener sexo con ellos para humillarlos, y Diluc tenía la premisa perfecta para darle un buen polvo a Lumine y hacerle ver que utilizar de tal manera a los chicos no le hacía más bonita.

Aparte, Diluc daba muy mala imagen, pero... no era feo.

Las realidades no se podían negar, y esa era una realidad. Si Diluc de verdad fuera feo, Lumine lo habría ignorado desde el principio.

favorite. (diluc x lumine)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora