favorite. (diluc x lumine)

miedo

Dos semanas exactas.

Diluc no le volvió a dirigir la palabra y Eula tampoco.

En las horas de receso se iba con Childe y Kaeya y con toda su clase, se sentía genial estando allí. ¡Todos eran tan majos!

Pero... en esas dos semanas, claramente tuvo que ocurrir algo.

—¿Qué? ¿Quien es ese chico?

—Al parecer es alguien que se metía en muchos problemas en la secundaria.

Murmuraban las chicas que estaban sentadas al lado de Lumine.

Lumine debía de hablar con el director y estaba en la sala de espera, y tenía los auriculares puestos aunque no escuchaba música.

—¿El chico ese raro de pelo rojo?

—¡Sí, ese! Todos dicen que son novios, ¡siempre están juntos e incluso los han visto besarse!

Lumine apretó su mandíbula al instante.

¿Qué?

—¡Vaya! Yo no sabía que Jean tenía gustos tan peculiares.

—Que sí, que sí... siempre están en la cafetería juntos pero disimulan en clase al no hablarse. Algunas veces se hablan pero no se muestran cariñosos, ¡pero si se besan cuando nadie los mira, madre mía!

—El chico no es feo, pero tiene tan mala actitud que al instante lo vuelve feo... ¿a lo mejor Jean ha visto en él lo que los demás no han podido?

¡No, joder, ella había sido quien vio algo en Diluc que nadie fue capaz de hacer!

—Jean no dice nada, ¡le pregunté ayer y solo sonrió! A lo mejor no quiere admitirlo pero ¡su cara dice todo!

Diluc le había dejado de hablar porque vio más fácil el estar con Jean, ¿cierto?

Maldita sea, se sentía tan fea en ese momento.

Ella era una fea y una fácil, intentó de todo con Diluc pero él solo se rió en su cara.

A ella no le quiso besar pero a Jean sí.

—A ver si esa relación dura...

El director llamó a una de esas dos chicas, y ella se levantó para irse.

No tenía ganas de nada.

(...)

—¡Ya he vuelto!

Dijo Lumine dejando sus zapatos en la entrada y caminando por la casa.

La luz estaba encendida pero no había ninguna actividad de nadie.

Subió las escaleras y al entrar en su habitación, abrió los ojos al encontrarse a Eula revisando la única foto que tenía con Aether, su hermano.

—¿Tu hermano también es un Omega?

—¡No toques esa foto!

Chilló ella corriendo para arrebatarle la foto, pero Eula alzó su brazo lo más alto posible para que Lumine no llegara a cogerlo.

—¿Qué? ¿Tanto te duele? Es solo una foto.

Lumine se mordió el labio inferior completamente enfadada, y pegó un rodillazo en su vientre, pero al instante lo que recibió fue una fuerte cachetada que la tiró al suelo.

Eula dejó caer el marco haciendo que el cristal se rompieran en pedazos, y se puso encima de Lumine para agarrarle de la mandíbula con fuerza.

—¿Quién te crees para pegarme pedazo rata?