favorite. (diluc x lumine)

disputa

Diluc y Lumine volvieron a clase con total tranquilidad, y Jean, miró la situación con pena.

Ella conocía a Diluc.

Espera, ¿cómo?

Diluc no se acordaba de ella pero ¡ella sí!

Se conocieron de pequeños, pero cuando murió el padre de Diluc, él desapareció por completo.

Al principio al verle no lo reconoció, pero cuando logró encontrar fotos de ella de pequeña, ¡ahí estaba Diluc!

Pero la maldita arpía de Lumine estaba sacando sus garras.

Estaba harta de ella, ¡estaba harta de lo presumida que era! Siempre obteniendo todo lo que ella quería, ¿acaso no se había hartado?

Cuando Diluc se acercó, ella se levantó para acercarse a él, pero abrió la boca indignada cuando este pasó de largo y se sentó a su sitio.

—¿Tienes descanso después de esta clase?

—Sí, hoy la profesora no ha venido.

Susurró Lumine sacando sus cosas y estornudando para rodar los ojos.

—Entonces te irás directa a tu casa, ¿cierto?

—Exacto, prepararé la comida y esperaré a que vengas.

Jean se giró al escuchar eso, y puso una mueca amarga al ver como Lumine la miraba con seriedad.

—¿Qué? ¿En serio estáis con esa tontería de ser amigos de toda la vida?

—¿Acaso tienes envidia?

Sonrió de lado Lumine mirándola con diversión, y Jean giró su cara suspirando.

—¿Envidia? ¿De ti? ¡Ni en broma! Pero, ¿tú que te piensas?

—No lo sé, sabiendo que este año de repente has demostrado un desprecio hacia mí, me da la impresión de que siempre me odiaste y ahora ha habido algo que ha hecho que explotes.

Miró de reojo a Diluc, refiriéndose completamente a él, y volvió a mirarla para echar su deslumbrante melena hacia atrás.

—Venga Jean, tengamos la fiesta en paz, ¿vale? No sé que te ha pasado en verano que el comenzar este curso, te has vuelto completamente loca. En secundaria no eras así, ¿sabes?

La sangre de Jean ardía. ¿Cómo podía existir ser tan malvado como Lumine?

—De verdad cariño mío, necesitas un buen polvo porque de verdad, me estresas. ¿Qué? ¿Acaso te gustan las mujeres? ¿Te gusto yo? Porque yo no entiendo el porqué estás tan obsesionada conmigo.

La bajita se levantó y fue hacia la alta, y sonrió inclinando su cabeza hacia un lado.

—Si tanto te duele que yo pise tu territorio, ¿por qué no haces cosas que hagan que yo pierda? Es ridículo que dos mujeres se peleen por un hombre, ¿sabes? Y más, a mí este tío me produce un increíble asco, así que te lo dejo entero para ti.

Diluc miró a Lumine de reojo alzando una ceja; ¿decía eso en serio?

Porque él tenía la impresión de que Lumine estaba mintiendo.

—Pues sí Lumine, siempre me caíste mal. Cuando viniste nueva a mi instituto, ¡quedé en la sombra! Tú destacabas siempre. Para las chicas eras su modelo a seguir, ¡eras la "crush" de todos los chicos! Los profesores te adoraban... siempre brillaste aunque seas una mierda de persona.

—Yo nací para ser la ganadora, Jean. Mi cara bonita me hace ser una privilegiada, en cambio tú...

Lumine hizo una increíble mueca de asco examinando a Jean de arriba a abajo.