¿Destinados? || Luka Couffaine x Oc ||

Capítulo 165: Antes de cualquier cosa... ¡Somos hermanos!

|| Narra Marinette ||

-¡Garras fuera!

Aclamo el joven rubio que había venido conmigo después de esperarme bajo la lluvia a que recogiera cada uno de los miraculous que habíamos utilizado en la batalla con aquel sentimonstruo  y akumas que realmente nos habían puesto en un gran dilema. Él siempre estaba conmigo, en las buenas y en las malas... era hora... era el momento. Risk me había concedido el valor suficiente para revelarle tanto mi identidad junto con mis sentimientos por él y más sabiendo que existía una ligera probabilidad de que en algún momento de lo que restaba de la semana no podría volverle a ver por bastante tiempo... aunque su primo Félix estaba tomando su lugar en este momento en dicho viaje.

-Bueno, hasta la próxima, my lady.- Se proponía a despedirse para retirarse de inmediatamente a su hogar y antes de que lo pudiera hacer le detuve de la muñeca. Él me volteo a ver sorprendido ante mi repentina acción... era normal.

-¡Espera!- Pedí primeramente con la mirada baja ya que esto era algo difícil de hacer. Trague saliva.- Y-Yo estoy... Yo estoy lista esta vez.- Con una mirada expectante por parte de Adrien me aleje un par de pasos para finalmente armarme de valor y pronunciar las palabras que no hubiese podido decirle sin haber vivido la batalla de hoy.- Motas fuera.

La magia de mi miraculous se revirtió en su totalidad dejando frente a los ojos de Adrien a la insignificante y miedosa Marinette que conocía. Nuestras miradas se mantuvieron conectadas por bastante tiempo bajo la lluvia, mis mejillas ardían y no esperaba nada a cambio, después de todo, Claire tenía mucha razón sobre mi... Soy aún muy inmadura, por Risk logre ver lo que Adrien realmente quería... ser él mismo y no tener que estar frente a fotógrafos o ser hijo perfecto de Gabriel Agreste... él quería ser igual de libre que cuando se transforma en Chat Noir y yo únicamente me enfocaba en ese Adrien perfecto frente a mi... no aceptaba que ese chico al que decía perfecto era infeliz siendo perfecto... Por mi inmadurez y no ver bien lo que tenía frente a mi lo iba a perder todo... aun compañero, a un amigo, a fiel héroe compañero y al chico que digo amar.

-Gracias, Marinette.-Fueron las palabras que susurro en mi oído cuando de forma repentina me envolvió en sus brazos bajo la lluvia, correspondí sin dudar al abrazo aferrándome a él y sin poderlo evitar unas cuantas lágrimas empezaron a caer por mis mejillas las cuales eran fácilmente camuflajeadas por la lluvia.

-P-Perdóname, Adrien.- Pedí ocultando mi rostro en su pecho.- Tu siempre estuviste para mi cuando menos lo necesitaba, tanto en las buenas como en las malas y como te pague siendo tu Chat Noir. ¿Cómo pude ir mirando a la cara tanto a mis amigas y a tu hermana diciendo que te amo cuando ni siquiera te aceptaba como eras tras el antifaz? Si no hubiera sido por Risk... yo seguiría auto engañándome de que eres feliz siendo el Adrien perfecto que tanto aborreces ser por tu padre... yo... yo... lo siento tanto.

-No tienes el porqué disculparte, Marinette.- Sentí como me alejo de él para así vernos directamente a los ojos.- Soy buen actor, mi padre me educó así, era normal que me idealizaras y yo idealizará también a Ladybug. Ambos aprendimos con esta batalla a que no todo es como pensamos.- Llevo una de sus manos a una de mis mejillas.- Pero, ¿Sabes? Agradezco que pudiera saber que la persona con la cual puedo ser yo mismo y que pueda leerme como realmente soy seas tu, obviamente incluyo a mi hermana y a Luka, pero tu... tu quien con o sin antifaz eras la héroe de todos me alegra saber que escogí a la persona correcta a quien amar. Tu ya sabes lo que yo oculto a través de una sonrisa y yo también deseo conocer lo que hay detrás de esa mascara... quiero conocer a la verdadera Marinette a mi verdadera Ladybug.- La lluvia era el único sonido que gobernaba a nuestro al rededor... habíamos madurado y ambos deseamos conocernos como realmente éramos... finalmente... creo que había ocurrido algo bueno después de tantas mentiras y problemas que habían pasado entre nosotros siendo héroes. Iba a tomar la iniciativa de abrazarlo con más libertad pero repentinamente su teléfono celular empezó a sonar obligándome a separarme de él.