Hasta pronto Lena.

2 1 0
                                    

Era una nublada mañana del 22 de agosto, Juliette tenía una taza de cafe en sus manos sentada en su silla viendo a su gran ventana, mientras en su cama estaba un Thomas durmiendo.

Hoy era el día en que Lena se despedía de ellos, Juliette no había podido dormir la mayoría de la noche.

Iban todos a la casa de Lena, iba a ser temprano, como a las ocho, para estar en los angeles a las dos, así es hacían seis horas de viaje en el coche, puede que los angeles no estén tan lejos, pero bueno una chica menor de edad no iba a venir seguido a ver a sus amigos.

Juliette estaba despierta desde las cinco de la mañana, ahora eran las seis y media.

Un adormilado Thomas se estaba moviendo a espaldas de ella, al no ver qué Juliette estaba con el se despertó.

-Abs, cariño ¿Esta todo bien?- Le pregunto un poco desconcertado.

-Todavia tienes media hora para dormir Speack, duerme un poco más.

-Regresa a la cama.

-No, estoy bien.

Thomas se sentó en la orilla de la cama al ver qué Juliette no le hacía caso, frotó sus manos en si cara.

-¿Puedo usar tu ducha?- Le pregunto Thomas y Juliette solo asintió.

Al escuchar la puerta Juliette no pudo evitar derramar unas cuantas lágrimas.

Unos 15 minutos tardó en la ducha y salió secándose el pelo.

-Me iré a bañar.

Juliette tomó ropa de su armario y fue hasta la ducha, elijio una ropa cómoda, en Nimanpoly ya estaba haciendo un poco de frío. Salió del baño con una toalla enredada en su cabello, se echo sus cosas para la cara.

-Ya veo por que tienes la cara tan suave- Juliette sonrió de lado.

Seco su cabello y lo puso en un moño desordenado.

Cuando los dos estaban listos se escuchó en la habitación de Erick que ya se estaban alistando el y Glara.

-¿Estarás bien?- Pregunto Thomas frotando sus hombros.

-Le he hecho una pulsera, ya sabes para que me recuerde, Juliette la loca de las pulseras- Contesto Juliette haciendo un puchero.

-¿Juliette?- Llamo Glara desde el otro lado de la puerta.

-Pasa Glara- Glara abrió la puerta, con su pelo negro en una coleta, y un poco de corrector en sus ojeras.

-Podemos usar mi cámara para tomarnos una última foto- Saco la cámara de su maletín.

-Si, es buena idea.

Cuando ya era hora de marcharse los chicos se fueron en el auto de su madre, estos últimos días Erick está aprendiendo a manejar así que se lo llevó.

Al llegar ella, Lena estaba dentro, viendo alrededor de su casa sola con nostalgia, ella quitó sus lágrimas con su mano y tomo la mano de Jack para recibir a sus amigos.

-Hola- Sonrió Lena viéndolos.

-Axel me dijo que no tardaba en llegar- Dijo Glara.

-Esta bien.

Unos cinco minutos después Axel llegó con una cara de pocos amigos.

-¿Disculpe?- Le dijo Glara a la madre de Lena. -¿Nos podría tomar una foto a todos porfavor?- La madre de Lena asintió.

-Yo estoy bien- Dijo Jack.

-¿Esta todo bien?- Le pregunto Thomas y el solo asintió.

Así que sin reprocharle más la madre de Lena les saco una foto con la cámara de Glara.

Sanar Lo Roto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora