Majo
Han pasado dos semana desde lo sucedido con JK y desde ese día no he sabido nada de él. No sólo de él, Jin cada vez habla menos, en estas dos semanas solo he hablado tres veces con él y cada vez menos tiempo, dos de esas tres veces terminamos discutiendo por algo. Ya no se que hacer, pedí días en el trabajo ya que no podía controlar mi llanto, en un momento estaba bien y al otro mis lágrimas salian sin ningún problema. ¿En que momento dejamos de sentir? ¿En que momento dejamos de vivir en ese cuento de hadas?. Me pregunto cada día si ya me dejo de amar, eso explicaría todo esto, su ausencia, su actitud. No se como llegamos a este punto, si me hubiera dicho que me fuera con él, lo habría hecho, sin pensarlo. Habría renunciado y habría hecho mis maletas enseguida, pero no lo hizo. Cuando yo se lo sugerí simplemente se río, como si no fuera opción, dijo que era una ridicules y pensó que era una nueva manera de presionarlo.
Hoy amaneci mejor, desde hace dos días que no he llorado y creo que puedo regresar a mi vida, decidí que no dejaría que Jin siguiera afectandome tanto, más cuando al parecer a él no le afecta para nada no tenerme cerca. Me di una ducha y pensé que arreglarme seria una buena idea, hoy es día festivo por lo que mi hermana esta en su casa. Salí y camine por el parque, tenía días que no me daba el sol y se sentía bastante bien. Compré una nieve de chocolate con malvaviscos y me senté en una banca.
Solía pensar que la gente que caía en depresión eran personas débiles de mente. Cuando mis padres murieron, mi hermana y yo nos obligamos a salir rápido de la tristeza, debíamos trabajar y hacernos responsables de todo. No importa cuan pequeña eres o que tan preparada estes para la vida, cuando te queda sola debes madurar y hacerte cargo de ti misma. Esta vez no necesitaba hacerme cargo de nada, ya era responsable de mi misma, tengo una casa, un trabajo y puedo decir que no necesito más. Esto complico las cosas para poder salir adelante.
Hace dos días mientras mis ojos ya no tenían más lágrimas, pensé en todo esto y en como mi vida se estaba yendo a la mierda mientras el mundo seguía con la suya como si no pasara nada. Sentí lástima por mi.
-Hey- su voz me saco de golpe de mis pensamientos, sentí un vacío en mi estomago y mi corazón se volvió loco. Voltee y su sonrisa me lleno de paz. Jk estaba sentado a un lado mio y me observaba de arriba a abajo
-Hola- dije nerviosa
-¿Cómo estás?
-Bien, iba a ver a mi hermana.- sus ojos me seguían estudiando -¿Y tu cómo estas?
-¿Segura que estás bien?
-¿Tan mal me veo?- pregunte preocupada
-Te ves hermosa- dijo sonriéndome cariñosamente.
-Bueno, yo me tengo que ir- dije tratando de evitar... evitar sentirme como lo estoy haciendo.
-Te acompaño
-No. No te preocupes, puedo ir sola- empecé a caminar y JK camino detrás de mi -De verdad...- dije frenandome en seco y girando hacia él, no sabía que venía tan serca de mi hasta que su pecho impacto contra mi cabeza. Estuve a punto de caerme pero sus brazos me rodearon para que no me cayera.
-No te estoy siguiendo, Majo. Yo también voy a casa de Hobi.
-Oh- dije aún en sus brazos
-Te extrañe- dijo sin más. Yo también, pensé. Me soltó de sus brazos y caminamos hasta el departamento de Mica.Cuando llegamos al edificio subimos al elevador, no entiendo por qué pero los elevadores siempre crean tensión cuando dos personas suben solas. Si es alguien a quien no conoces probablemente hay sensación de incomodidad, pero cuando es una persona que te atrae, esa atracción se maximizara. El piso de mi hermana era el tercero, por suerte no tendríamos que estar tanto tiempo ahí, no es que no quiera estar con él, y precisamente ese es el problema. Sigo negándome a creer que me gusta, a pensar en que puedo llegar a sentir algo y es que siendo honesta, llegó en el momento más vulnerable para mi, vino a desordenar mi vida pero a ordenar mi alma, hasta que se fue, o más bien hasta que lo aleje. Fue como un tsunami, días antes el mar puede estar agitado y desenfrenado, después todo se calma, una especia de serenidad se apodera del océano hasta a hacer un silencio ensordecedor, una calma que da miedo por que sabes lo que viene.. Al final llega el desastre, ese que destroza todo a su paso, sin importar con qué o con quién arrase. Eso fue JK para mí, un tsunami... ese que hagas lo que hagas por arreglar todo y regresar a la normalidad, encontrarás rastros de él por todos lados.
Sentí su mirada incluso antes de escuchar su voz .
-¿Qué harás más tarde? Necesito enseñarte algo.- lo iba a pensar, juro que en mi mente estaba negarme o por lo menos tardarme en responderle, pero ahí estaba, la Majo hipnotizada que lo seguiría a cualquier lugar.
-Esta bien- dije y voltee a verlo -No tengo planes.
-Bien- me sonrió y entonces lo supe. Acepte que viniera por mi como lo había prometido. Después de semanas en las que cumplió su palabra de alejarse de mi, ahora también cumplía su promesa de luchar por mi si Jin no lo hacia... y Jin no lo estaba haciendo.Las puertas del elevador se abrieron y JK camino primero que yo, me frene para no tener que chocar con él, sentía que eramos como una granada que con el más ligero roce estallaria, pero entonces él se detuvo a un lado mio y dejó un suave beso en mi mejilla. No dijo más y salió del ascensor.
Entramos al departamento y la cara de mi hermana fue de extrema preocupación, se cuando finge ser exagerada y se cuando su reacción es verdadera. Me tomo de la mano mientras una lágrima corrió por su mejilla
-Majo, esto no puede seguir así- volteo a ver a Hobi y parpadeo rápidamente para alejar las lágrimas.
-¿Cómo estás pequeña?- Hobi me dio un abrazo que literalmente senti hasta los huesos. Hice una mueca de dolor y JK empujó con una mano a Hobi para alejarlo.
-La lastimas- dijo el empezando con una voz alta y disminuyendo conforme iba diciendo la palabra
-Lo siento- dijo Hoseok viendome para disculparse y luego viendo a JK para que viera que había sido un accidente.Se que no me veo bien, se que baje de peso y ni siquiera me quise ver al espejo esta mañana, pero quise usar unos jeans y al probarmelos se me caían, terminé utilizando un vestido para disimular un poco pero al parecer no funcionó. Mica me sermoneo sobre comer bien y dejar de sufrir, dijo que es hora de continuar con mi vida y que pase lo que tenga que pasar. Quiere que aclare las cosas con Jin y que nos dejemos de juegos por que la depresión me va a matar. Se que tiene razón, se que no exagera por que conozco mi cuerpo y no se siente bien, pero las platicas que he intentado tener con Jin terminan mal, no se que tan pesada he sido con el tema y tal vez tengo la culpa de que piense que todas las platicas sobre el tema sean para presionarlo. Pensé que estaba siendo bastante tolerante y comprensiva, creí estarle dando espacio para no presionarlo pero parece ser que no lo logré.
Más tarde JK se ofreció a llevarme para que no sospecharan que nos íbamos juntos. Caminamos por el parque y él se detuvo a comprar dos nieves pero no nos las comimos ahí, después paso a recoger unos platos de comida chatarra y me llevó al final de la calle, subimos la colina y entramos a un edificio. La subida del elevador fue más larga y no me refiero solo a que subimos más pisos, si no hubiera sido por las bolsas de comida tal vez habríamos terminado teniendo sexo ahí dentro, la tensión que sentíamos era palpable, podría jurar que él escuchaba mi corazón desde el otro extremo del ascensor.
Salimos a la azotea del edificio, y tomamos asiento en una plancha de cemento que había ahí, saco los platos de comida y las nieves, armo un pequeño picnic y supe que era lo que quería mostrarme. El atardecer caía sobre nosotros, los colores anaranjados que pintaban la ciudad caían sobre nosotros. La tarde era cálida, el clima era perfecto. Comimos mientras platicábamos sobre nuestros trabajos, nos reímos cuando nos dimos cuenta que las nieves se había derretido y aún así las comimos.
-Vamos, te llevare a casa- dijo el cuando por fin oscureció. Me sentí incomoda, pensé que no se había divertido o que tal vez tenia que ir a ver a alguna chica.
-Si tienes algo que hacer, no te preocupes mi casa está bastante cerca. - JK soltó una carcajada.
-¿Crees que tengo algo más que hacer?
-Supongo- dije algo insegura
-Lo único que tengo que hacer, todos los días, desde que te besé..- se acercó más a mi -es ir a mi cama y pensar en ti hasta quedarme dormido.- levantó mi rostro con su dedo -Te llevaré a casa, por que como nuestra primer cita, debo dar una buena impresión. Incluso me propuse no besarte- acercó más su rostro al mío -pero me lo pones bastante difícil.- me besó y evidentemente le respondí el beso.
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Destino: Lo que pudimos ser...
FanfictionLibro 7 saga Destino Lo que pudo ser... algo simple como eso, cuando el destino juega sus propias cartas. Hay personas para toda la vida y personas que llegan para da paso a otras... El destino ya está escrito.