Majo
Me tape la boca como si así fuera a contener las lágrimas o el dolor, subimos a la camioneta de Lex y fuimos a dejar a la bebé de Tess con su mamá. Me sorprendía la calma de Lex, cuando recibió la llamada de Nam, él le dijo del accidente y lo último que escucho de el fue "Te amo" antes de, supongo, desmayarse. Todas viajamos en silencio mientras Lexy recorría la carretera, mi teléfono sono y vi que era JK.
-Amor, ¿Estás bien?- dije y todas las chicas voltearon a verme
-Buenas noches, estamos hablando del número del señor Jungkook, hablamos del Hospital- la chica me dio la información, era el hospital de aquí del pueblo así que Lex dio la vuelta y condujo de regreso. Era demasiado rápido para que los hubieran encontrado a menos que antes de que Nam se comunicara con Lex, él hubiera marcado a emergencias.Llegamos al hospital y preguntamos por ellos, llenamos las formas para la estancia y esperamos a que los subieran a piso para poder verlos. Cuando la enfermera nos indico las habitaciones subimos, en cada habitación había cuatro camas. Hobi, Jimin y Tae estaban en una y Jin, Yoongi y JK estaban en otra. Entramos a verlos y todos estaban bien, Hobi se había fracturado un brazo, Yoongi un dedo y Jin la pierna. Jk estaba dormido y tenia tres costillas fracturadas, Jimin tenía golpes en la cara por la bolsa de aire y Tae por suerte solo tenia rasguños menores. Enteo una enfermera a la habitación y Lex se levantó.
-Disculpe, ¿Kim Namjoon, esta aquí?
-Si, pero le están haciendo unos estudios, cuando terminen lo subirán a piso.- Lex salió a hablar con ella y después de un rato entro al cuarto llorando.
-¿Qué sucede?- le pregunté
-Nam sigue inconsciente al igual que JK, ninguno de los dos a despertado.
-¿Qué?- voltee a ver a Jungkook
-Al parecer solo fue el golpe pero todo está bien, según los estudios que les han hecho. Solo tenemos que esperar.Mi estomago se revolvió, no sabía que hacer ni que esperar. Me sente a la orilla de su cama y acaricie su cabeza, le di un beso en la frente y acerque mi boca a su oído para que me escuchara.
-Amor, estoy aqui.- besé de nuevo su frente -tienes que despertar para poder irnos a casa. No me puedes hacer esto, apenas decidimos tener un bebé, tienes que cumplirlo.- dije llorando.
No se si todos en la habitación me estaban escuchando pero no me importaba, quería que despertara y quería que supiera cuan asustada estaba. El siempre quería protegerme, siempre quería cuidarme cuando tenia miedo y necesitaba que lo hiciera de nuevo. Estaba asustada y el no estaba acariciando mi cabello como siempre.
-Por favor... por favor, despierta. Llévame a ver las estrellas otra vez- susurré para él pero al parecer todos estaban al pendiente de nosotros. Me quedé callada un momento y me puse roja, cuando escuché a Jimin reírse
-Hijo de puta, ¿La llevaste a ver las estrellas?- todos los chicos empezaron a reír y JK empezó a moverse, estaba intentando contener la risa para que no le dolieron las costillas.
-Dijimos que iríamos cuando todos tuviéramos a alguien- dijo Tae.
-No me hagan reír- dijo él y yo todavía estaba en shock
-Jeon Jungkook, si no te explicas ahora mismo te romperé las costillas que aun tiene enteras.
-Nena...- se enderezo un poco y se quejo del dolor
-No, no, no. No te muevas así.- dije de inmediato
-Nena, sentí que me iba a morir. Nam y yo veníamos en la parte trasera de la camioneta y cuando el camión nos choco, ambos volamos del auto. Fueron segundos, pero vi toda mi vida y todo lo que aún no había hecho. Todas las cosas que quería hacer contigo... Cásate conmigo... te juro que esto ya lo tenia planeado, pero después de hoy no quiero esperar más para pedirtelo. Por favor, cásate conmigo.- no supe a que hora las lágrimas habían empezado a caer de mis ojos, tenia un nudo en la garganta y simplemente asentí y lo besé.Las felicitaciones no se hicieron esperar, la enfermera subió a regañarnos por el escándalo y luego regaño a Hobi, Tae y Jimin que estaban fuera de su habitación. Subieron a Nam a piso, despertó mientras le hacían los estudios y al parecer todo está bien a excepción de su rodilla y su codo. Nam intentaba proteger a JK y terminó lastimandose más por eso. Su golpe en la.cabeza fue fuerte pero no pasó a mayores. Él y JK sufrirán algunos dolores de cabeza e irán disminuyendo con el tiempo.
Le dije a JK que me acercaría a hablar con Jin, era el único que no tenia pareja aquí. Hace un momento con la propuesta de JK no lo pensé, estaba perdida en él y sus palabras, pero no se que tan bien lo haya pasado Jin, por que siendo honesta estos, nuestra despedida no fue una despedida, simplemente fue una nota en la mesa de su cocina.
-Jin- dije a la orilla de su cama cuando detrás de mi escuché su nombre y una chica blanca de cabello oscuro entró corriendo y se arrodillo a su lado
-Bebé, ¿Estás bien?- el asintió y ella lo beso. Di media vuelta para irme.
-Majo- la voz de Jin me detuvo. Me gire hacia ellos y la chica no me veía a la cara. -Ella es Gisel. Es mi pareja ahora.- su vo era precavida -Solo quería que la conocieras.
-Hola Gisel- le sonreí amablemente
-Hola Majo.. yo lo sien- bege con la cabeza y camine hacia ella lo que hizo que se levantara.
-No lo hagas. Ahora eres una de nosotros- le di un abrazo -Los dejo para que te asegures que Jin este bien.- ella asintio y yo me fui de nuevo con JK.Durante la semana estuvimos yendo a visitarlos, no necesitaban de mucha compañía ya que los siete estaban juntos. Si lo analizabamos hasta cierto punto era gracioso que no pudieran, ni siquiera, estar en un accidente separados.
El fin de semana los dieron de alta y lleve a JK a casa. Los chicos estaban felices porque tendrían días libres de trabajo a excepción de Tae y Jimin, que no tuvieron gran cosa. Nam estaba quejándose como niño pequeño porque no podría usar su moto en un buen tiempo y los viajes de negocio tendría que hacerlos Lex.
Nos reunimos el domingo en casa de Tess y Jimin y Jin aprovecho para presentar formalmente a Gisel, la verdad es que era muy agradable y Jin se veía feliz con ella.
Todo regresaba a la normalidad.
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Destino: Lo que pudimos ser...
Fiksi PenggemarLibro 7 saga Destino Lo que pudo ser... algo simple como eso, cuando el destino juega sus propias cartas. Hay personas para toda la vida y personas que llegan para da paso a otras... El destino ya está escrito.