Destino: Lo que pudimos ser...

Capítulo 18

Jungkook

No sabía si debía preocupame por ella o si de verdad solo era parte de su cansancio, aunque me incomodaba lo de la rosa. Nunca he celado a nadie, todas las chicas con las que he estado son de una noche, no me interesaba realmente si querían acostarse con alguien más. Sentí celos cuando Jin estuvo aquí y me di cuenta que yo no podía hacer nada. La cosa es que confío demasiado en ella. Ha pasado por tanto que dudo que en este momento piense en alguien más y no es que me sienta seguro pero de verdad en nosotros es mucha, así que la rosa no me provocó celos, me provoca incomodidad, me preocupa que alguien quiera jugarle alguna broma de mal gusto. Se que no es alguien que quiere conquistarla porque no lo haría a escondidas.

Mi alarma aun no sonaba y Majo descansaba el día de hoy, tengo algunos minutos despierto observándola dormir, es hermosa. Después de que nos dormimos anoche, me desperté algunas veces a verificar que no estuviera soñando feo, pero al parecer pudo dormir bien. Sentí que empezaba a despertarse y acaricie su cabello, su cara estaba frente a la mía y cuando abrió sus ojos sonreí. Espere unos segundos y de repente empecé a darle besos rápidos por toda la cara

-¿Qué te pasa?- grito entre risas y se empezó a querer alejar poco a poco hasta que de repente se cayó de la cama sobre su trasero.
-Te voy a matar- gritó
-Nena, yo te estaba besando y te caíste sola
-No, tu provocarte que me cayera.
-Puedo sobar tu lindo trasero
-Estas muerto, que lo sepas.- tomó la almohada que se había caído junto con ella y empezó a golpearme. Se subió a horcajadas sobre mi y lo que empezó como un juego terminó siendo el motivo perfecto para hacerla mía. 

Termine de arreglarme, salí del baño y ella estaba acostada boca abajo sobre la cama, se había puesto mi playera que en esa posición solo le cubría hasta la mitad de su trasero. Estaba enviandose mensajes con las chicas así que no se dio cuenta que yo estaba detrás de ella. Me acerque lentamente y le mordí una nalga. Salí corriendo de la habitación y Majo detrás de mi.

-¡Jeon Jungkook!, ven acá
- No, amor. Es tarde me tengo que ir
-pero vas a volver- dijo desde la entrada señalandome. Subí al auto, le lance un beso y me fui a trabajar.

Después de medio día salí de una reunión, entré a mi oficina y revisé mi celular, tenia un mensaje de Majo con una foto.

*Mira lo que hiciste🥺🥺*

Revise la foto y era de la mordida de esta mañana. Su piel estaba roja y mis dientes seguían un poco marcados, no la había mordido tan fuerte, pero su piel era tan blanca que las marcas aparecían sin esfuerzo. Me arrepentí de inmediato.

*Lo siento, nena. Lo compensare😔😔*

Su respuesta llegó enseguida

Majo: ¿Cómo piensas hacerlo?
Jk: Tal vez te deje morderme también
Majo: ¿Tal vez?... morderte es lo menos que voy a hacer
JK: Mmh.. esto me interesa
Majo: ¡Tonto!

Más tarde antes de salir del trabajo le marque a Majo. Le dije que le prepararía la cena pero ella ya había cocinado algo. Me fui directo a la casa.

Cuando llegue, estacione el auto y baje, antes de entrar me encontré una rosa roja pegada a ma puerta con un trozo de cinta adhesiva. Había música adentro y olía a comida. No quise asustarla y eche la rosa al bote de basura que estaba afuera.

-Hola nena, regrese.
-Hola amor. ¿Cómo te fue?-salio de la habitación y automáticamente la revise de arriba a abajo para verificar que todo estuviera bien. Se que todo estaba en orden o ella no habría salido tan sonriente de la habitación, pero la sensación que tenía en el pecho me hacía sentir intranquilo.
-Bien, fue un poco fastidioso pero al parecer ahora tendré un buen caso. La mamá de Lex no lo quiso tomar y Jimin con lo de Tess. No tiene cabeza.
-Si, pobre Tess. Si no da a luz rápido va a estallar.- se río y eso sirvió para relajarme
-Oye me di cuenta que tus cámaras de vigilancia están apagadas ¿Por qué?
-Mmh- se quedó pensando confundida por mi pregunta -Creo que hace mucho se descomposición pero como ya no estábamos aquí ninguna, nunca nos dimos el tiempo de arreglarlas ¿Por qué preguntas?
-No, nada. Las vi por casualidad y me di cuenta que estaban apagadas, son importantes.
-Si, lo sé. Investigare en donde puedo arreglarlas
-No te preocupes, le diré a Hobi.- ella me sonrio

Cenamos y recibimos un mensaje de Mica diciendo que pasarían a visitarnos rápido. Majo había preparado un postre así que hizo un poco de té y esperamos a que llegaran para cenar.

-Hola, chicas!- gritó Mica en la puerta -Ay, ya extrañaba mi casa
-¡Oye!- le dijo Hobi -Si quieres te puedes quedar con ellos
-¡No!- respondimos Majo y yo al unísono y Hobi soltó una carcajada
-¡Que malos! Les recuerdo que también es mi casa
-Si hermana, pero tu ahora vives con Hobi y allá te quedas- volvimos a reír al ver la cara de Mica

Las  hijas se quedaron platicando en la mesa y yo salí de la casa con Hobi

-Mira, ahí están las camaras- las señalé
-Necesito quitarlas para revisarlas.- me subí a una barda y trepe al techo de la casa, quite las cámaras y el cableado. -Toma
-Pareces un chango- se río -Entonces dices que lo de la rosa se repitió aquí
-Si, me parece que si es una broma, ya esta llegando lejos.
-Si. El problemas es que no hay nada que podamos rastrear.
-Lo sé, por eso quiero arreglarlas
-¡Ahh! Mañana tengo mucho trabajo pero en mis tiempos libres las arreglo.
-Claro, hermano. Gracias

Entramos a la casa y platicamos un rato más. Minutos después ellos se despidieron y se fueron. Majo y yo nos fuimos a dormir, mañana ambos trabajábamos y yo quería ir a dejarla al trabajo.

Llegamos al hospital y ella salió del auto, se encontró a una chica en la puerta y entraron juntas, me quedé ahí en el estacionamiento diez minutos más observando cualquier cosa pero en realidad no sabia que buscar o que esperar, me rendí y me fui a trabajar. Estoy seguro que si esto es personal seguirá ocurriendo, y espero que si se vuelve a aparecer por la casa, las cámaras ya están listas así mínimo sabremos contra quien debemos ir.