Jano.
Al llegar al hotel me encontré con Arlet tumbada en la cama boca abajo leyendo un libro. Ella movía el culo de un lado para otro, reí en bajo. Me acerqué a ella sin hacer ruido ya que no se había dado cuenta de que había llegado. Me subí encima y besé su mejilla.
—¿Qué lees? —Pregunté en su oído.
—El Duque y yo.
Cerré el libro para ver la portada. Salía un chico negro vestido de Duque y una chica blanca de cabello rubio con un vestido.
—¿Los Bribgerton? —Leí el nombre que había en la portada.
—Es una serie de Netflix ¿no la has visto?
Negué tumbándome en la cama.
—Ya sabes que lo romántico y yo no nos llevábamos bien.
Ella sonrió cerrando el libro. Pasó su brazo por mi pecho y acarició mi mejilla, cerré los ojos disfrutando de sus caricias.
—Pues deberías verla, está increíble —comentó con una sonrisa —me encantaría tener una historia como la de ellos dos.
—¿Y es que la nuestra es mala?
Abrí los ojos mirándola. Ella rió negando.
—No, no es mala, pero la de ellos se ambienta en el año mil y pico, y nosotros estamos en el dos mil veintidós.
—Bueno, yo si quieres me puedo disfrazar de Duque, tú puedes ser —me hice el pensativo —tú puedes ser mi marquesa.
Ella rió
—El Duque Kénnedy —saboreó ese nombre —te queda increíble.
—La marquesa Moon, suena sexy.
Ella mordió su labio y ambos reímos. Me di la vuelta quedando encima de ella.
—En Halloween podíamos hacer algo así —comentó —tu vestirte de Duque y yo de marquesa.
—Perdón, amor, pero para Halloween profiero que te disfraces de una monja asesina con escote y minifalda.
Arlet rió.
—Entonces tú te podías vestir de un Duque sexy, y provocativo —humedeció sus labios —así esta monja te echaría de su agua bendita y en la cama te intentaría quitar el demonio.
—Umm, tentador —mordí su labio —espero el día con ansias.
Ella sonrió. Escondí mi cara entre el hueco de su cuello y hombro. Se aclaró la garganta y dando una bocanada de aire habló:
—Mi madre sigue hablándome.
En cuanto escuché que dijo: "madre" levanté la cabeza. Llevábamos aquí una semana, su madre no paraba de llamarla o mandarla mensajes. Ella cogió su móvil y puso su huella. Me pasó el móvil enseñándome la conversación.
—Hola, hija, ¿cómo te encuentras? Espero que estés bien —leí en voz alta.
Arlet no respondió el mensaje. Solo la dejó en leído.
Como siempre...
—Tu madre está muy extraña —susurré mirando la pantalla.
Nos sentamos en la cama.
—Lo sé, después de la primera llamada me dejó muy pensativa.
—¿Pensativa por qué, monja?
—No lo sé, ¿no notaste algo raro en su voz?
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Tipos de besos. +18 (1&2)✔️
Teen FictionPRIMER Y SEGUNDO LIBRO. COMPLETA. Portada creada por: @-Luadxrkhold😍😍😍 ¿Alguna vez habéis escuchado hablar sobre el juego de: "tipos de besos"? Jano y Arlet, dos mejores amigos con una vida bastante común. En su vida no hay nada interesante has...