Fantasía de Amor - Lumity

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Capítulo 17:

A la mañana siguiente, la criada personal de la princesa separó las cortinas de la habitación luego de haber colocado una taza de té en la mesita de noche; el tema del envenenamiento había quedado en secreto entre los que habían estado presentes y el mismo director Bump, Amity con suerte pudo convencer al hombre de cabellera lascia y joven pero de rostro algo arrugado, que lo sucedido no fuera comentado a sus padres ni mucho menos al emperador de Carmine, pues este de vez en cuando podía ser muy cardíaco y podría ocurrir lo peor por el intento de asesinato de su única hija y heredera al trono.

Cuando Ingrid estuvo a punto de despertar a Luz, la puerta de la habitación fue delicadamente golpeada tres veces seguidas, casi inaudibles, observó a través de la mirilla encontrándose con el rostro pálido de Blight. Al dejarla entrar, le hizo saber que Luz aún se encontraba descansando, Amity se ofreció a despertarla y la criada salió en busca del resto del desayuno de la morena.

Observando su rostro adormilado y la almohada algo babeada, acaricio su mejilla y luego su cabello, se sentó despacio en la cama admirando como la chica dormía plácidamente soñando quien sabe que cosa.

—Luz, despierta, es hora de ir a clases. - de hecho aún faltaba una hora para que estas comenzaran.

Pero la ojiambar quería verla lo antes posible, lo que había presenciado el día anterior la había dejado algo...traumada si es que esa palabra buscaba, se empezaba a preguntar si lo sucedido había sido su culpa, tenía entendido que antes de lo ocurrido con su celo, muchos detestaban a Luz, tanto por los rumores que circulaban sobre ella así como su compromiso.

Agitó su cabeza acercándose más al rostro de su amiga, las pestañas algo largas y rizadas, sus labios se mi resecos, la manera en como su pecho subía y bajaba, su...aroma. Eso no evitó que su manera de despertar resultara peculiar.

—¡Despierta! - exclamó, ni molesta ni paciente, una dura cachetada enrojeció la mejilla de Luz quien abrió los ojos como dos grandes ventanas y se sentó de golpe en la cama.

—¡Ouch! ¡Oye, porqué hiciste eso Ams! - lloriqueo tocando su ardiente mejilla, podía incluso sentir cada detalle de la mano de Amity en ella.

—Tienes cara de que te gusta que te golpeen. - se encogió de hombros.

—¡Joder eso dolió, como un demonio no vuelvas hacer eso!

—Eres una princesa ¡habla como tal! - golpeó el brazo de la chica quien de inmediato se retorcio del dolor.

—Mira quien lo dice...bravucona. - murmuró.

—¿Dijiste algo? - miró amenazante.

—Ummn N-no... - fijó su vista a otro lado. —nada.

Suspiró. Sacó su pie por el otro lado de la cama hasta que se puso en el filo de esta dándole la espalda a la otra princesa, Amity parecía no querer perderse ningún movimiento de su amiga. Sentía que muchas cosas habían cambiado desde que le oyó decir a Luz la palabra mi seguida de su nombre, reclamandola como suya, pensó que sería por la fiebre y la gripe que podía hacer que uno dijera tonterías y viera alucinaciones, pero incluso en los sueños de la chica, Blight era la responsable de tal sonrojo.

Quería evitar pensar en eso, tenía unos asuntos más importantes con los que lidiar. Lo que no sabía Luz era que Amity Blight ya estaba buscando la manera en como llegar al trono.

—Tardas mucho en darte una ducha ¿que tanto haces en el baño? - preguntó Blight luego de esperar treinta minutos para que la morena saliera del baño.