16. Adiós.

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Adiós.

La casa en medio del bosque había desaparecido por completo como si nunca hubiese estado ahí.

Ennio estaba terminando de cubrir la tumba en medio del bosque mientras su hermana adornaba con algunas flores que encontró por ahí. La última hora había sido la más silenciosa desde que los cuatro estaban juntos. Nadie quería decir nada al respecto, el dolor que Elliot sentía en esos momentos era compartido por todos sus compañeros a través de una empatía de esas que pocas veces se ven en la vida. Todos y cada uno de ellos lamentaban la perdida de Logan incluso cuando no lo habían conocido por mucho tiempo, eso no importaba pues era realmente el ver a su amigo devastado lo que provocaba la reacción.

-Está lista. Elliot ¿Quieres decir algunas palabras? — Ennio estaba más formal que de costumbre, por esos momentos de duelo para su amigo había dejado sus bromas y comentarios sarcásticos de lado. Entendía perfectamente el sentimiento que debía estar pasando por su compañero, pues algunos años atrás, él también había perdido a su padre en circunstancias similares. A causa de Libizo.

Elliot no había dicho una sola palabra desde que despertó en el suelo y se dio cuenta de que nada había sido un sueño o una alucinación. Su padre en verdad estaba muerto y sus amigos estaban cavando una tumba en el solitario bosque para darle una sepultura digna.

-¿Qué podría decir? — Rompió el silencio al fin — Nunca había perdido a alguien así. Podría decir que no merecía una muerte como esta, que era un buen hombre y que siempre se preocupó por mi bien estar. Que nunca le di las gracias por todas las cosas que hacía, pero ¿Saben?, nada de lo que diga tiene sentido porque ya no está. Se lo acaba de tragar la tierra — El chico apretaba los puños con fuerza en un intento por contener el dolor que invadía su corazón y arremetía contra él como una estaca insistente queriendo destrozarlo por completo.

-Claro que tiene sentido, no olvides que dio su vida para que tu siguieras aquí — Hesper puso su mano sobre el hombro de su primo intentando calmarlo un poco. Podía sentir el dolor casi con toda la intensidad que él.

-¡¿Para qué diablos me sirve eso?! — Elliot levantó la voz y retiró la mano de Hesper -, Acaba de tirar su vida a la basura frente a mis ojos. No sirve de nada si ya no está aquí, ¿Qué se supone que haga?, ¿Seguir por la vida como si nada de esto hubiera pasado?, Eligió la salida fácil en lugar de pelear por seguir a mi lado. Eso es lo que hacemos en la familia, tomar la salida fácil. Quizá debería buscar a Josephine ahora mismo y darle lo que sea que quiera para largarme de una buena vez por todas de aquí — Estaba enojado de alguna manera con su padre por haberlo abandonado de tal forma.

Ennio caminó de prisa hacia él y le propino un puñetazo directo a la mejilla que lo derribó casi de inmediato.

-Escúchame bien maldito idiota — Ennio comenzó a hablar con voz firme -, ¿Crees que todo esto fue solo por ti?, Estás equivocado y te comportas como el mocoso que eres. Él... él no tenía otra salida. Si no hubiera pagado por lo que hizo, entonces esas cosas los hubieran seguido persiguiendo por el resto de su existencia. Te acaba de liberar de algo mucho peor que tu pequeña aventura aquí. No eres el único que ha perdido a alguien querido por culpa de estas cosas. Pasa todo el tiempo, están en todos lados causando daños como este. ¿Tú crees que solo los cazamos porque es nuestro trabajo?, podría estar trabajando en un maldito Mcdonnald's y dejarlos de lado pero no puedo hacerlo — Hizo una pausa y respiro profundamente para tranquilizarse un poco. Estaba confesando algo que no muchas personas sabían. Detrás de su fachada de chico rudo y cazador de entidades paranormales se escondía la verdadera motivación de sus actos. Él y su hermana hacían el trabajo por que intentaban que otras personas no tuvieran que sufrir lo mismo que ellos -, ¿Por qué no tomas ese odio que tienes dentro de ti y te haces un par de cojones con él?, Es tiempo de que madures y te des cuenta de que esto no es un maldito juego. ¿Acaso no me dijiste que querías dejar de ser débil?, Pues así es como se empieza -.

ElliotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora