Cristian POV
- ¡Hey, pez gordo! Sal de esta oficina. ¿Qué pretendes? ¿Acaso piensas en perderte tu despedida de soltero? – Elliot Grey entro a la oficina de su hermano menor, como el único hermano de Cristian se había dado a la tarea de organizar la despedida de soltero de su hermano.
Cristian llevaba seis años de novio con Leila, no se habían casado porque sentía que no estaba preparado, ya que se había prometido dar ese gran paso cuando su empresa fuese una de las más solida y fuerte del país, no quería estar a la sombra de las empresas de su familia, él quería brillar con luz propia y ofrecerle eso a su futura esposa a quien amaba según él sobre todas las cosas.
-Estoy trabajando Elliot. No quiero ir a ninguna fiesta, lo único que quiero es estar con mi novia- Respondió Cristian muy enojado.
-Pues ya tienes varios años con ella y lo estarás el resto de tu vida. Así que mueve ese lindo culito, hermano que los chicos ya nos esperan en la limo- Elliot tomó la portátil de su hermano y se la llevo para que este le siguiera y así lo hico Cristian, pero enojado. Le entregó a Taylor la portátil de su jefe para que la devolviera a su lugar ya que había conseguido que su hermano saliera de su oficina.
-Jaso, estás de día libre, yo me encargaré de tu jefe- Le dijo Elliot a Taylor que lo miraba con un remedo de sonrisa y tomaba la portátil de sus manos. Sin embargo, Jason no se fiaba de las locuras del mayor de los hijos Grey así que él seguiría a su jefe a distancia. No se sabía que podría suceder en cualquier momento.
A regañadientes Cristian se subió a la limosina, de ahí en adelante todo fue alcohol, bromas y risas. Visitaron los bares más lujos de New York, para las tres de la mañana estaban en el night club más famoso de la ciudad, los cuatro estaban en una función privada de las mejores bailarinas de pole dance del centro de diversión nocturna. A pesar de que Cristian estaba bastante ebrio a causa de los tragos que le hacían beber su hermano y amigos, su mente estaba en la mujer que lo había hechizado desde hace años. Ella al no tener amigas y no ser el santo de devoción de su madre y hermana no tendría fiesta de despedida, había decidido quedarse en su apartamento, no obstante, Cristian se sentía culpable de estarse divirtiendo, sabiendo que ella estaba en ese lugar sola triste y aburrida, por lo que tomo una decisión.
-Chicos iré al baño- Informo Cristian a sus amigos.
-Ve con cuidado, Cristian- Dijo Ethan.
- ¡Hey, Cristian! Llévate a una de las chicas para que te ayuden con la bragueta- Dijo Jack riéndose de su amigo.
-No... no yo puedo solo- Afirmo parándose derecho y cuadrando lo hombros para demostrar que a pesar del alcohol podía mantenerse derecho.
En los sanitarios para caballeros de verdad uso el sanitario, pero al terminar llamó a un taxi para que lo llevara a su destino, espero el taxi a la salida del local bajo la atenta mirada de Jason a la distancia, quien lo vio subir a un taxi, él como su guardaespaldas ya imaginaba a donde iba, muchas veces lo había llevado a ese lugar durante los pocos años que tenía de trabajar con el señor Grey.
Lo vio salir tambaleante del taxi en silencio. Cristian por su parte caminaba al elevador, el portero lo dejo pasar sin preguntar nada, él sabía quien era aquel joven y a quién iría a visitar. Cristian Grey apenas podía sostenerse mientras subía en el elevador y se preguntaba porque Leila nuca había aceptado vivir con él casi desde el primer día que se habían conocido habían compartido intimidad, sin embargo, acepto su independencia. Lo que Cristian encontraría al llegar sería la respuesta a la pregunta que se había hecho en el elevador.
Lo extraño de todo es que cuando llego la puerta no estaba asegurada, era como si lo estuviesen esperando, la luz de luz de la sala estaba encendida, pero Leila no estaba ahí lo extraño era que sobre la mesita de centro del juego de sala había vasos con residuos de bebida dos pares de zapatos, pero lo que le extraño era uno era masculino y no precisamente suyos.
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Renaciendo de las Cenizas
FanfictionEste es un Fanfiction de mi autoría, no permito bajo ningun témino usar esta historia, sea adaptaciones o reproducciones. Algunos de los personajes de esta historia le pertenecen a la escritora E. L. James autora de la saga de 50 Sombras de Grey, ot...