El Profesor Dominante

15. Quería Control.

Pov Profesor Díaz.

Simplemente me sentía muy bien con el plan que estaba a punto de llevar a cabo, lo que tenía muy claro como objetivo era separar a aquel chico de mi Dan.

La mañana pasó relativamente rápida ya que solo esperaba el momento para ver a Dan y la sorpresa que se llevaría al ver que no estaba tan destrozado como él lo esperaba.

Cuando entre al salón no me pude controlar y mi sonrisa me delataba al mostrarme feliz, cosa que Dan notó inmediatamente aunque bajo la mirada y se hizo el desentendido.

Inicié la clase como normalmente lo hago a excepción de que no pedí la participación de Dan.

Al parecer aquello si lo desubicó demasiado ya que en ocasiones me miraba con algo de intriga en sus ojos, lo que me hacía más feliz ya que notaba que aquello que me dijo el día de ayer no me había afectado.

Aunque él no sabía la verdadera razón por la que me encontraba feliz y es que el profesor Rodrigo Domínguez era arquitecto también y el día de hoy iba a presentar una conferencia en el gimnasio de la universidad.

Lo que me daría la oportunidad de conocerlo en persona y entablar una conversación pequeña con él.

Sin darme cuenta la clase paso más rápido ya que se había reducido un poco el horario por la presentación lo que nos daba el fin de la clase. Cuando salieron todos los alumnos solamente quedaba Dan que parecía muy interesado en mi nueva actitud con él.

— Joven Villado, ¿Por qué no ha salido? — le dije sacarron con una sonrisa pequeña, ya que quería ver qué tanto aguantaba él.

— Me parece que usted tiene algo que decirme — me estaba retando, lo que me parecía interesante ya que en la mayoría del tiempo se notaba muy sumiso.

— Exacto, te pediría por favor que dejaras tú relación con el joven Fernando — le solté de golpe.

Aquel comentario lo dejo totalmente desubicado, ayer había investigado un poco de aquel joven insolente que creía que me quitaría a Dan tan fácilmente. Su silencio solo me confirmaba más que se trataba de él.

— No es bueno para ti, deberías de dejar de juntarte con el — agregué ya que me había enterado de unas cosas muy interesantes de aquel chico.

Simplemente que había abusado sexualmente de 3 chicos menores de edad hace ya un tiempo, lo que lo hizo cambiar de ciudad ya que en es natal de Monterrey al igual que Dan, solo que intentó hacer una vida nueva y casi lo logra a no ser por el increíble investigador privado que tengo a mi servicio.

— ¿Qué? ¿Por qué?, usted no es nadie para decirme con quién me junto y con quién no, aparte usted no conoce nada de Fer — estaba muy tentado a decirle todo de una vez, pero eso arruinaría mi plan.

— ¡Te lo estoy ordenando!, lo dejas o tendré que hacerte aceptar mi propuesta a la mala — grite haciéndolo estremecer completamente por mi actitud dominante.

— Usted no me pude obligar a nada que no quiera hacer — respondió muy enojado, iba a responderle pero agregó — y qué le quede claro que no voy a aceptar y no me va a obligar a nada, que tenga buena tarde profesor.

Salió apresurado del salón echándome un último vistazo, sonreí aún más sínico, lo que le sorprendió pero siguió con su camino.

Aquello había resultado mucho mejor de lo que pensaba ya que quería que Dan dudará un poco de su chico.

Poco a poco le enviaría las pistas de su amado Fernando Mendoza, alias “el bicho" según decía la nota que encontré muy oculta entre las noticias de Monterrey. Vaya que tenía muy buena herramienta, no tan grande como la mía pero eso decían las víctimas de sus actos.