⸻27

185 30 3
                                    

—¡Lo logramos!

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Lo logramos!

Entre vítores y abrazos, algunos soldados festejan en cuanto logran divisar el cuerpo inserte de Reiner sobresalir de la nuca, con la mitad de su cabeza explotada producto de las lanzas relámpago.

Elias exclamaba furioso de todas maneras, Jean se le había sumado, aunque sus acciones denotaban que estaban aliviados y felices, la mueca en sus rostros expresa que a pesar de haber alcanzado su objetivo, no se sentía mejor.

Y eso frustraba al peliplata, puesto que había vengado en gran parte la muerte de sus padres matando al responsable de aquella matanza, pero aunque lo hubiera logrado no lograba sentir satisfacción ni mucho menos realizado. Se sentía angustiado, lleno de terror y muy cabreado.

Sasha y Connie lloraban, ni siquiera se molestaban en fingir, no tuvieron miedo de demostrar la tristeza que los inundó a todos por haber asesinado a quien consideraron un amigo y hermano mayor.

Y Bruno no estaba mejor que ellos, la soledad y el vacío en su mirada era algo que ni Armin ni Mikasa lograron soportar, tuvieron que desviar sus ojos a la escena frente a ellos, sin ser capaces de aguantar todo lo que Bruno demostraba con esa expresión en su rostro.

—¡Aún no se terminó! —advierte Hange, nerviosa al notar como cada uno de esos soldados bajaba la guardia creyendo que el peligro había acabado.— ¡Prepárense para lo que se avecina!

El rubio avanza sobre el tejado, sus manos tiemblan empuñando las espadas. Al pasar por un lado de Armin, le escucha hablar con Mikasa.

—Ni siquiera pudimos pactar con él. —dice con pesar.— Porque a nosotros nos falta muchísima información. Y no somos capaces de capturar a un humano que se transforme en titan.

—No teníamos otra opción. —musita deteniéndose a su lado, sin poder apartar la mirada de Reiner, pero aún alerta a su alrededor.— Reiner siempre ha sido un terco devoto a su pueblo, ningún pacto sería suficiente para hacerle razonar.

Suelta sin más, sin miedo a que pudieran malinterpretar o deducir por su propia cuenta la razón de sus palabras. Armin se gira para mirarle, encontrándose por unos breves segundos con la mirada ámbar de Bruno. El más pequeño siente como si de un momento a otro, todo lo que alguna vez escuchó salir de sus labios cobrara sentido.

Como si esas palabras albergaran una pieza de rompecabezas, la última que le faltaba para confirmar sus sospechas. Y ésta vez, bajo la analítica mirada de Arlert, el mayor no titubeó. No se vio abrumado como si hubiera dicho algo que no debía, no se veía nervioso como un pequeño venado rodeado de depredadores a punto de lanzarse a su cuello, no se veía angustiado.

Su mirada solo expresaba el vacío de su alma, la tensión que rodeaba al chico desde la noche anterior no había sido ignorado por nadie, y Armin comenzaba a creer que aquellos pensamientos absurdos que se obligó a olvidar, no eran tan errados como creía.

❛SACRIFICE❜ ⸺ 𝗔𝗧𝗧𝗔𝗖𝗞 𝗢𝗡 𝗧𝗜𝗧𝗔𝗡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora