Al día siguiente amanecí con un dolor de cabeza muy fuerte, no podía ni siquiera abrir los ojos, tenía mucho asco, frío y calor al mismo tiempo, y muchas ganas de llorar.
Si no fuera Virgen pensaría que estoy embarazada.Mi sufrimiento fue interrumpido por un toque a la puerta. Se que fue un toque leve, pero mi cabeza me vibró horrible.
-Niña Isabella, puedo pasar?- preguntó Quintina
-Mhm- murmure haciéndola pasar
-Leon me pidió de favor que le subiera el desayuno, junto con unas aspirinas- dijo Quintina dejando la bandeja alado de mi.
-Leon?- preguntó extrañada
-Si me dijo, que estaba enfermita- dice tomándome la frente -No tiene temperatura, seguramente es solo un resfriado
-Si un resfriado- dije sentándome en la cama -Leon te pidió que hicieras esto?- pregunte aun sin creerlo
-Si, dijo que ayer en la noche te vio muy mal, y que lo más seguro es que amanecerías enferma- dice Quintina sentándose y dándome dos aspirinas, con un vaso de jugo -Lo mejor es que se quede descansando- dijo antes de irse
Cuando se fue me quede pensando en porque Leon haría algo así.
(...)
Esa día no me levante de la cama en todo el día, fue horrible. No me quedaron ganas de volver a tomar.
Estaba apunto de irme a la Hacienda para hacer unos trabajos, cuando baja corriendo mi madrina de las escaleras.
-Madrina qué pasa?- le pregunté preocupada
-Unos asaltantes entraron a la Hacienda de Sarita- dice corriendo hacia afuera, mientras yo la seguía.
Corrimos hacia las caballerizas donde estaba Juan David.
-Juan David! Acaban de asaltar la hacienda de la tía Sarita, ándale vamos- dice Norma haciendo que Juan David deje lo que está haciendo y nos siga afuera hacia la camioneta de Norma.
En eso llegan los mellizos.
-Ey a donde creen que van?- les dice Juan David
-A la casa de la Tia Sara, ya nos enteramos de lo que está pasando- dice Erik
-No podemos ir con las manos vacías, traes el revólver Juan David?- dice Leon
-Nada de armas, a la casa, órale, pa dentro- les dice Juan David
-Por que nos tenemos que quedar, vamos a apoyar a la familia- dice Erik deteniendo la puerta de Juan David
-Que te quedas Erik- dice Juan David arto
-Si nos quedamos nosotros te quedas tú también- dice Leon
-A ver ya, vamos todos ya- dije arta de escucharlos pelear
Nos subimos todos a la camioneta para ir a la Hacienda de Sarita.
(...)
Llegamos y vimos a todos afuera de la casa. Yo corrí a ver a Gaby.
-Gaby estas bien?- dije abrazándola
-Isa, yo estoy bien, pero nadie encuentra Nino no saben donde está- dice llorando abrazándome
-Ya muñequita todo va a estar bien, tranquila- dije acariciando su cabello
(...)
Decidimos ir las dos con Juan David y los mellizos a buscar a Nino por la Hacienda.