All for you | TK

2: Best of me

—Ya no vas a querer comerlo si lo sigues revolviendo así.

Pero eso a Jungkook no podía importarle menos, no por el momento.

—Estoy liberando mi frustración en este helado, déjame —murmuró con el rostro arrugado y la cuchara de plástico siguiendo los mismos movimientos que estaban convirtiendo su helado napolitano en una mezcla marrón que lucía desagradable—. Así lo comeré, da igual.

Namjoon rió bajito y detuvo la porción que estaba a punto de llevarse a la boca cuando recordó la razón por la que Jungkook lo había citado ahí.

La misma razón por la que estaba así de irritado.

—¿Ya vas a decirme qué fue lo que ocurrió? —Namjoon preguntó con cautela, con ambas cejas alzadas y el rostro levemente ladeado—. ¿O vas a seguir evadiendo el tema por más tiempo?

Jungkook alzó la vista de su mezcla viscosa ante su voz y relajó su expresión cuando notó al beta mirarle con genuino interés.

¿Por qué le prestaba tanta atención justo cuando quería evitar el tema?

Jungkook meneó la cabeza desganado.

—Ocurrió algo inesperado —dijo después de suspirar rendido, haciendo una mueca asqueada cuando tomó un poco de su helado revuelto y lo llevó sin más a su boca—. Debí suponer que algo como esto pasaría desde antes. De verdad es imposible que las cosas salgan a la perfección y apenas ayer lo noté. O solo lo recordé... quién sabe.

Namjoon chasqueó la lengua.

—¿Fue Taehyung? —se atrevió a preguntar y el omega negó de inmediato, pero después de considerarlo por un segundo más, terminó por convertirlo en un asentimiento que le hizo fruncir el ceño.

—Es culpa de su maldito olor —Jungkook murmuró con su mirada descendiendo hacia el postre y lo aplastó aún más con un puchero en sus labios—. Se supone que mi tarea era invitar a Minhyun al cine para ver su reacción, y eso hice. Se lo dije el fin de semana y me sorprendió cuando Minnie dijo que sí. Incluso dijo que Taehyung le agradaba, ya te había dicho —soltó con frustración y Namjoon no pudo evitar sonreír poquito, porque esas mismas palabras habían salido de su boca con mucha felicidad hace tan solo un par de días atrás—. Pero hoy en la mañana Minhyun me preguntó si Taehyung iba a llevar a su omega.

La sonrisa se le borró del rostro.

—¿Qué? —preguntó con el ceño fruncido y Jungkook asintió con la mirada aún hacia abajo.

—Minnie dijo que olía un omega en él, así que supuso que estaba unido o algo así. Yo creo que por eso no le molestó en absoluto que saliéramos con él.

—Pero ¿por qué? —fue lo único que Namjoon pudo decir, atónito porque no tenía sentido—. ¿Qué omega?

Y Jungkook lo entendía a la perfección. Él había reaccionado igual.

—Exactamente —murmuró irritado, clavando la cucharita en el recipiente antes de soltarla, suspirando frustrado cuando esta se cayó dentro del helado derretido, desviando su atención al beta después de ello—. El problema es que Taehyung no huele a ningún omega, pero su aroma es naturalmente un poco más dulce de lo que debería, supongo que Minhyun se confundió un poco con eso.

Namjoon decidió que no era un buen momento para reírse.

—Me parece que es una posibilidad —asintió y empezó a comer su postre cuando supuso que ya había pasado la peor parte—. Yo también siempre he creído que Taehyung no huele como un alfa usualmente hace, pero jamás creí que alguien podría llegar a confundirlo con el aroma de un omega porque tampoco entra dentro de esa casilla.