All for you | TK

24: Closer Than This

Jungkook no podía respirar.

Tenía la espalda apoyada contra la pared junto a la puerta de su casa y las caderas presionadas con fuerza para que no se moviera contra el cuerpo que cubría el suyo, ahogándose con un demandante beso brusco que le impedía hablar o siquiera separarse, con los labios rojizos y una sensación de hormigueo por las mordidas y succiones que le hacían querer aún más.

El tacto que ardía sobre su ropa subió lentamente hasta aprisionar su delgada cintura con fuerza y Jungkook recibió con gusto el beso acalorado que le dio el alfa, jadeando suavemente. Las manos inquietas del omega tomaron las contrarias para llevarlas más hacia abajo cuando estas acariciaron delicadamente su espalda baja, y abrazó el cuello de Taehyung para acercarlo y hacer el beso más profundo, ansioso de sentir más del calor abrasador que crecía en su vientre y le hacía presionar los dedos sobre la ropa ajena, casi temblando de anticipación.

Oh.

—Quedémonos en casa —propuso sin aliento, besando suavemente los labios del alfa que jadeó contra su boca, murmurando complacido cuando este le gruñó y apoyó todo su cuerpo cálido contra el suyo—. Te cocinaré la cena.

—Ya hice la reservación —susurró con voz ronca por la presencia dominante de su lobo, aspirando por la boca para calmar sus latidos acelerados y el color rojizo que quería sustituir el de sus ojos, dejando un pico en los labios rosados de Jungkook cuando este hizo un pechero—. No puedo cancelarla. Ya nos cambiamos y preparé todo desde hace semanas, dijiste que querías que saliéramos en una cita.

Jungkook lo pensó y asintió con una sonrisa, abrazándolo más fuerte porque estaba enterado de que el alfa se había esforzado para salir a cenar con él, hundió el rostro en su cuello para llenarse los pulmones de su olor grueso que emanaba de su piel y dejó un corto beso sobre su glándula de olor, soltándose cuando el otro lo hizo para acomodar el cuello de la camisa que él mismo estiró hace unos minutos.

—Está bien, tengamos una cita —el omega lo miró con una tímida sonrisa en los labios y las mejillas ligeramente sonrojadas, correspondiendo el beso suave que recibió cuando Taehyung tomó su mano y entrelazó sus dedos juntos. El alfa besó sus nudillos con cariño y sus ojos encontraron los suyos para darle el tipo de mirada que hacía que Jungkook se sintiera agobiado con sus sentimientos, su corazón se le aceleró con fuerza como si fuera un adolescente enamorándose por primera vez cuando Taehyung le sonrió con dulzura.

Oh.

—Te ves muy bien —el alfa dijo mientras se dejaba llevar por el omega que caminó los pasos que les faltaban para llegar a la puerta, abrazándolo por la espalda mientras este cerraba entre risitas por los besos cortos que depositaba en su cuello—. Pensándolo bien, no sé si quiero que todos en la calle te vean así. Mi omega es muy bonito.

—¿Quieres que salgamos o no? —preguntó con una ceja alzada al mirarlo sobre el hombro, cruzándose de brazos cuando Taehyung aflojó el agarre para darle la vuelta.

—Sí, he esperado mucho para que podamos salir en una cita como esta —murmuró con una sonrisa sincera y un brillo de ilusión en los ojos que tocó una fibra sensible de Jungkook. El omega lo miró conmovido y tragó saliva para intentar deshacer el nudo que quiso formarse en su garganta, sus ojos picaron y sus manos acunaron con gentileza las mejillas contrarias, dejando un delicado beso en cada una.

—Sabes que te amo, ¿verdad? —dijo con una sonrisa inquieta para ocultar la opresión en su pecho, pero el alfa se dio cuenta de su batalla interna.

—Lo sé —asintió mientras se acercaba a dejar un suave beso en su frente, tomando su mano para caminar hacia el auto—, pero me debes muchas citas.