Luego de haber abandonado a su última creación a su suerte, Bobby ha roto su prohibición de no crear nuevas criaturas, todo por el empeño de salvar al joven Junhoe de una muerte autoinflingida.
Aún como vampiro June vive penando, culpándose por la m...
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La cena transcurrió con relativa normalidad. Al inicio Song se había mostrado algo inquisitivo con sus preguntas hacia June, quien terminó contándole que era un estudiante de último año, que actualmente vivía con dos de sus "hyungs'' y poco más.
Para su buena fortuna, no pasó mucho antes de que la efusividad de Chan desviara la conversación hacia temas más amigables, platicando de cómo le había ido en su viaje de negocios y todas las cosas que había visto en aquel país extranjero al que lo habían llevado.
Concentrado como estaba en él, se dio cuenta de que June removía la comida de su plato y cada cierto tiempo se llevaba los palillos a la boca, en realidad vacíos. Algunas veces sus movimientos lograban que algo de su alimento cayera de su plato, que se apresuraba a limpiar con su servilleta. Con todo, el efecto de que comía era bastante convincente al grado que ninguno de sus dos hermanos lo había notado.
Aún cuando la comida se terminó, la plática seguía bastante fluida así que Jinhwan decidió sacar su arma secreta: una botella de vino tinto. Sirvió las cuatro copas y se cuidó de que las de sus dos hermanos estuvieran siempre un poco llenas.
En algún punto volteó hacia June justo para verlo acercando la copa a sus labios. Dado que se había sentado a su lado, pudo ver perfectamente cómo inclinaba la copa sin que el líquido rojo terminara de tocarlo, aunque quedó bastante cerca. Justo cuando creyó que iba a tocarlo, June bajó la copa y se pasó la lengua por los labios, como si estuviera aún disfrutando de su sabor; su actuación era bastante buena.
Jinhwan siguió todos sus movimientos sin perderse detalle, tragó duro al ver la lengua rosada humedecer los labios así, incluso se percató del brillo blanco de uno de sus colmillos gracias al movimiento.
Aquella boca tan tentadora y tan aparentemente suave sonrió de medio lado, de pronto. Al levantar la vista notó que June lo estaba viendo.
De inmediato desvió la mirada hacia su propia copa, completamente sonrojado, y depuró su contenido de un solo trago en un intento por calmar los nervios que querían dominarlo al ser atrapado en su inspección.
Tampoco le pasaron desapercibidas las risitas bajas de sus hermanos. También se habían dado cuenta de la manera embobada en que miraba al más alto, y su sonrojo cuando lo descubrieron.
Antes de que pudieran empezar a burlarse, un gran bostezo acometió al menor de todos y pronto se contagió a Song. Jinhwan hizo un buen trabajo ocultando su sonrisa de victoria, su plan había funcionado.
—Creo que esta debería ser la última ronda.
—¿Ya tan pronto nos corres? —preguntó Song burlón, un poco más desinhibido gracias a la bebida.
—Chanie está cansado Song, y ya es tarde, lo mejor será que vayan a descansar. Nos veremos pronto.
Chanwoo quiso alegar algo, pero un nuevo bostezo lo acometió, no tenía demasiada resistencia para el vino.
—De acuerdo, pero vendremos en unos días para ver cómo sigues, ¿de acuerdo? —más que un plan, parecía una amenaza, sobre todo porque Song lo dijo mirando directamente a June.
—Bien, bien, saben que me encanta ver a mis dongsaeng así que no hay problema, solo no vengan tan tarde para que tengamos más tiempo para platicar.
No notó lo que había dicho hasta que June lo miró con el ceño fruncido, soltó un suspiro e hizo un gesto con la mano como para descartar su comentario.
Fue así que los otros dos terminaron su última copa de vino antes de despedirse. Una vez en la puerta, Song le dedicó una larga mirada, como asegurándose de que todo estuviera bien. Por el contrario, Chan le dedicó una gran sonrisa, como si luego de notar el comportamiento de su hyung se alegrara por él; también le dio un apretón de manos amigable a June.
Así terminaron solos de nuevo. Jinhwan tomó su copa con la intención de rellenarla, June se acercó a él con su propia copa y vació su contenido en la suya.
—Aquí, de todas formas yo no puedo tomarlo.
Jinhwan asintió antes de tomar un sorbo, sin embargo al hacerlo recordó la imagen de la boca de June y el movimiento que hizo con su lengua, por lo que casi se ahoga. El más alto le dio unos golpecitos en la espalda.
Para cuando volvieron a sentarse a la mesa los ojos de June habían recuperado su sobrenatural color violeta.
—Entonces, ¿me explicarás esa broma con tus hermanos? —preguntó June con una sonrisa.
Por algunos momentos Jinhwan solo se quedó mirando su copa, moviéndola en círculos para airear el vino en su interior. Parecía pensativo y un poco triste por lo que June quiso retirar su pregunta.
—Lo siento, si es un tema delicado o no quieres hablar de eso, está bien.
El peliblanco soltó un suspiro antes de beber la mitad de su bebida de un solo trago, al bajar la copa había en su rostro una media sonrisa que parecía a la vez irónica y triste.
—Está bien. En realidad, creo que si hay alguien que puede entenderme serías tú, y los otros vampiros. Cuando tu otro compañero me preguntó "qué era", no pude contestarle porque, en realidad, ni yo mismo lo sé.
—¿A qué te refieres?
—Bueno, hay algunas cosas que son diferentes en mí —se pasó la mano por el cabello—, por ejemplo mi cabello, y mis ojos, desde que tengo memoria han sido de ese color. La abuela decía que yo era un regalo de Dios y que por eso era diferente al resto.
>Pero, el mayor rasgo distintivo siempre ha sido mi cuerpo: la manera en la que crezco, en la que envejezco, es muy diferente a la de las otras personas. Si Chanwoo y Yunhyeong me llaman hyung, es porque en realidad soy su hermano mayor, Song es el mayor de los dos, y yo soy más grande que él por 18 años.
June lo miró sorprendido mientras él terminaba su copa.
