El timbre llevaba 10 minutos sonando, lo sabía porque el reloj estaba en la mesita de noche a lado de su cama.
Estaba agotado ya que la noche anterior su bebé parecía estar en una pequeña fiesta, las pataditas muy dolorosas pero eso no le impedía sonreír mientras le pedía a su bebé que lo dejara dormir, porque papi debía descansar para él nacer sano.
En fin, su falta de sueño no parecía importarle al intruso en su puerta. Ya está. Irá a correr a quién sea que esté ahí.
—Hola, Harry.
Pero sin duda no se esperaba lo que vio. Quiso llorar, gritale que se fuera, dejar que todos los sentimientos dentro de él actuaran en su lugar, pero se contuvo. Porque ese chico no tenía la culpa.
—Daniel... —murmura intentando buscar en su mente alguna explicación de cómo consiguió su dirección— Pasa...
Camina hacia la sala seguido del pelinegro quien cerró la puerta al entrar. Una vez que ambos están sentados en distintos sofás todo se inunda en un pesado silencio. Ninguno de los dos sabía cómo comenzar.
—¿Cómo me encontraste? —muerde su labio inferior en señal de nerviosismo. No se da cuenta pero abraza su vientre de manera protectora.
—Me costó mucho convencer a tu ginecólogo —le sonríe avergonzado—. Perdón si te incomodo pero era necesario venir.
Niall, por supuesto.
—¿Por qué mentiste?
Daniel agradecía que Harry fuera quien tome la iniciativa en las preguntas, aunque estuviera mal. Se supone que él vino que hablar con Harry, animarlo y hacerle saber todo.
—No quería que te preocuparas innecesariamente –responde con tranquilidad.
Ante eso el rizado suelta una risa sarcástica. —¿Sin necesidad? ¿No eres tú la razón de todo esto?
Ante eso Daniel siente un dolor en el pecho. Él tenía razón, no podía negarlo.
—Louis te ama...
—¿Me dirás que esa noche no vi lo que vi? —endurece su mirada— ¿seguirás mintiendo?
—Harry, esa noche...
—Sé bien que Louis en su estado vulnerable puede ser un idiota. Era obvio que si no fue con Zayn y peleó conmigo solo quedabas tú para consolarlo —desvía la mirada, quería evitar que notara sus ojos acuosos—, él no irá con cualquiera estando así.
—Al parecer fue presuntuoso de mi parte creer que solo Zayn conocía a Louis tanto como yo —lo mira aunque el rizado no le entiende del todo.
—Estoy cansado. Si él te ama no puedo hacer nada —el rizado observaba Daniel rendido—. Ya no puedo seguir, ¿sabes? Es mucho solo para mí. Ya no quiero hacer excepciones, no quiero ser solo yo quien entregue todo, quien se sacrifique. Ahora tengo un hijo, una pequeña masita que debo poner sobre mi y por sobre cualquiera. Amo a Louis pero si él afecta el bienestar de mi bebé entonces no puedo tenerlo a mi lado, aún si eso me lastima.
Ante eso el pelinegro siente una gran culpa caer sobre él. Porque siempre supo que Louis y él se debían una conversación, que el castaño no fue el único en huir del pasado... y que solo quizás el hecho de que Louis aún continúe en el pasado es su culpa. Bueno, tal vez ese ya no es el caso. Louis parece listo para volver a caminar hacia su futuro, un futuro junto a Harry.
Pero el trabajo de Daniel aún no termina. Aún falta Harry para poder continuar, porque al parecer, no solo Louis vivía en el pasado.
—¿Sabes, Harry? Yo amé...
—Amas —corrige el rizado con un suspiro.
No es como si no lo hubiera notado ya, o simplemente seguía estando celoso. Pero en vez de corregirlo Daniel asintió y sonrió.
—Me has leído por completo —lo observa con tristeza—. Lo amo. Y en su momento sé que él también me amó a mi.
Eso hizo al ojiverde fruncir el ceño. ¿Amar en pasado? Ese chico estaba ciego, Louis lo metió al que era su pequeño hogar y lo besó apenas discutieron, era obvio a quién amaba. Pero ya no diría nada, decirlo en voz alta más de una vez ya era difícil.
—Mira yo soy su pasado. Créeme que aveces esa parte de mi que está celosa quiere restregar eso en tu cara, que así tengas su presente y su futuro nunca podrás tener su pasado, solo yo.
Luego de esto hay una larga pausa en el que Harry observa a Daniel con una mueca y el pelinegro simplemente está avergonzado por decir sus pensamientos en voz alta.
—Pues dilo —suspira el rizado—. No hay nada más que yo pueda perder.
—El problema es.. que el pasado ya no es importante para Louis —le sonríe melancólico—. Ya avanzó hacia el futuro en busca de un futuro que se convertirá en su presente y luego su pasado. En los tres estás tú y siempre estarás solo tú, estás en su corazón para compartir eso.
Ante eso Harry no puede evitar que sus ojos de cristalicen y deba desviar la mirada porque no quiere que ese chico entre todas las personas lo vea así.
¿Qué buscaba? ¿Burlarse de él, jugarle una broma? ¿Acaso no sufrió lo suficiente ya?
—Harry, por favor —se pone de pie para caminar hacia el sofá donde se encuentra el rizado y lo toma de las manos–. Tienes que creerme. Yo hablé con él, lo sé.
—¿Y tú esperas que les crea? A los dos chicos que me mintieron todo este tiempo –se le escapan algunas lágrimas y lo odia.
Él estaba muy bien, lo hizo muy bien este último mes y viene este chico a... arruinarlo.
—Fue mi culpa que todo esto pasara, Harry. Y te pido perdón por ser la causa de que Louis fuera así... —siente su estómago retorcerse por dentro y se maldice por querer llorar también–. Pero no lo lamento.. porque de alguna manera, siento que si algo hubiese cambiado sus caminos no se hubieran cruzado.
Observa la mirada confusa de Harry y le sonríe.
—Sé que suena tonto, pero así es como me siento —ríe un poco torpe.
•Cat🐾
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Bebé A Bordo - Larry [M-preg] ¹
FanfictionUn hombre embarazado no era algo novedoso, pero si para Harry, quien no deseaba tener un bebé. Casi lloró al enterarse. Lo primero que pensó fue que Louis lo dejaría, así sería cuando se entere. No podía imaginar una cara felíz en sus pensamientos...