Como Eres en Verdad | Jearmin

Parte 2 | Capítulo 2

Todo iba según lo planeado, Armin y Mikasa se reunieron para ir juntos a casa de Eren para ver cómo estaba él, y también Historia.

No estaban de lo más seguros de cómo encarar tal situación pero tenían bien sabido que tenían que estar ahí para ellos y no faltarían en tal cosa.

Cuando tocaron la puerta de la casa de Eren, quien los recibió fue Carla.

—Chicos, hola —ella los saluda con una sonrisa, sin embargo la tristeza en ella y en esa casa eran palpables en el ambiente.

—Hola. Veníamos a ver cómo estaba todo, si están bien —habla Mikasa.

—Chicos, muchas gracias, está siendo una época dura para todos —habla dulcemente—. Estoy segura de que están preocupados, ayer Eren dejó de usar su celular por completo. Es la primera vez que le veo hacer eso desde que le dimos uno.

—Sí, no ha estado respondiendo nuestros mensajes, por eso queríamos saber si estaba todo en orden.

—Pues están lo mejor que pueden estar. Comen bien pero no salen mucho de la cama, necesitan este tiempo para recuperarse.

—Estoy seguro de que Grisha sabrá cuánto es sano dejar la situación así antes de empezar a salir más. ¿Está él bien?

—Sí, lo está, lidiamos con ello. Zeke también vendrá un tiempo para ayudar a la situación.

—De seguro ayudará mucho, creo que Eren les necesita a todos ahora.

—Sí pero no está recibiendo mucho eso ahora, creo que necesita tiempo a solas. No se preocupen, cuando tenga que salir le ayudaremos a hacerlo, no les dejaremos quedarse allí para siempre sin poder sanar.

—Lo entendemos, a veces es necesario tener tiempo para uno mismo antes que recibir ayuda externa. Solo queríamos hacerle saber que estamos aquí, siempre que nos necesiten pueden llamarnos y responderemos para ayudar.

—Muchas gracias, se los haré saber.

—¿Podría darle esto a Eren? Lo hice para él, es su favorito. Las comidas que más amamos sirven un poco en malas situaciones, aunque parezca tonto —El rubio extiende un recipiente cubierto, donde residía el pastel favorito de su mejor amigo—. Traeré más para el resto de la familia mañana, si a ustedes les parece bien.

—Gracias, eso es muy dulce, Armin.

—Le dejaremos por ahora, esperamos noticias —dice Mikasa—. Lamentamos su pérdida y les deseamos lo mejor —inclinan levemente sus cabezas.

—Realmente es apreciado —Ella les da un pequeño abrazo, con lágrimas en los ojos, y los despide. Armin y Mikasa se van medio abrazados luego de eso, el ambiente era tan pesado.

Eren los vio cuando se iban, desde la ventana de su cuarto, sin embargo no se vio capaz de decir ni hacer nada. No estaba listo para salir de su casa, hablar con gente y seguir haciendo su vida.

—¿Quién era? —pregunta su novia.

—Mikasa y Armin... Tal vez luego les envíe un mensaje —Aunque ambos sabían que eso no era verdad.

—Disculpen —Carla toca la puerta.

—Adelante.

—Con permiso —Pasa dentro—. Armin y Mikasa acaban de venir a preguntar cómo estaban, quieren saber si están bien.

—Luego les haremos saber que sí —afirma la rubia.

—Respetan que necesitan su espacio, aunque dijeron que siempre que les necesiten pueden solo llamar, quieren ayudar.