Los lunes por la mañana, de alguna forma, se habían podido volver aún más insoportables para Jean.
La semana pasada ya había comenzado con todo esto pero eso no le quitaba lo espantoso.
Cada día antes de ir a la escuela ahora debía pensar en madrugar, en cursar clases aburridas y en los comentarios estúpidos de sus compañeros.
Cuando entró a su salón esa mañana lo primero con lo que se encontró fue con Louise sosteniendo unos panfletos.
—Jean, te buscaba —Ella se le acerca—. Ten, es de una charla que daremos —Le entrega una de las copias y el castaño hojea esta con la vista un momento.
—¿Esto es algún tipo de cosa religiosa? —Frunce el ceño—. Disculpa, soy ateo —intenta no sonar grosero—. Estoy seguro de que Nicolo es creyente, si buscas gente.
—No importa si no crees, es más o menos el punto, buscamos orientar gente. Dale una oportunidad —pide.
—Eh, disculpa pero... —rasca su nuca. Esas cosas realmente no le interesaban y no quería prometer algo que no haría.
—Por favor, realmente esperamos llegar a gente como tú —le interrumpe.
—¿Ateos?
—Homosexuales —afirma.
El pecho de Jean se comprime automáticamente ante esa palabra.
—Puede que las relaciones homosexuales estén bien a ojos del hombre pero a ojos de Dios son una abominación. Como no se reproducen es antinatural. Mucha gente no es consciente de esto por falta de aprendizaje sobre la religión. Por favor, permítenos ayudarte.
Él tuvo que luchar contra cada instinto en su cuerpo para no comenzar a decirle porque estaba hablando pura mierda.
Armin tiene razón. Ella está arraigada profundamente a sus creencias, cualquier cosa que Jean le diga no la hará cambiar su opinión, le hará desperdiciar tiempo y extender esta conversación oyéndola justificar su forma de pensar que solo le haría sentir peor.
No debía hacerlo, no debía hacerlo. Que viva en su ignorancia, no iba a cambiar nada de él.
—Louise, que sepas que nadie va a escuchar tu propaganda religiosa de mierda. Estamos en una escuela laica —Le devuelve su panfleto y va a sentarse a su silla de inmediato.
Bueno, era lo mejor que podía manejarse hasta ahora.
—¿Qué te dijo para que te veas así? —pregunta Sasha, sentada frente a él.
—Lo de siempre —Pone los ojos en blanco—. Estoy harto de la gente religiosa, son una mierda —suelta, desahogándose un poco.
—Eh, yo soy religioso —comenta Nicolo.
—Hablo de los religiosos entrometidos e idiotas —habla con brusquedad.
—¿Te dijo algo porque eres gay? —Connie consulta.
—Connie, ya te dije que no soy gay —lo mira, molesto.
—Oh, ¿iba en serio? Creí que era una excusa porque aún no querías decirlo.
—¿Por qué no querría decirlo si lo fuera? Ya todo el mundo sabe que no soy heterosexual.
—Tiene sentido, no pareces gay. Aunque tampoco pensaba que fueses bi —comenta.
—Connie, ya basta —pide Marco.
—¿Qué, dije algo malo? Sabes que estoy feliz de que hayas podido decirlo pero fue inesperado para todos.
ESTÁS LEYENDO
Como Eres en Verdad | Jearmin
FanfictionSi estás enamorado, ¿hasta dónde estarías dispuesto a llegar? Si te escondes de ti mismo, ¿cómo tienes una vida propia? Si cometes un error, ¿cómo serías capaz de sobrellevarlo? Si no te amas a ti mismo, ¿qué tanto te destruirías? Aceptarte y mo...