DECISIONES

Capítulo 36

 

💛

AUSTIN

No fue suerte.

Fueron ellos.

Pudieron comprar a quien quisieran con la historia y el cuento de que todo fue casualidad, pero sé que pedirle a Alex que se quedara quieto era como decirle a Diane que aceptara a Guilia, agradezco tanto que no lo matara porque después de todo hubiera sido un problema más.

No quiero pensar en que fuimos egoístas y dejamos a tres niños sin padres, necesito encontrar a los indicados que los adopten, no quiero dejarlos creciendo en los orfanatos.

-Deja de llorar, ya- Pido.

Gia se queja en voz baja soltando una risa.

-Fueron los tres días más horrorosos de mi vida.- Confiesa.

-No fue tu culpa, mujer- Beso su cabello.

Ella aprieta más sus manos en mi cintura negándose a soltarme.

-Pero no puedo quitar de mi cabeza que pude haber hecho más, se supone que soy la mejor abogada y...

-Esto era inevitable, lo sabes y lo sabíamos- Murmuro.

-Me alegro que estés libre, me alegro que Alex moviera todo para lograrlo- Susurra.

Beso su frente y me separo de ella para limpiar sus lágrimas.

-Lo hiciste genial, te amo mucho.

-Te amo más, hermano.

Sonrio pasando mi mano por su cabello para desarreglarlo un poco.

-Ahora entrare a mi casa, descansa ¿Si?- Pido.

-Dale.

No quiero pensar en todo lo que paso, quiero pensar en que necesito un momento a solas con mi chica, que necesito llegar a mi habitación y darme una ducha y dormir hasta recuperar todo lo que perdí.

Al llegar a la sala donde todos están y cuando digo todos es porque incluso el mismo panorama que tenía cuando me llevaron es el mismo.

Pero esta vez no me enfoco en nadie que no sea mi dulce Guilia cuando me sonríe y corre a mis brazos, envuelvo mis brazos en su cintura y beso su cabello, esta vez me alegro que no haya lagrimas esta vez en su rostro más bien haya una sonrisa que arregle todos mis males.

Tomo su mano y sin saludar a nadie y sé que saben que necesito tiempo solo nadie se interpone en mi camino mientras subo a mi habitación con Guilia siguiéndome.

Al entrar a mi habitación suelto la mano de Guilia y camino hacia mi baño, enciendo la luz, enciendo los chorros y a la vez el agua caliente de la tina, machuco el botón que enciende las burbujas de esta.

-¿Austin?- Susurra Guilia atrás mía.

No respondo.

Esperando que me perdone por mi falta de respeto, empiezo a desnudarme. 

Me doy una mirada en el espejo y me hundo en el agua cerrando los ojos.

Guilia permanece en el mismo lugar, su respiración ha cambiado, pero no se menea.

-Necesitaba esto, amor. 

Sonrie divertida, se sienta en la orilla posiblemente se moje un poco, acaricia mi cabello haciendome cerrar los ojos y disfrutar de esto. 

-Te amo- Susurra. 

Es todo lo que necesito, es todo lo que deseo en mis proximos dias. 

Abri mis ojos viendola.