EXTRA ESPECIAL

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🤍


LOS ANGELES

GUILIA


Actualmente ya vamos para seis meses de vivir juntos con Austin, todo es tan perfectamente imperfecto, estos dos últimos meses estuvimos viviendo en Boston porque cuidamos de nuestro amigo Alex debido a que estaba en recuperación después de un coma, no me molesto dejar todo pausado para acompañar a Austin cuando me lo propuso.

Me dio tiempo de conocer Boston y a la familia de Austin mejor, Salí algunos días con las chicas incluyendo a Elle, nuestra relacion no fue muy amigable, pero nos respetamos y estamos bien.

Venimos a Los Ángeles, porque veníamos por otro cambio de maleta e iremos con Alex en el avión privado hacia Colombia en busca de Lia Greco, la dulce y guapa novia de Alex.

No me equivoque al decir que lo vería así y con hijos.

Y ahora está enamorado de una cantante canadiense y esperan su primer hijo, todo es magnífico para todos.

Sin embargo ha pasado algo que acaba de cambiar mi mente y mi perspectiva, toco suavemente la puerta de la habitación de mi hijo a quien ya había saludado y lo extrañe mucho.

-Mamita- Lucas abre sus brazos para mí y me aprieta fuerte, beso su cabello tantas veces como pueda.

Mi primer bebe.

-Te amo. ¿Tienes tiempo para mamá? quiero contarte algo.

-Te amo más. Siempre tengo tiempo para ti.

Me parece irreal como nuestra vida cambio y como ahora la habitación de mi hijo sea todo lo que él se merece, sobra decir que soy la más feliz y agradecida.

No me estaba sintiendo bien para ser sincera, sin embargo lo deje pasar porque ya teníamos a Alex enfermo, pero decidí hacer una visita rápida a la doctora aprovechado estos dos días en Los Ángeles.

Y vaya sorpresa.

-¿Qué querías hablarme?

Lo digo sin anestesia.

-Estoy embarazada.

Lo cual me trajo muchas emociones contradictorias, para empezar cuando di a luz a mi Lucas, me dijeron muchas cosas entre ellas que no podría volver a quedar embarazada, teniendo en cuenta que mi primer embarazo fue una violación y que pase muchas complicaciones mediante el embarazo y durante el parto, mi matriz no iba a ser suficiente para tener a otro bebe.

No me preocupe por eso, porque en aquel entonces me consideraba una persona dañada, rota y sin necesidad de desear otro bebe, porque eso implicaría relaciones sexuales que nunca deseaba tener, porque me aterraba.

El trauma de aquel entonces parecía perfecto para no desear otro bebe y eso no era un problema.

Conocer a Austin y que me diera esa seguridad y amor que necesitaba me volvió loca, sin embargo, a la hora de tener relaciones sexuales siempre fuimos responsables, sin embargo, la posibilidad de un embarazo nunca paso por mi cabeza. 

Y no lo necesitábamos.

Porque tengo a mi hijo y Austin a los suyos.

Sin embargo paso y la idea me está volviendo loca de muchos sentidos, trayéndome momentos de mi maternidad con Lucas, pero sé que esta vez es diferente y sin embargo me arrepiento que no tenga tantos momentos lindos con Lucas como los que tendré ahorita en este proceso de embarazo.

-Mamá, ven- Lucas me jala abrazarme, puedo sentir su cuerpo temblar y lo abrazo fuerte.

-¿Qué piensas?- Cuestiono.

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